Sin precedente

"Llegamos a los primeros 100.000 casos de infecci¨®n por coronavirus en 67 d¨ªas. 11 d¨ªas despu¨¦s llegamos a otros 100.000, mientras que el tercer grupo de 100.000 infectados solo tard¨® 4 d¨ªas en producirse. Despu¨¦s, en dos d¨ªas acumulamos otros 100.000 m¨¢s". Esto le dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus, el director de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, a los l¨ªderes que participaron en una reuni¨®n cumbre sobre el COVID-19.

Al d¨ªa siguiente, el Congreso de Estados Unidos, logr¨® superar su par¨¢lisis y aprob¨® el paquete de medidas de ayuda econ¨®mica m¨¢s grande en la historia de la humanidad. Mas de dos billones de d¨®lares (trillions, en ingl¨¦s) ser¨¢n entregados a individuos, gobiernos locales y empresas privadas con el fin de paliar la devastaci¨®n econ¨®mica causada por las medidas necesarias para enfrentar la pandemia. ?Cu¨¢ntos son dos billones? Antony Bugg-Levine lo explica as¨ª: "Si durante 24 horas al d¨ªa, por siete d¨ªas, cada segundo a?ades un billete de un d¨®lar, aproximadamente en dos semanas tendr¨¢s un paquete con un mill¨®n de d¨®lares. Alcanzar los mil millones de d¨®lares tardar¨¢ 40 a?os y llegar a los dos billones de d¨®lares llevar¨ªa 80.000 a?os."

La magnitud de esta iniciativa econ¨®mica es sorprendente. Pero m¨¢s sorprendente aun es que ni siquiera esta inusitada inyecci¨®n de dinero es suficiente para reactivar la econom¨ªa de Estados Unidos. La mayor¨ªa de los expertos anticipa que este a?o habr¨¢ una recesi¨®n econ¨®mica. Esta recesi¨®n causar¨¢ n¨²meros sin precedentes de despidos de trabajadores, de quiebras de empresas y de desalojos de hogares y locales comerciales por falta de pago.

El pesimismo de los especialistas se debe, primordialmente, a los inevitables rezagos y problemas en la distribuci¨®n de los fondos aprobados por el gobierno, as¨ª como a la continuada cat¨¢strofe sanitaria. Mientras no aparezcan una vacuna y un tratamiento al coronavirus la econom¨ªa seguir¨¢ d¨¦bil. Ademas, es posible que para muchos de los beneficiarios, el socorro financiero llegue tarde. El temor es que un gran n¨²mero de peque?as y medianas empresas cuyos clientes se esfumaron se vean forzadas a cerrar antes de que les llegue el auxilio financiero.

Estos clientes, que ya no compran, est¨¢n ahora haciendo filas para cobrar su seguro de paro. Hace tres semanas hubo en Estados Unidos 200.000 solicitudes de ayuda econ¨®mica por parte de personas que perdieron su trabajo. El n¨²mero m¨¢s alto de estas solicitudes ocurri¨® en 1982 cuando 650.000 trabajadores acudieron a cobrar ese seguro. La semana pasada el n¨²mero fue de tres millones trescientas mil personas, o diecis¨¦is veces m¨¢s que la semana anterior.

La econom¨ªa estadounidense no es la ¨²nica que est¨¢ en problemas. China, por ejemplo, est¨¢ sufriendo la segunda contracci¨®n econ¨®mica m¨¢s severa que ha tenido ese pa¨ªs desde los a?os 1970s. Su econom¨ªa depende mucho de sus exportaciones al resto del mundo y esa demanda ha ca¨ªdo dram¨¢ticamente. Un gran n¨²mero de pa¨ªses ya est¨¢, o pronto estar¨¢, enfrentado crisis econ¨®micas sin precedentes.

La lucha contra el coronavirus es muy costosa y producir¨¢ in¨¦ditos aumentos en el gasto p¨²blico y los niveles de endeudamiento. Este impacto es a¨²n m¨¢s grave en los pa¨ªses con grandes poblaciones, econom¨ªas precarias y d¨¦biles sistemas sanitarios. India, Nigeria, Pakist¨¢n, Brasil, Sur¨¢frica, Bangladesh o M¨¦xico son ejemplos de pa¨ªses pobres y poblados que sufrir¨¢n de fuertes crisis fiscales.

Es por esto que una pandemia que debe ser enfrentada con acciones locales como el aislamiento de los individuos y la solidaridad social, tambi¨¦n requiere urgentemente de coordinaci¨®n internacional. Los pa¨ªses deben ayudarse y actuar en concierto en cuanto a sus pol¨ªticas econ¨®micas, su coordinaci¨®n financiera y monetaria, endeudamiento asi como la eliminaci¨®n de barreras al comercio de medicinas, materiales y equipos hospitalarios, por ejemplo.

Hace falta actuar tanto localmente al nivel m¨¢s individual posible como globalmente al nivel m¨¢s multilateral posible.

Esto es posible y el mundo ya lo ha hecho antes. En la grave crisis econ¨®mica mundial del 2007/2009 se reactiv¨® el Grupo de los 20 (G20), una organizaci¨®n formada en 1999 por dos decenas de pa¨ªses y que hasta entonces hab¨ªa sido poco relevante. Los jefes de gobierno de los pa¨ªses integrantes se rotan el liderazgo del Grupo y durante la crisis financiera que estall¨® en 2007 al entonces primer ministro brit¨¢nico Gordon Brown le toc¨® actuar como l¨ªder del G20. Brown y otros de sus colegas decidieron convertir al G20 en el centro de coordinaci¨®n econ¨®mica del mundo. Si bien en las respuestas a la gran recesi¨®n se cometieron errores, tambi¨¦n es cierto que el G20 reactivado y activista contribuy¨® a que los da?os del enorme crash no resultaran a¨²n m¨¢s graves.

En la crisis que estamos viviendo el aislamiento individual salva vidas. Pero, entre pa¨ªses, el aislamiento har¨¢ que los costos de la crisis sean a¨²n mayores.

En esta pandemia sin precedentes hay precedentes que nos pueden ser muy ¨²tiles.

Twitter @moisesnaim