Estamos perdiendo las voces de millones de ni?as y adolescentes
Un 58% de las j¨®venes de todo el mundo sufren acoso en las redes sociales
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Amenazas de violencia, insultos, mensajes ofensivos y despectivos, im¨¢genes de contenido sexual, comentarios discriminatorios y humillantes, burlas y ataques por su aspecto f¨ªsico¡Este es el acoso que viven casi a diario un 58% de las ni?as, adolescentes y j¨®venes de todo el mundo en las redes sociales.
Desde Australia a Chile, pasando por Espa?a, India, Brasil, Nepal o Ben¨ªn, las chicas est¨¢n aprendiendo a asumir y aceptar el acoso como un parte normal de sus vidas online. Una de cada cinco ha abandonado o reducido significativamente su uso de las redes sociales despu¨¦s de sufrir acoso. De las que siguen siendo usuarias activas, una de cada diez se ha visto forzada a cambiar su forma de expresarse o los contenidos que comparten para evitar ser acosada. No son libres de ser ellas mismas en redes sociales.
Estos son los datos que revela el informe (In)seguras online, que Plan International ha presentado con motivo del D¨ªa Internacional de la Ni?a, y para el que hemos realizado la mayor encuesta sobre violencia online hacia ni?as y adolescentes. M¨¢s de 14.000 chicas de 22 pa¨ªses, entre ellos Espa?a, han contado sus experiencias en torno al acoso en redes sociales. Los resultados son concluyentes: las plataformas de redes sociales son un lugar inseguro para ellas, que se sienten desprotegidas, como si el acoso fuera algo que tuvieran que gestionar solas: aunque una de cada tres utiliza los mecanismos de reporte y denuncia de los agresores, el acoso persiste.
En Internet las chicas sufren una doble discriminaci¨®n por raz¨®n de g¨¦nero y edad
Al igual que ocurre en el mundo offline, en las calles o en los espacios de decisi¨®n, en Internet las chicas sufren una doble discriminaci¨®n por raz¨®n de g¨¦nero y edad: sufren acoso desde los 8 a?os y especialmente entre los 14 y los 16. Los ataques son a¨²n m¨¢s graves si expresan sus opiniones pol¨ªticas o por su diversidad. Los datos hablan por s¨ª solos: el 42% de las ni?as LGTBIQ+ afirman ser objeto de acoso por ese motivo, mientras que el 37% de las que pertenecen a una minor¨ªa ¨¦tnica afirman que las acosan por ello.
Una de cada cuatro afirma sentirse insegura f¨ªsicamente
El miedo, la angustia y el estr¨¦s que generan las situaciones de acoso en las redes sociales no solo son alarmantes, sino que tienen un impacto muy negativo sobre las ni?as en muchos ¨¢mbitos de sus vidas. El 42% se?ala que tiene baja autoestima o ha perdido su confianza por alguna experiencia de acoso online; una de cada cuatro afirma sentirse insegura f¨ªsicamente, mientras que otras cuentan que tienen problemas en la escuela (32%), con sus amistades y familia (21%) o, incluso, para mantener un empleo (5%).
En las redes sociales se espera que las ni?as y j¨®venes se comporten de una forma determinada: que no expresen su opini¨®n, que utilicen un lenguaje neutro, que suban solamente fotos y contenidos que cumplan determinadas caracter¨ªsticas y, en definitiva, que dejen de ser ellas mismas. Que no molesten, que no alcen la voz, que cumplan con unos estereotipos y normas de g¨¦nero en los que muchas veces no encajan. El acoso no es solo un problema en s¨ª mismo, sino una barrera para el derecho a la participaci¨®n de las ni?as en la vida actual. Si las chicas se autocensuran o abandonan las redes sociales, pierden su espacio y su voz en un entorno digital que cada vez cobra m¨¢s importancia en nuestras vidas.
La seguridad online es un problema de derechos humanos y un indicador sobre igualdad de g¨¦nero. Debemos reclamar que las redes sociales e Internet tambi¨¦n sean un espacio de oportunidades para nosotras, para ellas. Un lugar de libertad, de participaci¨®n y de liderazgo, que fue para lo que se dise?aron. Es urgente, porque hoy m¨¢s que nunca, desde que hace m¨¢s de medio a?o estallara la pandemia de la COVID-19, la presencia y el acceso a Internet son fundamentales para informarnos, estar conectados, trabajar, estudiar y relacionarnos.
En el a?o en que se celebra el 25? aniversario de la Plataforma y Declaraci¨®n de Beijing por los Derechos de las Mujeres, que declaraba ¡°indispensable que la mujer no s¨®lo se beneficie de la tecnolog¨ªa, sino que tambi¨¦n participe en su proceso¡± y cinco a?os despu¨¦s de la aprobaci¨®n de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que instan a ¡°mejorar el uso de la tecnolog¨ªa de la informaci¨®n y las comunicaciones para promover el empoderamiento de las mujeres¡±, los derechos y libertades de las ni?as y adolescentes no est¨¢n garantizados en el ¨¢mbito digital.
Es hora de que los gobiernos de todo el mundo apliquen leyes espec¨ªficas para hacer frente a la violencia de g¨¦nero online y garanticen que las ni?as que sean v¨ªctimas puedan acceder a la justicia. En Espa?a, es urgente que se apruebe la Ley de Protecci¨®n de la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia, que incluye medidas para prevenir, denunciar, sancionar y castigar el acoso online. Pero debe aplicarse con enfoque de g¨¦nero y edad, para tener en cuenta las experiencias y necesidades espec¨ªficas de ni?as y adolescentes.
Si las chicas se autocensuran o abandonan las redes sociales, pierden su espacio y su voz
Las empresas de redes sociales tambi¨¦n tienen el poder de generar cambios. Las chicas de todo el mundo creen que son quienes m¨¢s pueden hacer para acabar con este problema y nuestra campa?a #PonteEnMiPerfil les invita a colaborar con ellas. Deben aumentar sus esfuerzos, desarrollar mecanismos y destinar recursos para abordar el acoso y garantizar que sus plataformas sean entornos seguros que permitan a las ni?as y adolescentes, de todos los colectivos, expresarse con total libertad y seguridad.
Las l¨ªderes, las creadoras, las activistas, las pensadoras, la mayor¨ªa de las chicas de hoy son y est¨¢n en las redes sociales, y queremos que su voz se oiga y se respete. Se lo debemos a las ni?as de Australia, Chile, Espa?a, la India, Brasil o Ben¨ªn, por las mujeres que durante a?os tampoco fueron admitidas en la conversaci¨®n. Hoy no podemos permitir pasos atr¨¢s en los derechos de las mujeres y ni?as despu¨¦s de 25 a?os de avances.
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