De sidras por Fr¨¢ncfort
En la llamada Manhattan alemana hay otras bebidas adem¨¢s de cerveza. Tres locales que ofrecen 'apfelwein' de elaboraci¨®n propia
Fr¨¢ncfort, la Manhattan alemana, la ciudad de los hombres de negro y el Banco Central Europeo, cuenta con una gastronom¨ªa propia que va m¨¢s all¨¢ de las t¨ªpicas salchichas y es degustada en r¨²sticas tabernas tradicionales que contrastan con la frialdad de los edificios de oficinas. Estas Apfelwein-Wirtschaften, llamadas as¨ª por producir su propia sidra (Apfelwein), son negocios familiares de hasta tres siglos de antig¨¹edad, cuya oferta y ambientaci¨®n se caracterizan por unos patrones distintivos muy determinados. A saber: mesas corridas, animados alemanes dispuestos a entablar conversaci¨®n con su vecino comensal y mucha, mucha Apfelwein (o Ebbelwoi en el dialecto de Hesse).
Si uno busca degustar las diferentes variedades de cerveza alemana, mejor no pisar estos establecimientos, porque en muchos de ellos la ¨²nica bebida fermentada que ofrecen es la sidra de producci¨®n propia. No hay que olvidar pedir como entrante uno de los quesos m¨¢s curiosos que se pueden probar: el Handk?se mit Musik, que significa, literalmente, queso hecho a mano con m¨²sica. Con un sabor muy caracter¨ªstico, que no deja indiferente a nadie (para bien o para mal), el Handk?se se presenta marinado en aceite y vinagre con alcaravea y cebolla.
La mejor opci¨®n para descubrir el colorido ambiente de las Kneipen (tabernas) francfortesas es dirigirse al barrio de Sachsenhausen o al juvenil Bornheim, cuya principal calle, Berger Stra?e, acoge algunas de las Apfelwein-Wirtschaften m¨¢s emblem¨¢ticas de la ciudad.
Apfelwein Solzer
El restaurante y sidrer¨ªa Apfelwein Solzer (Berger Stra?e 260 ; +49 69 452171) fue fundado en 1893 por el matrimonio Solzer, y la quinta generaci¨®n contin¨²a produciendo su propia sidra siguiendo de manera fiel la receta familiar que tan c¨¦lebre convirti¨® al establecimiento. El restaurante se emplaza en una aut¨¦ntica casa del siglo XVIII y sus salones se encuentran distribuidos por las diferentes dependencias de la misma. Cuenta con una carta no muy extensa, pero eso s¨ª, excelente. Con platos tradicionales y un men¨² diario que var¨ªa en funci¨®n de las estaciones del a?o, ofrecen una excepcional y variada selecci¨®n de Schnitzel, si bien el plato estrella (no hay que dejar de probarlo) son los Schweinelendchen: solomillitos de cerdo con salsa de mostaza de Dijon y Butternudel.
Zur Sonne
El restaurante Zur Sonne (Berger Strasse 312; +49 69 459396) fue fundado en 1768 y hoy es uno de los favoritos para degustar la cocina propia de la regi¨®n. Al igual que el Solzer, se encuentra emplazado en una verdadera casa del siglo XVIII, si bien la joya del establecimiento es su Biergarten, con luces de verbena y farolillos que crean una atractiva atm¨®sfera en las noches de verano. Para ahorrarnos disgustos, mejor reservar.
Adolf Wagner
El archiconocido Apfelweinwirtschaft Adolf Wagner (Schweizer Stra?e 71; +49 69 612565) se encuentra situado en el elegante barrio de Sachsenhausen. Desde su inauguraci¨®n en 1902, los due?os han producido su propia sidra, cuya receta ha permanecido intacta con el paso de los a?os, y muestran orgullosos el proceso de elaboraci¨®n de la misma. De enormes dimensiones, no es necesario reservar para encontrar un sitio en el que cenar en esta sidrer¨ªa. Odiada por muchos por ser demasiado ruidosa, suele estar abarrotada de parroquianos que han bebido m¨¢s Apfelwein de lo debido y alg¨²n turista despistado que mira a su alrededor sorprendido. En cualquier caso, siempre se trata de una muy buena opci¨®n para iniciarse en el mundo de las Kneipen. No deje de probar el tradicional codillo con patatas asadas.
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