El Rif en dos colores
Blancos de Tetu¨¢n y azules de Chauen al norte de Marruecos
El Rif es una vasta cordillera de 300 kil¨®metros con forma de media luna que va de Tetu¨¢n a Melilla, y m¨¢s all¨¢, casi hasta la frontera con Argelia. Tierra de las cabilas bereberes, en sus monta?as y al pie de las mismas recalan musulmanes y jud¨ªos procedentes de Al Andalus al acabar la Reconquista (1492), presencia reforzada con la expulsi¨®n de los moriscos a comienzos del siglo XVII. As¨ª las cosas, cuando Espa?a toma algunas plazas del norte marroqu¨ª durante los siglos XVIII y XIX hasta la consolidaci¨®n del Protectorado (1912-1956), la Armada se topa con pobladores que conservan una variante hablada del castellano, el haket¨ªa.
01 Tetu¨¢n
Entre la boreal T¨¢nger y el resto del pa¨ªs, una espl¨¦ndida ciudad todav¨ªa bastante camuflada para el visitante se erige a los pies del Rif interno, sobre la loma del monte Dersa. Tetu¨¢n es una estampa blancuzca de casas abigarradas que permanece imp¨¢vida ante el tiempo, como una suerte de La Habana judeo-morisca a la que la fiebre constructora y el turismo, a diferencia de plazas como Marraquech o Fez, no han podido menoscabar.
Tetu¨¢n se entiende en clave andalus¨ª, ya que la llegada de los primeros granadinos y judeo-sefard¨ªes en el siglo XV (presencia que se hizo masiva en el XVII, con la expulsi¨®n de los moriscos) la transform¨® para siempre. Pero tambi¨¦n en clave espa?ola, al ostentar la capitalidad del antiguo Protectorado, condici¨®n que revolucion¨® la parte nueva de la ciudad durante la primera mitad del siglo XX. En 1483, cuando la ca¨ªda del reino de Granada era cuesti¨®n de tiempo, 80 exiliados de la Pen¨ªnsula comandados por el caudillo Sidi Mandri importan el estilo arquitect¨®nico de Al Andalus y empiezan a cimentar la medina o casco viejo en el barrio de El Blad ("el pueblo"), situado sobre un talud.
?Y qu¨¦ medina! Declarada patrimonio mundial por la Unesco en 1997, sin duda es la m¨¢s radiante de todo el norte marroqu¨ª. Nada que ver con los reclamos de las medinas de Fez o Mequ¨ªnez: la de Tetu¨¢n es una ciudadela vibrante, a veces un tanto insalubre, donde el espacio urbano apenas se ha alterado y en la que perviven oficios arcaicos. Circundada de murallas almenadas construidas durante el mandato de Mulay Ismail (siglo XVII), perderse en el d¨¦dalo tetuan¨ª de calles y callejuelas es un imperativo primordial.
02 Chauen
Para muchos, Tetu¨¢n es una encrucijada transitoria entre T¨¢nger, Ceuta, las playas de Uadi Laud, Martil, Cabo Negro o El Rinc¨®n (residencia veraniega de Mohamed VI)... y Chauen. Y si Tetu¨¢n es una ciudad escondida del viajero, Chauen lo es a¨²n m¨¢s, pero en sentido literal: enclavada a 600 metros de altura entre dos picos, uno solo la percibe a pocas curvas de llegar por carretera. Ahora bien, Chauen ("los cuernos", por su orograf¨ªa) no solo no pasa desapercibida. Algunos rife?os incluso alertan de que la masiva llegada de turistas atra¨ªdos por su intrincada medina y su riqueza cann¨¢bica puede acabar convirti¨¦ndola en una ciudad-museo.
Nace a finales del siglo XV, a la par que Tetu¨¢n, como una fortaleza bereber incrustada en el Rif contra la constante presencia de marineros portugueses en los alrededores del Mediterr¨¢neo. Al concluir poco despu¨¦s el dominio isl¨¢mico sobre la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, musulmanes y jud¨ªos no tardan en aparecer, imprimiendo as¨ª a la villa su car¨¢cter andalus¨ª.
Sin zocos que re¨²nan oficios arcaicos, sin radiantes mezquitas, sin plazas jaraneras, el cebo de Chauen son sus calles escarpadas y sus viviendas, te?idas de azul desde el umbral de la entrada hasta el dintel de las ventanas. Lo mejor son las diferentes tonalidades de pintura aplicadas y el consiguiente contraste de azules. En realidad, esta pr¨¢ctica solo tiene un siglo y, cuentan, sirve para ahuyentar a los insectos. Al parecer, antes se utilizaba el blanco de la cal.
Es alrededor de Uta el Hamam, el coraz¨®n rectangular de la medina, donde la algarab¨ªa se hace m¨¢s fuerte. Rodeado de caf¨¦s y presidido por una enorme araucaria, similar a un abeto, en este coso abundan los vendedores de quif, falsos gu¨ªas y mercaderes de toda ¨ªndole. Conviene m¨¢s bien perderse calle arriba por la medina hasta dominar toda la ciudad, o alcanzar la fuente de Ras el Ma, tirando al este. Uta el Hamam est¨¢ delimitado por la casba y por la Gran Mezquita, del siglo XV. Junto a esta se alza un torre¨®n donde fue encerrado el l¨ªder rife?o Abd el Krim al terminar la guerra con Espa?a. Entre 1924 y 1926, Abd el Krim ocup¨® Chauen, que pas¨® a manos de la breve Rep¨²blica del Rif. La recuper¨® para Espa?a el comandante Osvaldo Capaz sin pegar un solo tiro (algunos historiadores hablan de sobornos masivos).
Ahora acoge a muchos turistas y a hippies atra¨ªdos por el cannabis, pero durante siglos Chauen fue una ciudad santa que prohib¨ªa la entrada a los cristianos (no as¨ª a los jud¨ªos). Alg¨²n europeo logr¨® colarse de matute, como William Saumers en 1892 (descubierto y envenenado), pero los primeros en abrirla fueron los espa?oles en 1920, de acuerdo con el Tratado de Fez (1912) con el que Madrid y Par¨ªs se repartieron Marruecos.
Gu¨ªa
C¨®mo ir
? Tetu¨¢n se encuentra a 60 kil¨®metros en coche desde T¨¢nger y a 43 kil¨®metros de la ciudad de Ceuta. Chauen dista otros 60 kil¨®metros por carretera de Tetu¨¢n.
? Ferris a T¨¢nger: FRS (www.frs.es), Balearia (www.balearia.com), Trasmediterr¨¢nea (www.trasmediterranea.es), Comarit (www.comarit.es).
? M¨¢s informaci¨®n de ferris en www.directferries.es
Informaci¨®n
? Turismo de Marruecos en Madrid (915 41 29 95; www.turismomarruecos.com).
? Turismo de la regi¨®n de T¨¢nger y Tetu¨¢n (www.visitetanger.com).
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