Diez viajes para locos del volante

Para descubrir ciertas carreteras es mejor ajustarse bien el cintur¨®n antes de ponerse al volante. Prudencia y una buena dosis de valent¨ªa son el equipaje imprescindible para adentrarse por estas rutas solo aptas para locos del volante. Estas son algunas de las carreteras m¨¢s alucinantes del mundo.

01 Aventura al l¨ªmite: Karakorum Highway

PAKIST?N

Los conductores adictos al peligro conocen muy bien la m¨ªtica ruta del Karakorum. No son los primeros: los seres humanos llevan movi¨¦ndose por el valle del Indo desde hace milenios, utilizando este tramo de la Ruta de la Seda para intercambiar mercanc¨ªas e ideolog¨ªas entre Oriente y Occidente. Y eso que es un terreno realmente dif¨ªcil de atravesar. Como carretera es m¨¢s moderna: en 1986 unas obras de ingenier¨ªa modernizaron este camino milenario y se inaugur¨® la carretera del Karak¨®rum (1.200 kil¨®metros) que conecta Islamabad con Kasgar, en China, a trav¨¦s de las cordilleras de Karakorum, Himalaya e Hindu Kush. Es un trayecto asombroso. Hay baches, deslizamientos de tierra y acantilados; viejos camiones destartalados que pasan al lado; cortes de carretera y bandidos¡­ pero es sin duda una de las experiencias al volante m¨¢s dif¨ªciles de olvidar.

Conducir desde Islamabad a Gilgit lleva entre 12 y 18 horas.

02 La carretera transiberiana

Oficialmente hay una disputa entre australianos y canadienses sobre cu¨¢l es la autopista m¨¢s larga: los aussies consideran que es su Highway 1, mientras que los canadienses aseguran que la Trans-Canad¨¢ Highway, aunque ambas deber¨ªan considerar muy en serio la red de rutas que comunican San Petersburgo, en el B¨¢ltico, con Vladivostok, en el mar del Jap¨®n, un total de m¨¢s de 11.000 kil¨®metros que son todo un reto. De lo que no cabe duda es que la Transiberiana es, probablemente, la ruta que m¨¢s respeto da al conductor, por muy experimentado que sea. Algunos tramos de tierra se vuelven pantanosos en verano y se congelan en invierno; en ciertas partes, las poblaciones son escasas y entre unas y otras hay grandes extensiones de desoladora nada.

Los conductores independientes que se atrevan a recorrerla deben ir bien preparados: llevar combustible extra, una rueda de repuesto, comida, agua y una tienda.

03 Un recorrido ¨¦pico: Dalton Highway

Los camioneros del norte de Alaska no tienen fama precisamente de cobardes, pero incluso ellos admiten que la Dalton Highway es peligrosa. Esta ruta de 665 kil¨®metros discurre desde el norte de Farbanks hasta la ciudad de Deadhorse, a escasa distancia del oc¨¦ano ?rtico; sin paradas, lleva unas 13 horas en cada sentido. A lo largo del camino encontraremos refugios de fauna (con alces, carib¨²es y osos grizzlies) y asombrosos miradores, como Finger Mountain (en la milla 98) y Gobbler¡¯s Knob (en la milla 132). Pero todo es de lo m¨¢s remoto e inh¨®spito. No hay tel¨¦fonos ni hospitales y hay muy poca gente: una aventura ¨¦pica para amantes de las aventuras extremas.

Pocas empresas de alquiler permiten que sus veh¨ªculos sean conducidos en la Dalton Highway. Para preparar el viaje se puede consultar www.blm.gov/ak/dalton

04 Am¨¦rica de norte a sur: la gran Panamericana

Dos continentes, 18 pa¨ªses y unos 47.000 kil¨®metros: m¨¢s que un viaje por carretera es un proyecto para toda una vida. La red de carreteras conocida como Panamericana se extiende desde el lejano norte de Alaska hasta Ushuaia, la ciudad m¨¢s austral, en Argentina. Recorre la tundra ¨¢rtica, las Rocosas, el desierto de Nuevo M¨¦xico, la selva maya, el Amazonas, los Andes, los picos de la Patagonia... Aunque tiene un punto d¨¦bil: la carretera se interrumpe en la impenetrable selva del Dari¨¦n, en Panam¨¢; el llamado Tap¨®n de Dari¨¦n. La parte sudamericana vuelve a comenzar en Colombia, 160 kil¨®metros m¨¢s al sur. Completar la Panamericana es uno de esos retos que los grandes viajeros se apuntan en particular check list de grandes viajes que hay que hacer, al menos, una vez en la vida.

Hay autobuses que recorren gran parte de la carretera Panamericana.

05 Atravesando el Outback: Gibb River Road

AUSTRALIA

Granjas de ganado tan grandes como pa¨ªses, cocodrilos que toman el sol junto a los billabongs, comunidades ind¨ªgenas diseminadas por el bush, accidentadas carreteras de tierra que devoran neum¨¢ticos como desayuno... La Gibb River Road es el outback australiano en su versi¨®n m¨¢s cruda y cl¨¢sica. Es una forma increible para descubrir la vasta extensi¨®n de Kimberley. Aunque hay que tomar precauciones, incluso un novato puede completar en un buen 4x4 este tramo de 660 kil¨®metros que atraviesa esta regi¨®n desde Derby hasta cerca de Kununurra. Hay vados de r¨ªo que cruzar y trenes que evitar, pero tambi¨¦n hay refrescantes ba?os, arte rupestre aborigen, canguros y walab¨ªes como compa?eros del paisaje, as¨ª como acogedores ranchos que ofrecen un inapreciable combustible: camas y cervezas heladas.

La carretera es impracticable de noviembre a marzo. Se recomienda un todoterreno y llevar dos ruedas de repuesto.?

06 La trepidante carretera de los troles

Acelerar por el valle de Trollstigen es tan espectacular que podr¨ªa ser la v¨ªa para llegar en autom¨®vil al reino de los dioses n¨®rdicos, Asgard. Por este ultramundo de escarpado granito y cascadas de cuento de hadas serpentea la carretera del Trol, un resbaladizo y sinuoso asfalto con un desnivel del 9% y once curvas muy cerradas que la convierten en una de las conducciones m¨¢s ¨¦picas de Europa. La imagen de sus curvas casi imposibles aparece siempre en las listas de las carreteras m¨¢s dif¨ªciles del mundo. Empez¨® a funcionar en 1936 y desde entonces es uno de los grandes reclamos tur¨ªsticos del pa¨ªs. En invierno es impracticable; en general, la carretera solo est¨¢ abierta a los autom¨®viles de mayo a octubre, en funci¨®n de las nevadas, y, tal vez, del capricho de los dioses. A lo largo de la carretera hay seis miradores panor¨¢micos y ¨¢reas de descanso en los que las fotograf¨ªas espectaculares est¨¢n m¨¢s que garantizadas.

Trollstigen est¨¢ a seis horas en autom¨®vil de Oslo y cuatro desde Trondheim. El tren panor¨¢mico Rauma discurre hasta la cercana localidad de Andalsnes.

07 El tortuoso camino del sur: Sani Pass

Este es un viaje por carretera realmente alucinante, pero tal vez peligroso, no en vano se ha cobrado muchas vidas. Hay planes para mejorar la tortuosa carretera de grava con 27 curvas y 9 kil¨®metros de longitud que conduce desde las Drakensberg Mountains de Sud¨¢frica al interior del diminuto reino de Lesotho, algo que facilitar¨¢ el cruce fronterizo, aunque probablemente no gustar¨¢ tanto a los viajeros. ?Acaso una agradable y cuidada cinta de asfalto ofrecer¨¢ el mismo atractivo para los aventureros? Pero hay que verlo por el lado positivo: la mejora no eliminar¨¢ sus grandes atractivos para los locos del volante, pues en la cima seguir¨¢ aguardando el pub m¨¢s alto de ?frica, a 2.874 metros. Esta es una de esas carreteras que utilizan los fabricantes de todoterrenos para rodar sus anuncios. La espectacularidad est¨¢ servida.

El Sani Pass est¨¢ 80 kil¨®metros al sureste del aeropuerto de Durban. Actualmente se requiere un todoterreno para abordar el paso.

08 El camino de la muerte

Esta carretera tiene muchos apodos, pero el m¨¢s escalofriante de todos es el camino de la muerte. De hecho, su fama proviene de ser la m¨¢s peligrosa del mundo, gracias a su improbable geograf¨ªa: comunica la capital, La Paz, a 3.660 metros, con Coroico, a 1.200, en solo 60 kil¨®metros, a trav¨¦s del paso La Cumbre (4.650 metros). Y todav¨ªa hay m¨¢s: este trepidante y suicida descenso por las laderas de la cordillera oriental, proclive a la niebla, solo tiene 3,5 metros de ancho: a un lado, se alza pura roca; al otro, el precipicio del valle. Puede hacerse en autob¨²s o en bicicleta, el medio m¨¢s popular.

El llamado Camino de los Yungas?fue constru¨ªdo por prisioneros paraguayos de la Guerra del Chaco en los a?os treinta y es una de las pocas rutas que conectan la selva amaz¨®nica del norte del pa¨ªs con la capital. Actualmente hay una carretera m¨¢s moderna y segura que sustituy¨® este itinerario, pero el sector m¨¢s antiguo y peligroso se usa sobre todo para ciclismo de monta?a.

Los viajes en bicicleta desde La Paz a Coroico/Yolosa incluyen entre cuatro y cinco horas de pedaleo (el 90% es cuesta abajo); el camino de vuelta a La Paz dura de tres a cuatro horas.

09 Por el t¨²nel de Guoliang

En 1972, los aldeanos de la aislada Guoliang decidieron hacer un t¨²nel en las monta?as de Taihang para conectarse con el mundo. Tristemente, varios perdieron la vida en el proceso, pero siguieron trabajando y en 1977 se abri¨® finalmente a la circulaci¨®n este paso de 1,2 kil¨®metros, 4 metros de ancho y 5 de alto. Es una verdadera haza?a, y para darse cuenta solo hay que contemplar las vertiginosas vistas al abismo desde sus 30 ventanas. Sin embargo, vale la pena arriesgarse a subir en autom¨®vil o andando. La misma aldea de Goulian es un atractivo conjunto de puentes de piedra y callejuelas, con espectaculares paseos por esas colinas que antes eran inaccesibles.

Guoliang est¨¢ 120 kil¨®metros al norte de Zhengzhou. La estaci¨®n de tren m¨¢s cercana est¨¢ en Xinxiang; desde aqu¨ª los autobuses van a Huxian y luego a Guoliang.

10 La carretera m¨¢s alta del mundo

LADAKH (INDIA)

La altitud media de la carretera Leh-Manali supera los 4.000 metros. En el Taglang La su asfalto llega a la cota m¨¢xima, 5.328 metros. De hecho, esta es la ruta transitable a motor m¨¢s alta del mundo porque, para conectar la exuberante y relajada estaci¨®n de monta?a de Himachal Pradesh con la heladora localidad des¨¦rtica de Leh en Ladakh, tiene que luchar con los Himalayas occidentales, pasar entre picos nevados y superar alt¨ªsimos pasos en una tierra cada vez m¨¢s inh¨®spita. Los coches avanzan con lentitud: se tarda hasta 20 horas sin paradas. Pero hay que tomarse el camino con calma, disfrutando con las vistas, las estupas, las banderas de oraci¨®n y la gente que se encuentra por el camino.

La carretera Leh-Manali solo est¨¢ abierta desde mayo o junio hasta octubre; hay autobuses y taxis todoterreno que hacen la ruta.

M¨¢s informaci¨®n en 1000 aventuras ¨²nicas y en www.lonelyplanet.es

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