Catalanes y jud¨ªos

Siempre el historicismo fue coartada de los nacionalismos. Pero hay grados. Cuando lo usa alguien de la eximia altura ¨¦tica de Clara Ponsat¨ª, ag¨¢rrense la decencia. La fugada exconsellera reconoci¨® a toro pasado que en el oto?o desobediente de 2017 las ¨¦lites indepes ¡°est¨¢bamos jugando al p¨®quer e ¨ªbamos de farol¡±: enga?aban a los ciudadanos.

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Ponsat¨ª compara en la Euroc¨¢mara la expulsi¨®n de los jud¨ªos con el ¡°desprecio¡± a la ¡°minor¨ªa catalana¡±

Ponsat¨ª ya tiene su credencial de eurodiputada: ¡°Esta es la foto que no quer¨ªan¡±

Tambi¨¦n ha enga?ado vilmente al acceder al Parlamento Europeo. No al decir que ¡°uno de los cr¨ªmenes m¨¢s serios contra el pueblo jud¨ªo tuvo lugar en 1492 cuando los denominados Reyes Cat¨®licos ordenaron la expulsi¨®n de los jud¨ªos de Sefarad¡±, algo que fue ¡°admirado por Adolf Hitler y que intent¨® superar¡±.

No por eso. Est¨¢ en lo cierto. Ya lo escribi¨® hace m¨¢s de 70 a?os el gran Am¨¦rico Castro: ¡°La persecuci¨®n de los hebreos... hizo surgir aquella forma ¨²nica de vida espa?ola en que religi¨®n y naci¨®n confundieron sus l¨ªmites, un antecedente de los Estados totalitarios con un partido ¨²nico impuesto por la violencia¡± (Espa?a en su historia, Losada, Buenos Aires, 1948).

Donde Ponsat¨ª falsea es en el abuso pol¨ªtico de la fecha: cuando afirma que la expulsi¨®n de 1492 fue el ¡°primer episodio de antisemitismo de Estado¡±. O miente, o ignora... o va de farol.

Rebobinemos un siglo. ¡°La prosperidad relativa, los centros culturales, en fin, la vida en los calls [barrios jud¨ªos] se acab¨® en 1391¡± al ser ¡°destruidas o al menos arruinadas todas las comunidades jud¨ªas catalanas¡±, ya que am¨¦n de los ¡°robos y destrucciones¡± de un alzamiento popular contra ellas (tachadas desde mitad de siglo de provocar las pestes negras), ¡°la pol¨ªtica real acab¨® de completar la acci¨®n del pueblo con la confiscaci¨®n de edificios, objetos de culto, libros y bienes de los difuntos; todo fue al tesoro del monarca y se reparti¨® entre su gente¡±, recopila Carme Batlle en la magna Hist¨°ria de Catalunya dirigida por el incontestable Pierre Vilar (volumen 3, Edicions 62, 1988).

La pol¨ªtica real catalana practic¨® pues el antisemitismo de Estado un siglo antes que los Cat¨®licos: bajo Joan I, un conde-rey catalan¨ªsimo, el pen¨²ltimo del casal de Barcelona que rein¨® en todo Arag¨®n. Pero, ojo, asimismo la ulterior y definitiva expulsi¨®n de 1492 fue codecidida por el rey propio de los catalanes (y aragoneses y...), Fernando el Cat¨®lico. Subrayen: 1492. Dos siglos antes que 1714, fecha que el nacionalismo catal¨¢n considera terminal para la soberan¨ªa y el existir de Catalu?a. As¨ª, el horrendo crimen de 1492 no es exclusivo de Castilla. Nuestros ancestros catalanes, los de Ponsat¨ª y los m¨ªos, lo cometieron tambi¨¦n.