Mochila espa?ola y creaci¨®n de empleo

Sabido es que el verdadero tal¨®n de Aquiles de la econom¨ªa espa?ola viene siendo desde hace muchos a?os el nivel de desempleo existente. Este importante problema estructural es adem¨¢s la principal preocupaci¨®n de los ciudadanos espa?oles tambi¨¦n desde hace mucho tiempo, seg¨²n lo evidencian las sucesivas encuestas del CIS.

Vamos a hacer referencia en estas l¨ªneas a un tema que se ha venido debatiendo en diversos ¨¢mbitos desde hace alg¨²n tiempo, como es el de la denominada mochila austriaca, sistema existente en este pa¨ªs europeo dirigido a combatir algunos de los problemas relacionados con el empleo y el mercado del trabajo, y que con una orientaci¨®n similar se podr¨ªa aplicar en nuestro pa¨ªs, dando lugar as¨ª a una suerte de mochila espa?ola.

Vamos a recordar, en primer lugar, algunas de las caracter¨ªsticas b¨¢sicas del citado modelo austriaco, fruto de un gran acuerdo entre partidos (qu¨¦ envidia para nuestro pa¨ªs) en el a?o 2003. Se trata de un sistema que contempla la dotaci¨®n o destino por parte de las empresas de una proporci¨®n de los sueldos de sus trabajadores, concretamente el 1,53%, a un fondo de previsi¨®n o capitalizaci¨®n destinado a los propios trabajadores, para cuando tengan que salir de la empresa, bien por razones de despido, bien por una decisi¨®n voluntaria del trabajador, o porque cumplida su vida laboral pase a la situaci¨®n de jubilado. En cualquiera de estos supuestos el trabajador recibir¨¢ ese fondo que se ha ido acumulando a lo largo de su vida laboral, siendo por ello una especie de mochila que se llevar¨ªa consigo en los citados supuestos.

El problema del paro en nuestro pa¨ªs es profundo y estructural

Este sistema, que es legalmente obligatorio en dicho pa¨ªs, tiene ciertas ventajas para las empresas y los trabajadores. Por una parte, facilita la movilidad laboral, eliminando adem¨¢s los costes empresariales por despido, dado que el trabajador al dejar la empresa se llevar¨ªa su fondo acumulado, haciendo este las veces de indemnizaci¨®n por despido. Las empresas se ven por ello claramente predispuestas a la firma de contratos indefinidos, en lugar de temporales, ya que no existe ese temor o coste diferido que supondr¨ªan las citadas indemnizaciones, lo cual es bueno para los trabajadores. Ello aparte de que a las empresas les interesa l¨®gicamente que los trabajadores tengan un horizonte de estabilidad, para aprovechar su progresivo aprendizaje y la creciente adecuaci¨®n a los puestos de trabajo y a internalizar los objetivos de la empresa. Que este sistema contribuye a evitar la precariedad y temporalidad en los empleos lo muestra el hecho de que en el pa¨ªs austriaco m¨¢s del 90% de los contratos que se realizan son indefinidos. Por otra parte, este modelo, al margen de otros posibles factores, contribuye as¨ª al alto nivel de empleo existente en este pa¨ªs, en el que la tasa de desempleo est¨¢ entre el 4% y el 6% desde hace muchos a?os.

La implantaci¨®n en Espa?a de un sistema con una orientaci¨®n similar al mencionado, podr¨ªa pasar por distintas posibilidades o alternativas. En cuanto a la cuant¨ªa de ese fondo o mochila espa?ola, podr¨ªa tener un importe no demasiado distinto al existente en Austria, por ejemplo un 1,5%, o incluso un 2% del importe de las retribuciones del personal. Adem¨¢s, la creaci¨®n y el registro formal de este fondo, deber¨ªa ser absolutamente transparente, y figurar de forma expl¨ªcita en las cuentas anuales, tanto en el balance de situaci¨®n como en la memoria de cualquier empresa. Se tratar¨ªa de dotar de una forma continuada una provisi¨®n contable, esto es, una cuenta que aparecer¨ªa expl¨ªcitamente en el pasivo de los balances de las empresas, y cuya dotaci¨®n se har¨ªa con cargo a la cuenta de resultados de cada ejercicio. Ello conllevar¨ªa que mientras que el fondo de cada trabajador permaneciese en la empresa, esta podr¨ªa disponer durante esos a?os con cierta flexibilidad de esos recursos, que estar¨ªan as¨ª materializados en los correspondientes activos, lo cual conllevar¨ªa un aumento sostenido del fondo de maniobra o capital circulante de las empresas; ello sin perjuicio del correspondiente control por parte de la Administraci¨®n y/o los auditores, de cara a evitar usos indebidos de ese fondo de capitalizaci¨®n.

Los gastos o dotaciones a este fondo podr¨ªan incluso tener alg¨²n tipo de exenci¨®n fiscal, exoner¨¢ndose (total o parcialmente) a efectos del impuesto sobre beneficios, con lo cual las empresas se ver¨ªan incentivadas a la creaci¨®n de dicho fondo, dado que de esa forma disminuir¨ªan la base imponible del impuesto, y por lo tanto se ahorrar¨ªan el porcentaje correspondiente al tipo impositivo efectivo que pagasen cada a?o a la administraci¨®n tributaria, el m¨¢s general es un 25%, aunque hay que decir que numerosas grandes empresas tienen un tipo efectivo bastante menor que ese tipo nominal. El Estado soportar¨ªa as¨ª un porcentaje de la dotaci¨®n de esos fondos para los trabajadores, y quiz¨¢ se podr¨ªa establecer, para que resultase en parte compensado, que la dotaci¨®n de esos fondos por parte de las empresas tuviera que ir necesariamente destinada a trabajadores en paro, con lo cual el Estado podr¨ªa ahorrarse por otro lado las correspondientes prestaciones por desempleo que ven¨ªa pagando a esos trabajadores.

En cuanto a las causas o los casos en los que podr¨ªa disponer el trabajador de esa mochila o fondo acumulado, podr¨ªa ser la salida del trabajador de la empresa, bien de forma voluntaria, o bien solo en los casos de despido por parte de las empresas, salvo que la salida voluntaria fuera quiz¨¢ para crear una empresa por parte del trabajador saliente. La mochila acumulada la recibir¨ªa en todo caso el trabajador en caso de jubilaci¨®n, con lo cual ello podr¨ªa contribuir a aumentar las limitadas pensiones que recibe del sistema p¨²blico de pensiones, y que con toda probabilidad van a ir disminuyendo en los pr¨®ximos a?os, salvo que se tomen medidas pol¨ªticas adecuadas y urgentes para evitarlo, dada la situaci¨®n de quiebra t¨¦cnica en la que se encuentra actualmente dicho sistema p¨²blico de pensiones, que no va a tener ya fondos propios para desembolsar la pr¨®xima paga extraordinaria a los pensionistas (la de junio de 2020), dado que la hucha de las pensiones se ha quedado pr¨¢cticamente vac¨ªa con el desembolso de la paga extraordinaria de este mes de diciembre. Por otra parte, el sistema no puede seguir recurriendo indefinidamente a los pr¨¦stamos del Tesoro P¨²blico, por la imposibilidad de aumentar el d¨¦ficit y el endeudamiento p¨²blico.

El problema del desempleo en nuestro pa¨ªs es en todo caso profundo y estructural, y no se va a resolver con la implantaci¨®n de este sistema, pero medidas de este tipo, junto con otras varias, podr¨ªan contribuir a aliviar en alguna medida este importante y acuciante problema.

En todo caso y al margen de la posible implementaci¨®n de esta eventual mochila espa?ola para mejorar el marcado de trabajo y el empleo, es tan importante como urgente que los partidos pol¨ªticos y grupos parlamentarios de este pa¨ªs se pongan de una vez las pilas de una forma un¨ªsona y coordinada, y lleguen a acuerdos fundamentales y pr¨¢cticos para abordar, por una parte, este acuciante problema de las pensiones, y por otra el insufrible nivel de paro existente, merced al que venimos ostentando un claro y negativo liderazgo dentro del conjunto de pa¨ªses que integran la Uni¨®n Europea. Para ello los partidos tendr¨ªan que olvidarse del permanente postureo ante los ciudadanos en relaci¨®n con este y con otros muchos temas, evitando adoptar sus habituales medidas cortoplacistas y/o electoralistas, y centrarse en alcanzar acuerdos que posibiliten soluciones y medidas eficaces para resolver estos dos profundos y permanentes problemas sociales en nuestro pa¨ªs.

Jes¨²s Lizcano ?lvarez es catedr¨¢tico de la Universidad Aut¨®noma de Madrid Acad¨¦mico de la Real Academia de Ciencias Econ¨®micas y Financieras.