Nueve razones para irse de crucero con la familia

A las doce en punto se abre la pasarela del Freedom of the Seas, un crucero atracado en el puerto de Barcelona, y los primeros pasajeros comienzan a subir a bordo. Entre ellos est¨¢n los miembros de la familia Vega Ca?adas, compuesta por el matrimonio, sus cuatro hijos con sus parejas y sus tres nietos. La tripulaci¨®n les da la bienvenida mientras avanzan por la cubierta con toda la tranquilidad que tres ni?os de entre cuatro y ocho a?os, que viajan en barco por primera vez, permiten. Maite, manchega de 65 a?os, la abuela, est¨¢ contenta. Ha conseguido reunir a sus reto?os, ya creciditos, que viven en diferentes partes de Espa?a, con sus parejas y los nietos para pasar dos semanas juntos por el Mediterr¨¢neo. "En el mar no tienen forma de escapar", bromea.

Los trece miembros del clan forman parte de los 8,44 millones de pasajeros que se subieron o bajaron de un crucero en 2015 en alguno de los 46 puertos espa?oles. Un 3% m¨¢s que el a?o anterior, seg¨²n la Asociaci¨®n Internacional de L¨ªneas de Cruceros (CLIA). El Ministerio de Fomento espera que en 2016 se supere esa cifra.

Estas ciudades flotantes albergan actividades para turistas de todas las edades

El sector del turismo mar¨ªtimo no ha menguado durante la crisis. Desde 2008 ha crecido un 49%, seg¨²n datos de CLIA, que lo atribuye a una oferta m¨¢s atractiva y joven. Pero los barcos de crucero albergan actividades para todas las edades. Est¨¢n hechos para el disfrute a bordo. Sus atracciones son cada vez m¨¢s sofisticadas: toboganes gigantescos, plataformas de observaci¨®n colgantes o incluso acceso a islas privadas para dar forma una experiencia singular. Hoy muchas compa?¨ªas, tambi¨¦n ofrecen rutas asequibles por el Mediterr¨¢neo (elegido por el 75% de los turistas espa?oles en 2015) y el norte de Europa por menos de lo que costar¨ªa viajar a Asia o Am¨¦rica.

Eso lo sabe Maite Ca?adas, que, gracias a un dinero que hab¨ªa ahorrado, se ha permitido el capricho de invitar a los suyos. "Despu¨¦s de echar un vistazo a lo que se puede hacer all¨ª, s¨¦ que no se van a aburrir", contaba a sus amigos meses antes del viaje, pues lo hab¨ªa reservado con mucha antelaci¨®n. Que no haya tiempo para el aburrimiento y ahorrar durante las vacaciones son dos buenas razones para pasar una semana en medio del mar con tus hijos, tus padres, tus hermanos y tu pareja. Pero hay muchas m¨¢s.

En pleno verano tus hijos pueden patinar sobre hielo

Cerca de calas paradis¨ªacas, adultos y ni?os pueden patinar sobre hielo en una pista cubierta. Los patines los pone el barco. Para los que buscan actividades f¨ªsicamente?menos exigentes tambi¨¦n hay minigolf, para practicar el swing con unas magn¨ªficas vistas al mar.

Sale m¨¢s barato si lo reservas ahora (y los ni?os van gratis)

Preparar las vacaciones de 2017 con antelaci¨®n supone un ahorro considerable: hasta un 25% de descuento en el precio de los billetes al reservar antes de que termine 2016, por ejemplo, en los cruceros de Royal Caribbean, una de las compa?¨ªas l¨ªderes del sector. En algunas fechas los ni?os solo pagar¨¢n las tasas y las propinas obligatorias, si se compra el viaje antes del 16 de octubre.

Os quedar¨¦is con la boca abierta con los espect¨¢culos a bordo

Los cruceros cuentan con sus propios teatros, con capacidad para m¨¢s de mil personas. La mayor¨ªa programa espect¨¢culos tra¨ªdos directamente desde Broadway y otros con n¨²meros a¨¦reos o sobre hielo?de creaci¨®n propia. Hay tambi¨¦n infantiles basados en personajes del cine y la televisi¨®n.Tambi¨¦n hay desfiles por todo el barco y animaciones durante los desayunos con los protagonistas de las pel¨ªculas de Dreamworks, Shrek, Madagascar y Kung Fu Panda.

Para dar un respiro a los padres (y a los abuelos), las compa?¨ªas de cruceros habitualmente ofrecen clubes infantiles, divididos por edades, llenos de actividades art¨ªsticas y deportivas, siempre guiados por monitores. Los adolescentes se divierten en zonas exclusivas ¡ªcon sala de cine y lectura ¡ª o en las discotecas light donde no se sirve alcohol.

Todos, incluido el abuelo, aprender¨¦is a surfear

Pasar una semana en un barco no es sin¨®nimo de sedentarismo. En un crucero puedes estar todo el d¨ªa en la tumbona, remoj¨¢ndote en la piscina, o cogiendo olas sobre una tabla de surf en la cubierta. Los barcos de Royal Caribbean cuentan con un simulador de surf donde perfeccionar la t¨¦cnica o aprender las nociones b¨¢sicas con instructores.

Los pasajeros de secano, pero amantes de las alturas, pueden encaramarse a los roc¨®dromos que desde hace unos a?os incluyen muchos de estos barcos. Los m¨¢s en¨¦rgicos, adem¨¢s, tienen la posibilidad de enfundarse los guantes y dar unos cuantos pu?etazos sobre un ring de boxeo reglamentario.

No hay que cargar con el equipaje en las paradas

Maletas, carritos, juguetes¡­ Viajar con ni?os puede ser un engorro cuando se han programado varios destinos vacacionales. En un crucero todo se simplifica: el equipaje se factura en el puerto y la tripulaci¨®n lo distribuye por los camarotes. En cada lugar en el que se atraca basta bajar con lo b¨¢sico. As¨ª se puede disfrutar mucho mejor, por ejemplo, de la plaza de San Marcos de Venecia (Italia), de las playas de Santorini (Grecia) o del museo de Abba en Estocolmo, en las rutas del norte de Europa.

Os pondr¨¦is m¨¢s guapos que nunca (y estar¨¦is m¨¢s relajados)

Mientras los peque?os se entretienen en la piscina, bailan o juegan a bal¨®n prisionero ¡ªhay partidos programados entre las actividades infantiles¡ª, los mayores disfrutan de un masaje, se relajan entre las burbujas del jacuzzi o en la sauna ¡ªhay un ¨¢rea solo para adultos¡ª, o se someten a una sesi¨®n de acupuntura antiestr¨¦s.

Comer¨¦is hasta saciaros (como el d¨ªa de Navidad en casa de la abuela)

El primer d¨ªa, pizza; el segundo, costillas. El buf¨¦ es uno de los lugares m¨¢s concurridos del barco. El pasajero puede all¨ª desayunar, comer y cenar, pero las opciones gastron¨®micas son habitualmente mucho m¨¢s amplias: hay restaurantes de comida asi¨¢tica, italiana, americana o gourmet que completan la oferta para satisfacer los diferentes gustos de todos los miembros de la familia.

Y muchos ratos os olvidar¨¦is de que los ni?os existen

Una partidita de hockey de mesa (cuidado con los dedos) o ¡°un vicio¡± al Pacman, el comecocos amarillo que engulle fantasmas fluorescentes, son ocasiones perfectas para estrechar los v¨ªnculos entre primos o con nuevos amigos. Y de paso, liberar a padres y abuelos.

Esta noticia, patrocinada por Royal Caribbean,?ha sido elaborada por un colaborador de EL PA?S.