?Sab¨ªas que existe la polic¨ªa sobre esqu¨ªs?
Del Pirineo a Sierra Nevada, agentes especializados controlan los comportamientos de riesgo, los accidentes y el fraude en las escuelas de esqu¨ª
La mayor¨ªa de los esquiadores que se han deslizado este invierno por las pistas aragonesas no se han dado cuenta. Pero mientras ellos disfrutaban de la nieve, unos ojos vigilaban, desde el anonimato, que todo iba bien; polic¨ªas nacionales esquiadores, vestidos de paisano, que por primera vez han patrullado este a?o de forma estable y sistem¨¢tica en todas las estaciones de esqu¨ª de esa comunidad, como Cerler y Formigal-Panticosa, del grupo Aramon, incluyendo las dos de Teruel, Javalambre y Valdelinares. Hasta ahora solo se hab¨ªa hecho, y de forma parcial, en Huesca. Su objetivo principal: acabar con el intrusismo entre monitores, algo relativamente frecuente y que hab¨ªa sido denunciado en numerosas ocasiones por las escuelas reconocidas de estos deportes y por las propias estaciones.
Empezaron a actuar hace ya alg¨²n tiempo a petici¨®n de los centros invernales. Y al parecer han tenido ¨¦xito. No solo por las actas levantadas a lo largo del invierno sino porque su presencia ha disuadido a muchos de intentarlo. Estos agentes han solicitado la documentaci¨®n a pie de pistas a los profesionales del sector para comprobar que ten¨ªan la titulaci¨®n adecuada y que las empresas para las que trabajaban estaban registradas como empresas de ocio activo, dispon¨ªan de los seguros de responsabilidad civil correspondientes y estaban al tanto de sus obligaciones con la Seguridad Social. En diez de esos controles se han descubierto irregularidades y se ha abierto el procedimiento para una posible sanci¨®n que fijar¨¢ el gobierno de Arag¨®n. El asunto va m¨¢s all¨¢ de un mero problema de competencia desleal; se ha dado alg¨²n caso de accidentes con grupos de esquiadores en los que el monitor -presumiblemente sin la cualificaci¨®n necesaria- ha desaparecido abandonando a sus alumnos en la monta?a sin socorrerles ni responsabilizarse de lo ocurrido, dejando al herido o heridos en la pista.
Aunque su misi¨®n primordial es este control sobre escuelas y monitores, tambi¨¦n han prestado auxilio en casos de accidentes y han colaborado con el personal de las estaciones cuando ha sido necesario. ¡°Si los agentes ven algo que requiere su intervenci¨®n, lo hacen¡±, asegura el comisario Antonio Placer, jefe de los 150 agentes que integran la Unidad de Polic¨ªa Nacional Adscrita a la Comunidad de Arag¨®n. ¡°Pueden intervenir si sucede algo muy flagrante, si ven un comportamiento que entra?a verdadero riesgo; el consumo de marihuana, por ejemplo, algo relativamente frecuente¡±, dice. Las estaciones, desde luego, est¨¢n contentas; creen que la sola presencia de los agentes ha hecho disminuir los casos de intrusismo y ha aumentado la sensaci¨®n de seguridad en las pistas.
Los agentes de esta unidad no llevan uniforme ni identificaci¨®n alguna a la vista porque su labor perder¨ªa eficacia, como es l¨®gico; van vestidos como un esquiador m¨¢s y su nivel t¨¦cnico les permite deslizarse por cualquier lugar de la estaci¨®n. Solo cuando se deciden a intervenir se colocan el chaleco que les identifica como polic¨ªas. Este invierno han subido ya de forma regular a la monta?a, aunque no a diario, y siempre en fechas de mucha afluencia de esquiadores. La Unidad de Polic¨ªa Nacional Adscrita a la Comunidad de Arag¨®n tiene solo diez a?os y es la m¨¢s joven de las creadas hasta ahora; hay otras similares en Andaluc¨ªa, Galicia y Comunidad Valenciana. Depende del Ministerio del Interior y su cometido es desarrollar, desde el punto de vista policial, las competencias transferidas a la comunidad, entre otras las que tienen que ver con el juego, la protecci¨®n de menores y la custodia de personas y edificios. Para cumplir con su misi¨®n, su jefe, el comisario Placer, espera y desea que su plantilla de 150 agentes se vea pronto ampliada.
Sierra Nevada
Andaluc¨ªa tambi¨¦n tiene su unidad de polic¨ªa nacional adscrita a esa comunidad y dentro de ella el llamado N¨²cleo de Esqu¨ª de la jefatura provincial de Granada. Son agentes dotados del equipo y la preparaci¨®n necesarios para actuar en las pistas por iniciativa propia, a petici¨®n de la estaci¨®n o en colaboraci¨®n con otras fuerzas de seguridad. Sus competencias son muy amplias. Incluye, como en Arag¨®n, la supervisi¨®n de escuelas y monitores (para evitar el intrusismo laboral y el riesgo para la integridad f¨ªsica de quienes contratan a personas sin titulaci¨®n) pero tambi¨¦n la prevenci¨®n de venta y reventa callejera de forfaits; la vigilancia del esqu¨ª fuera de pista para evitar da?os en la flora del parque natural y nacional; el control de conductas inadecuadas en pistas que puedan desembocar en accidentes o en crear inseguridad o alarma en otros esquiadores; la identificaci¨®n de autores de atropellos en la nieve y el socorro a las v¨ªctimas; el control de entrada en pistas de personas ajenas a la pr¨¢ctica del esqu¨ª, especialmente la de peatones, y la participaci¨®n en casos de avalanchas, cat¨¢strofes de cualquier tipo y desaparici¨®n de personas. Tambi¨¦n se encargan de la prevenci¨®n y detecci¨®n de consumo de estupefacientes en la estaci¨®n y aleda?os, el control de perros peligrosos sueltos, la protecci¨®n del medio ambiente y el auxilio en carretera durante los desplazamientos a la estaci¨®n, especialmente cuando las condiciones meteorol¨®gicas son adversas. De todas esa actuaciones se derivan, seg¨²n los casos, actas por infracci¨®n administrativa o la instrucci¨®n de atestados judiciales.
Esta unidad ha tenido un trabajo extra en Sierra Nevada entre el 6 y el 19 de marzo durante la celebraci¨®n de los Campeonatos del Mundo de Freestyle y Snowboard. Trece agentes, una parte de ellos especializados en esqu¨ª, colaboraron en el buen desarrollo de ese acontecimiento deportivo antes y durante las pruebas en turnos de d¨ªa, tarde y noche. Hicieron 178 intervenciones, la mayor parte en establecimientos de ocio y restauraci¨®n por carencia de los permisos correspondientes y otras por consumo de drogas; pero tambi¨¦n prestaron auxilio a seis personas en pistas y realizaron un rescate. Los agentes de esta unidad han estado trabajando durante todo el invierno, especialmente en festivos, fines de semana y d¨ªas de gran afluencia.
Catalu?a
Los Mossos d¡¯Esquadra, la polic¨ªa auton¨®mica catalana, tiene una unidad de intervenci¨®n en monta?a con sedes en Vielha (valle de Ar¨¢n), Seu d¡¯Urgell y Sabadell con agentes especializados en esqu¨ª, escalada, barranquismo, aguas bravas y en general cualquier actividad deportiva de riesgo al aire libre. Ellos se encargan de la seguridad y el patrullaje en todas estaciones de esqu¨ª de Catalu?a; cada d¨ªa est¨¢n al menos en una de ellas aunque pueden acudir con rapidez a otras, utilizando incluso un helic¨®ptero del cuerpo cuando es necesario. Van equipados con un uniforme especial que incluye todos los complementos habituales para esquiar, identificados como polic¨ªas y poseen la destreza necesaria para hacer cualquier recorrido que pueda seguir un esquiador. Entre sus atribuciones est¨¢n el control de reventa y falsificaci¨®n de forfaits y la vigilancia de comportamientos de riesgo en pistas, como el exceso de velocidad.
En este apartado la ley no es del todo clara -seg¨²n indican- y su intervenci¨®n se limita en un principio a llamar la atenci¨®n si no hay lesionados. Pero si la situaci¨®n lo requiere, est¨¢n autorizados a retirar el forfait incluso a retener a los implicados, identificarlos y acompa?arlos hasta que se resuelva el problema. Tienen equipo suficiente para participar en rescates de esquiadores atrapados en telecabinas u otros remontes mec¨¢nicos y tambi¨¦n en plena monta?a y es frecuente verlos en los simulacros que se realizan en las estaciones. En los casos m¨¢s graves, participan en los levantamientos de cad¨¢veres causados por cualquier motivo y en la investigaci¨®n de accidentes del tipo que sea siempre que haya heridos; en los de escalada pueden hacer averiguaciones, por ejemplo, sobre el comportamiento del material (cuerdas, arneses y otros elementos de esta actividad deportiva) y sus posibles defectos de fabricaci¨®n o manipulaci¨®n incorrecta o malintencionada. Trabajan en colaboraci¨®n permanente con las estaciones de esqu¨ª.
Andorra
En el Principado la situaci¨®n es parecida aunque con matices. En las estaciones de Pal Arinsal y Ordino Arcalis, dentro del dominio de Vallnord, una pareja de agentes se pasea con cierta frecuencia, especialmente en d¨ªas en los que se celebra alg¨²n acontecimiento deportivo. Su misi¨®n aqu¨ª es evitar posibles altercados entre los usuarios y vigilar muy especialmente a los esquiadores de monta?a y a quienes caminan con raquetas y entran en las pistas y no tanto los excesos de velocidad o la titulaci¨®n de los monitores. El esqu¨ª de monta?a y los paseos con raquetas son dos actividades que han tomado mucho auge en los ¨²ltimos tiempos: permiten disfrutar de la monta?a y adem¨¢s son m¨¢s baratos porque no hay que comprar forfait. Lo suyo es practicarlo en monta?a abierta pero resulta m¨¢s c¨®modo y seguro aprovechar las superficies lisas preparadas por las m¨¢quinas de las estaciones; el problema es que cuando entran en las pistas las posibilidades de colisi¨®n entre quienes suben caminando, lentamente, y los que bajan esquiando a mucha m¨¢s velocidad aumentan.
En el caso de las estaciones de Vallnord, si se detectan comportamientos peligrosos de los esquiadores de alpino -o directamente prohibidos- son los propios trabajadores los que hablan con los afectados para que cambien de actitud. Seg¨²n los responsables de este centro invernal, en la mayor¨ªa de los casos se acepta la reprimenda y se subsana la situaci¨®n. Caso contrario, y si las circunstancias lo requieren, se da aviso a la polic¨ªa; en ning¨²n caso el personal de las estaciones est¨¢ habilitado para retener a las personas, por lo que si los agentes tardan en llegar es probable que los implicados se marchen impunes. A las estaciones de Andorra, seg¨²n dicen, les gustar¨ªa corregir este d¨¦ficit de seguridad en sus instalaciones con la presencia permanente de al menos dos agentes durante todo el d¨ªa. Las caracter¨ªsticas del Principado y los recursos humanos de la Polic¨ªa del pa¨ªs no lo permiten por ahora, en su opini¨®n.
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