La venta de Victoria¡¯s Secret marca el fin de una ¨¦poca para la marca

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Victoria¡¯s Secret cancela oficialmente su desfile y anuncia una evoluci¨®n de la marca

Una modelo de tallas grandes y otra transexual para lavar la imagen de Victoria¡¯s Secret

Hubo un tiempo en que ser elegida para el desfile anual de la firma de ropa interior Victoria's Secret era llegar al Olimpo de las modelos. Por algo se las conoc¨ªa como ¨¢ngeles: por las alas que acompa?aban a sus min¨²sculos y sexis conjuntos de lencer¨ªa y por sus cuerpos perfectos inaccesibles para el 99% de la poblaci¨®n femenina y f¨¢ciles de imaginar esculpidos por enviados divinos. Como la divinidad es territorio de fe, la realidad no tard¨® en poner sobre la mesa los sacrificios que deb¨ªan hacer las modelos para lucir su perfecci¨®n y los cuestionables m¨¦todos de los responsables de la marca para convertir sus productos en aspiracionales.

Victoria's Secret cerr¨® la semana pasada el descenso a los infiernos en el que se precipit¨® tras una investigaci¨®n realizada por The New York Times que se public¨® con un t¨ªtulo que lo resume todo: '?ngeles' en el infierno: la cultura de la misoginia dentro de Victoria's Secret. El pasado jueves, 20 de febrero, L Brands vendi¨® la marca al fondo Sycamore Partners por algo m¨¢s de 1.000 millones de d¨®lares. Una cifra millonaria que no esconde que se trata de una salida obligada para frenar la ca¨ªda libre en la que se encontraba la empresa. Los motivos: el comportamiento machista de sus directivos, en la frontera del acoso sexual, y un cambio de era auspiciado por las mujeres que ha hecho que la sociedad ya no pueda ni quiera pasar por alto este tipo de actitudes.

A pesar de la millonaria cifra que ha alcanzado la transacci¨®n, el acuerdo de venta incluye una cl¨¢usula que deja fuera a Lexie Wexner, el fundador de la marca, de 82 a?os. Wexner tendr¨¢ que renunciar a su puesto de consejero delegado en la firma y conformarse con un discreto cargo en la direcci¨®n, alejado del centro de atenci¨®n. Una soluci¨®n que no sorprende a quienes han seguido la evoluci¨®n de la compa?¨ªa y conocen las acusaciones de acoso sexual que la han ido dinamitando mientras Wexner era su presidente y miraba hacia otro lado.

El espect¨¢culo global que supon¨ªa cada a?o el desfile de Victoria's Secret dio paso a la bochornosa sucesi¨®n de noticias que pon¨ªan a la firma en la picota. La primera pista de que el glamur estaba dejando de lado a esta marca la dio en noviembre de 2018 una de sus modelos m¨ªticas: la brasile?a Gisele B¨¹ndchen. ¡°Durante los primeros cinco a?os me sent¨ª c¨®moda desfilando con lencer¨ªa, pero a medida que pasaba el tiempo me sent¨ªa cada vez menos relajada caminando por la pasarela con solo un bikini o un tanga¡±, manifest¨®.

Poco despu¨¦s fue Adriana Lima, ¡ªen aquel momento la cuarta modelo mejor pagada del mundo seg¨²n Forbes¡ª quien decidi¨® colgar sus alas despu¨¦s de confesar que sufr¨ªa presi¨®n por sus medidas, y a?adir que esta forma de vivir no era ¡°f¨ªsica ni mentalmente saludable¡±. Solo hab¨ªan pasado unos d¨ªas cuando las declaraciones de Ed Razek, director de marketing de Victoria's Secret, elevaron el tono de la pol¨¦mica cuando rechaz¨® la idea de que sus desfiles incluyeran modelos trans o de tallas grandes.

En diciembre de 2018 el desfile de la marca de lencer¨ªa registr¨® la audiencia m¨¢s baja de su historia como respuesta a esta decisi¨®n excluyente: 3,3 millones de espectadores frente a los 10 millones habituales. A lo largo del a?o se hab¨ªan cerrado 20 tiendas y en mayo de 2019 la crisis de identidad a la que les aboc¨® su inmovilismo y la fuerza del movimiento MeToo les llev¨® a anunciar la cancelaci¨®n de su espect¨¢culo televisivo. Una crisis en cadena que se hab¨ªa reflejado en sus ventas ¡ªcayeron un 50%¡ª, en el valor de sus acciones ¡ªbajaron un 75% desde 2015¡ª y en su popularidad.

De nada vali¨® que el espect¨¢culo se calificara de ¡°fantas¨ªa y ¨²nico en su clase¡±; ni que en agosto de 2019 Razed presentara su renuncia y la marca contara con la modelo transg¨¦nero Valentina Sampaio para limpiar su imagen. El nombre de su presidente, Leslie Wexner, volvi¨® a los titulares por su relaci¨®n con el ped¨®filo Jeffrey Epstein ¨Cquien utiliz¨® la marca como reclamo para aprovecharse de mujeres deseosas de triunfar en el mundo de la moda¨C y la investigaci¨®n de The New York Times le propin¨® la estocada final. En noviembre de 2019 se cancel¨® definitivamente su desfile. Ahora sus nuevos propietarios tendr¨¢n que reinventar la compa?¨ªa si pretenden reconquistar el mercado.