Nueve razones por las que siempre volver¨ªa a Jap¨®n
Motivos pr¨¢cticos, como su seguridad y organizaci¨®n, y los m¨¢s puramente hedonistas, como la gastronom¨ªa y los ¡®onsen¡¯, para regresar una y otra y vez al pa¨ªs nip¨®n

Jap¨®n est¨¢ de moda. Tanto que en algunos de sus lugares muy tur¨ªsticos, como la ciudad de Kioto, las aglomeraciones en los principales monumentos empiezan a ser ya un problema. Pero el pa¨ªs asi¨¢tico es lo suficientemente grande y tiene atractivos de sobra como para que puedas organizar tu propio viaje sin colas ni agobios. Adem¨¢s, es un destino sorprendente, ¨²nico, con unas peculiaridades que le hace diferente a cualquier otro de su entorno.
Hay much¨ªsimas razones para visitar una y otra vez Jap¨®n. Estas son nueve de mis principales.
1. Jap¨®n es marciano
Su cultura, estilo de vida y relaciones sociales no tienen nada que ver con ning¨²n otro pa¨ªs de Occidente.
2. Es un destino muy seguro
La seguridad y la tranquilidad es tal en Jap¨®n que el viajero puede dejar el m¨®vil encima de la mesa de un restaurante, irse al ba?o y, al volver, seguir¨¢ all¨ª. Otro ejemplo que demuestra esta caracter¨ªstica del pa¨ªs es que el visitante puede dejar su bici en la calle sin cadena y nadie la robar¨¢.

3. Su belleza
Entrar en uno de los m¨²ltiples templos o santuarios del pa¨ªs nip¨®n es como cruzar un t¨²nel del tiempo y aparecer en otra ¨¦poca. Una en la que no hab¨ªa ni prisas ni estr¨¦s.
4. El oto?o
No hay ¨¦poca m¨¢s espectacular que la oto?ada en Jap¨®n. Los colores ocres de los arces y los amarillos de los ginkgo biloba se mezclan con el rojo de las torii que dan acceso a los santuarios, formando un espect¨¢culo visual ¨²nico.
5. La puntualidad y la perfecta organizaci¨®n

En Jap¨®n, regido por la puntualidad y la organizaci¨®n, todo funciona bien. El Shinkasen ¡ªla red de l¨ªneas de ferrocarril de alta velocidad¡ª llega y parte a la hora prevista; y el metro funciona como un reloj. Y los ba?os p¨²blicos no solo est¨¢n limp¨ªsimos, sino que, adem¨¢s, son gratuitos.
6. El escrupuloso respeto hacia lo p¨²blico
En Jap¨®n, si algo est¨¢ prohibido o mal visto nadie lo hace. Por ejemplo, en el Shinkansen ¡ªtambi¨¦n en el metro y en general en transportes p¨²blicos¡ª se recomienda no hablar por el m¨®vil. Y nadie lo hace. Por eso puedes darte el gustazo de viajar horas y horas sin que el maleducado de turno te atormente con sus conversaciones voz en grito, como ocurre en ocasiones en el AVE.
7. Los carteles de servicios p¨²blicos son f¨¢ciles de entender

Aunque muy pocos japoneses hablan otro idioma, es facil¨ªsimo entenderse en el pa¨ªs. Los carteles en los transportes p¨²blicos y cualquier otro servicio son f¨¢ciles de comprender para los extranjeros y la extraordinaria amabilidad de sus habitantes soluciona cualquier duda o consulta, aunque sea por se?as.
8. La gastronom¨ªa
La cocina japonesa es mucho m¨¢s que sushi. De hecho, hay zonas donde es dif¨ªcil encontrarlo. Ramen, udon, soba, okonomiyaki, takoyaki, jingisukan, yakitoris, mochi¡ La lista de manjares tradicionales es extens¨ªsima y deliciosa.

9. Los ¡®onsen¡¯
Adoro la tradici¨®n japonesa de los ba?os p¨²blicos con agua muy caliente. Chapuzones que los habitantes del pa¨ªs suelen tomar al final del d¨ªa para relajarse y limpiar cuerpo y alma. ?Si tuviera espacio, me pondr¨ªa un onsen en casa!
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