Uarzazat, la ciudad del cine de Marruecos

Puerta de entrada a la legendaria Ruta de las Casbas, Uarzazat es una tranquila ciudad de menos de 300.000 habitantes situada entre las monta?as del Atlas de Marruecos y los llamados Oasis del Sur. Hasta tiempos recientes era poco m¨¢s que una escala o una base para los viajeros que emprend¨ªan el recorrido por enclaves m¨¢s remotos del centro del pa¨ªs, pero hoy son m¨¢s los visitantes que agotan al menos una jornada en una localidad que ofrece varios enclaves atractivos, por no hablar de sus fascinantes alrededores. Un destino que m¨¢s de uno elegir¨¢ porque, jugando un poco con las fechas en la web de Ryanair, se puede volar directo desde Madrid por 15 euros, ida y vuelta.

9.00 Torta de harsha para desayunar

El caf¨¦ m¨¢s recomendable para empezar la jornada con un potente desayuno es Habous (1), inmejorablemente situado en la c¨¦ntrica plaza de Al Mouahidine (2). Ofrecen varios tipos de desayunos a base de zumos naturales, caf¨¦ o t¨¦ a la menta, tortas de ?harsha (el pan de s¨¦mola de trigo marroqu¨ª) con aceite, miel o pasta de cacahuete, tortillas, etc¨¦tera. Es tambi¨¦n un restaurante de gastronom¨ªa t¨ªpica local y pasteler¨ªa de dulces ¨¢rabes.

10.00 Un gran plat¨® en el desierto

El d¨ªa empieza a las afueras de la ciudad. En direcci¨®n a Ait Ben Haddou est¨¢n los legendarios Estudios Atlas. Unas 20 hect¨¢reas de plat¨®s rodeados de desierto donde se grabaron escenas de pel¨ªculas como Kundun (1997), El reino de los cielos (2005), Ast¨¦rix y Ob¨¦lix: Misi¨®n Cleopatra (2002) o La joya del Nilo (1985). Y es que Uarzazat presume de ser la capital cinematogr¨¢fica de Marruecos, como demuestran las fotograf¨ªas de grandes estrellas de Hollywood que se hospedaron en el hotel Oscar (3), a la entrada de los estudios, y que adornan el sal¨®n de su elegante bar Gladiator.

11.00 Muros y casas de adobe

A 30 kil¨®metros al noroeste de Uarzazat, trayecto que se cubre c¨®modamente en un taxi, se yergue la fabulosa casba de Ait Ben Haddou (4), patrimonio mundial de la Unesco y considerada una de las mejor conservadas del pa¨ªs. Los muros y casas de adobe de Ait Ben Haddou ya cobijaban el descanso de las caravanas que enlazaban Marrakech con Tombuct¨² desde la ¨¦poca de los almor¨¢vides en el siglo XI, y en tiempos m¨¢s recientes han sido escenario de las andanzas de Lawrence de Arabia (1962), del entrenamiento de Russell Crowe en Gladiator (2000) o del recibimiento y adoraci¨®n de los habitantes de Yunkai a la reina Daenerys en la tercera temporada de la serie Juego de tronos. Despu¨¦s de deambular entre las callejuelas y trepar y descender desde la cima de este lugar m¨¢gico, es una maravilla relajarse con un t¨¦ caliente o un plato r¨¢pido en la terraza del Caf¨¦ Auberge Tamlalt (5); tiene unas vistas impresionantes sobre esta ciudad fortificada.

15.00 ?Tay¨ªn de pollo o de cordero?

De regreso a Uarzazat, el restaurante Douyria (6), en la avenida de Mohammed V, que circunda la casba, sirve deliciosos tayines de pollo, cordero, gambas o vegetarianos, entre otras especialidades marroqu¨ªes, en una agradable terraza con una buena panor¨¢mica. Y de postre, por ejemplo, riqu¨ªsimos pastelitos ¨¢rabes o yogur casero.

16.00 La ciudadela de los glaoui

Incluida en 2016 en la lista de monumentos protegidos de Marruecos, la casba de Taourirt (7) de Uarzazat no es tan fastuosa como la emblem¨¢tica de Ait Ben Haddou, pero la sencilla belleza del palacio del Pach¨¢ Glaoui (8), del siglo XVIII, donde se pueden apreciar los restos de una sala de oraci¨®n y otras habitaciones embellecidas con azulejos andalus¨ªes, y la autenticidad de la medina ¡ªla antigua Uarzazat¡ª que se extiende tras los muros, y donde una tienda de antig¨¹edades se ha ubicado en una antigua sinagoga, hacen de este monumento vivo una visita que no defrauda a nadie. A la salida, frente al palacio se puede visitar otro hito cinematogr¨¢fico: el Museo del Cine (9). Y es que en la vieja ciudad, ?c¨®mo no!, tambi¨¦n se han rodado filmes famosos como El cielo protector (1990) o El pr¨ªncipe de Persia (2010).

18.00 Tarde para las compras

El zoco central (10), adyacente a la plaza de Al Mouahidine, es peque?o, pero sus puestos ofrecen una buena variedad de especias, aceite de arg¨¢n, d¨¢tiles, verduras, instrumentos y tejidos t¨ªpicos marroqu¨ªes. Es un buen lugar para charlar con los amistosos vendedores ¡ªque no ejercen ning¨²n tipo de presi¨®n sobre los turistas que se detienen ante sus productos¡ª y los lugare?os, que tambi¨¦n hacen aqu¨ª sus compras dom¨¦sticas.

Dos cr¨¦meries (locales de zumos) contiguas y situadas detr¨¢s del zoco central, Amsterdam y Mounir (11), sirven excelentes bebidas naturales de naranja, aguacate, pera, manzana, bananas o kaki en unas pocas mesitas al aire libre, ideal para recuperar fuerzas despu¨¦s de la caminata del d¨ªa. El puesto que se encuentra en la acera de enfrente, con una gran variedad de frutos secos, est¨¢ idealmente ubicado para combinar con los zumos.

20.00 Anochecer en Al Mouahidine

Al anochecer, la plaza principal de Uarzazat, Al Mouahidine, se puebla de familias que pasean o descansan del traj¨ªn de la jornada y de ni?os que juegan al f¨²tbol embutidos en camisetas de los equipos europeos. Es un buen lugar para ver pasar la vida de un modo relajado sin dejar que los problemas le alteren a uno m¨¢s de lo necesario.

21.00 Cena en una mansi¨®n bereber

El lugar m¨¢s exquisito para cenar en la ciudad es La Kasbah des Sables (12) (195 Hay Ait Kdif), un restaurante en una antigua mansi¨®n bereber a las afueras, en el barrio de Al Kdif. En un escenario que es puro exotismo, entre muebles tradicionales y antig¨¹edades tribales de los glaoui y bajo la tenue iluminaci¨®n de decenas de lamparitas multicolores, los platos t¨ªpicos marroqu¨ªes (tay¨ªn, cusc¨²s, pastela de carne o pollo, brochetas¡­) se alternan con algunas especialidades de Francia, la antigua metr¨®poli colonial. Tomar un dulc¨ªsimo t¨¦ a la menta, que se sorbe entre cojines que almohadillan los recovecos de uno de los patios bajo las estrellas, es el broche perfecto para una jornada en la rom¨¢ntica Uarzazat.