15 fotosLonely Planet15 excursiones a una hora de BarcelonaMonta?as de formas surrealistas, termas romanas, mansiones modernistas, bodegas de cava, cuadros de Picasso y un castillo de sal. Naturaleza, arte y gastronom¨ªa muy cerca de la animada capital catalanaLonely Planet09 jun 2021 - 19:35CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceA escasos 30 kil¨®metros de la ciudad de Barcelona, Montserrat es mucho m¨¢s que una sierra: es un aut¨¦ntico s¨ªmbolo de la identidad catalana. Situada en el coraz¨®n de un macizo de formas surrealistas, entre las comarcas de la Anoia, el Bages y la del Baix Llobregat, todos sus monolitos rocosos tienen nombre propio y supone un aut¨¦ntico reto dar con todos. El elefante, el mono, la momia¡ son f¨¢ciles de identificar. Otros pin¨¢culos cuesta m¨¢s imagin¨¢rselos convertidos en el fraile, el loro o el centinela¡. Esta sierra de siluetas imposibles alberga un monasterio benedictino del mismo nombre que contiene la talla rom¨¢nica de La Moreneta, patrona de Catalu?a. Y en su bas¨ªlica canta la Escolan¨ªa de Montserrat, uno de los coros de ni?os cantores m¨¢s antiguos y prestigiosos de Europa. Para llegar desde Barcelona, lo mejor es ir hasta el pueblo de Monistrol y all¨ª tomar el telef¨¦rico o el tren cremallera (unos 15 minutos) que asciende hasta el complejo religioso. La abad¨ªa en realidad consta de la zona mon¨¢stica propiamente dicha (bas¨ªlica y dependencias monacales) y de los edificios destinados a atender a los visitantes. El Museu de Montserrat expone piezas de todos los tiempos y el nuevo Espacio Audiovisual desvela todos los misterios del santuario y de la monta?a. Despu¨¦s de visitar el recinto, merece la pena adentrarse en alguno de los senderos se?alizados por los alrededores, acercarse a la Santa Cova o recorrer el V¨ªa Crucis desde la Pla?a Abat Oliba hasta la capilla de la Soledad. O sencillamente, perderse por esta monta?a de gran riqueza geol¨®gica y paisaj¨ªstica, declarada parque natural en 1987.Artur Debat (getty images)Otro s¨ªmbolo de Catalu?a es el cava. Y para entenderlo y disfrutarlo, nada como una escapada a Sant Sadurn¨ª d¡¯Anoia, considerada la capital del cava, en la comarca del Alt Pened¨¨s, 50 kil¨®metros hacia el interior desde Barcelona. All¨ª hay decenas de bodegas que lo elaboran, y la mayor¨ªa est¨¢n abiertas al p¨²blico. Las hay muy conocidas, como Espai Xocolata Sim¨®n Coll, que nos sumerge en una experiencia sensorial mientras desvela los secretos de la elaboraci¨®n del chocolate.Eckhard Supp (alamy)Desde hace a?os, Sitges es uno de los destinos LGTBI m¨¢s demandados internacionalmente. Pero esta localidad playera a 40 kil¨®metros al sur de Barcelona es mucho m¨¢s que una meca para esta comunidad. Escapada casi obligada desde la capital catalana, este antiguo pueblo de pescadores, que ahora es una ciudad de m¨¢s de 30.000 habitantes, cuenta con 17 playas de arena fin¨ªsima y un paseo mar¨ªtimo jalonado de terrazas y bares de copas. Tambi¨¦n posee un encantador casco antiguo que combina museos y palacetes, casas de indianos y alguna que otra iglesia, como la de Sant Bartomeu i Santa Tecla, del siglo XVII, cuya asim¨¦trica silueta caracteriza el perfil de la villa. Sitges es uno de los enclaves costeros que mejor ha sabido combinar el turismo de cultura y playa con una oferta heterog¨¦nea para p¨²blicos de todas las edades, que van desde las terrazas tranquilas o los bares de tapas a las discotecas fuera del casco urbano. La oferta cultural tiene su primera parada en el Museu del Cau Ferrat, la espectacular casa-taller del pintor y escritor Santiago Rusi?ol (1861-1931), con obras del propio pintor pero tambi¨¦n de Ram¨®n Casas, El Greco, Zuloaga o Picasso y una interesante colecci¨®n de hierro forjado, cristal y cer¨¢mica. El Palau de Maricel (solo visitable los domingos, con gu¨ªa) tiene unas espectaculares vistas al mar, y dentro, una colecci¨®n de obras de arte, sobre todo del novecentismo y el modernismo catal¨¢n. Dos eventos con los que conviene coincidir (o evitar, si lo que buscamos es tranquilidad), son las fiestas del Orgullo, en junio, y el Festival Internacional de Sitges, pionero del cine fant¨¢stico, ciencia-ficci¨®n y terror, que se celebra desde hace m¨¢s de medio siglo. A los que les gusta conducir, pueden llegar a Sitges desde Barcelona por una carretera llena de curvas que recorre la costa del Garraf, con unas vistas maravillosas. Para muchos, es una de las carreteras m¨¢s bonitas de Catalu?a.christoph efaugere (GETTY IMAGES)El macizo del Montseny, a escasos 50 kil¨®metros de Las Ramblas, es una de las escapadas m¨¢s tradicionales de los barceloneses cuando quieren sentir de cerca la naturaleza. El macizo del Montseny es, adem¨¢s, una de las monta?as m¨¢s emblem¨¢ticas de Catalu?a, cubierto de bosques de hayas, robles, pinos, alcornoques y encinas. Adem¨¢s de parque natural, este mosaico de cumbres, bosques y r¨ªos es reserva de la biosfera de la Unesco, por su rica flora pero tambi¨¦n por su fauna (jabal¨ªes, zorros, jinetas y numerosos p¨¢jaros, anfibios y reptiles). Esta monta?a y sus pueblos diseminados invitan a reflexionar sobre la relaci¨®n del hombre con el entorno natural. Para conocer este 'collage' de paisajes mediterr¨¢neos y alpinos se puede comenzar por el municipio de Sant Celoni, o en el vecino Campins, para dar luego una vuelta hasta llegar al Montseny. Una ruta por el macizo tiene un buen colof¨®n en la localidad que da nombre al parque, con la exposici¨®n permanente 'El Parc Natural del Montseny. Un di¨¤leg entre l¡¯home i la natura', en la Casa de la Cultura. A continuaci¨®n de esta muestra se puede ver otra muy curiosa, 'Les Esquelles d¡¯en Jaume', una colecci¨®n de m¨¢s de un millar de 'esquelles' (cencerros) donados por un pastor del pueblo. Parte de su territorio se encuentra en la comarca de Osona, donde Viladrau (perteneciente a la provincia de Girona) es parada obligada, con un casco antiguo de estrechas callejuelas, resguardado al amparo de la iglesia de Sant Mart¨ª. El pueblo es conocido por sus manantiales de agua, que brotan en diversas fuentes de los alrededores, y tambi¨¦n por ser la cuna de uno de los bandoleros m¨¢s famosos de Catalu?a (Joan Sala y Ferrer, del siglo XVII, conocido popularmente como Serrallonga), un Robin Hood del Montseny, del que a¨²n a d¨ªa de hoy circulan multitud de leyendas.MELBA PHOTO AGENCY (alamy)La comarca barcelonesa del Maresme, debido a su encajonamiento entre la capital catalana y la Costa Brava, pasa desapercibida para muchos visitantes. Y es una verdadera pena, porque este tramo de costa protegido por los macizos del Montnegre y el Corredor guarda rincones tan espectaculares como un pueblo con denominaci¨®n de origen propia, un mercado de flores, mansiones modernistas e incluso un museo abarrotado de dibujos de Picasso, adem¨¢s de magn¨ªficas playas. En el pueblo de Alella, a dos kil¨®metros del mar, a¨²n quedan bellas mas¨ªas, algunas del siglo XIV. Esta villa de larga tradici¨®n vin¨ªcola tiene el Museu de l¡¯Estampaci¨®, que ilustra sobre la historia de la estampaci¨®n textil en Catalu?a. Tanto en Premi¨¤ como en casi todos los pueblos de la ruta, tras visitar el centro vale la pena bajar hasta la playa y, si el tiempo acompa?a, darse un buen chapuz¨®n en el mar. Para ello, habr¨¢ que franquear la v¨ªa del tren, aut¨¦ntica barrera arquitect¨®nica entre los pueblos y el mar. Por ello es importante que, al llegar a cada uno de los municipios, se preste especial atenci¨®n a las pocas calles que siempre en forma de t¨²nel sortean la v¨ªa del tren (y a menudo la Nacional II) y permiten alcanzar las playas y los puertos deportivos de todo el Maresme.Proformabooks (getty images)el Museu Mar¨¨s de la Punta, con una amplia colecci¨®n de encajes: tanto aqu¨ª como en el cercano pueblo de Arenys de Munt existe una larga tradici¨®n en el arte de tejer con bolillos. A las afueras, adem¨¢s del cementerio, puede verse la Torre dels Encantats, un torre¨®n circular construido entre los siglos XIII y XIV.KarSol (getty images)Para descansar del ajetreo de Barcelona, nada mejor que una escapada a un ba?o termal. De siempre, Catalu?a ha gozado de una larga tradici¨®n balnearia. Fueron los griegos y los romanos quienes introdujeron el uso del agua con fines terap¨¦uticos en esta zona de la Pen¨ªnsula, y desde entonces la pasi¨®n por la pr¨¢ctica del termalismo, facilitada por la enorme riqueza de las aguas mineromedicinales, ha sido una constante en la historia de Catalu?a, especialmente a partir de finales del siglo XIX. Caldes d¡¯Estrac, tambi¨¦n conocido como Caldetes, es un pueblo costero con la Fundaci¨® Palau (en la foto), un apenas conocido centro de arte que alberga obras de Picasso y otros artistas. Se trata de la colecci¨®n particular de Josep Palau i Fabre (1917-2008), polifac¨¦tico poeta y escritor que, gracias a su estrecha relaci¨®n con Picasso, Lorca, Alberti, Octavio Paz y otras celebridades, conect¨® la cultura catalana con las principales corrientes art¨ªsticas del siglo XX. Su exposici¨®n sorprende con obras de Gargallo, Nonell, Opisso y otros artistas, as¨ª como 50 cuadros y dibujos de Picasso (tras el Museu Picasso de Barcelona, este es el segundo espacio expositivo de Catalu?a con m¨¢s obras del genial pintor). Otros balnearios, adem¨¢s del de Estrach, donde puede disfrutarse del termalismo catal¨¢n son los de Caldes de Montbui, Caldes de Malavella, Caldes de Bo¨ª, Vallfogona de Riucorb, Sant Hilari Sacalm, Benifallet, Santa Coloma de Farners y La Garriga.parador, adem¨¢s de la colegiata de Sant Vicen?, rom¨¢nica, con una nave central presidida por un amplio presbiterio.Prisma by Dukas Presseagentur GmbH (alamy)A la capital del Alto Pened¨¨s se la conoce por el cava y los castellers. Pinord. Pero quiz¨¢ sea mejor recorrer el Cam¨ª del Vi, un sendero interpretativo con una duraci¨®n de tres horas por los vi?edos que muestra el ciclo de la vi?a, el sistema de poda, los distintos tipos de uvas y los diferentes modos de elaboraci¨®n de los vinos y cavas. Adem¨¢s, Vilafranca ¡ªjunto con la localidad tarraconense de Valls, a 45 kil¨®metros de distancia¡ª es villa castellera por excelencia, con tres ¡®colles castelleres¡¯ que compiten sanamente entre s¨ª en la fiesta mayor, entre el 29 de agosto y el 2 de septiembre. Ver c¨®mo se apoyan unos en otros para tocar el cielo deja boquiabierto a cualquiera. Los buenos gastr¨®nomos no deben de irse sin probar el 'gall negre' (gallo negro), un ave aut¨®ctona del Pened¨¨s que puede degustarse en los restaurantes locales y que muchos compran para Navidad en una feria muy particular, la Fira del Gall, un mercado con m¨¢s de 350 a?os de historia que se celebra antes de las fiestas.Lucas Vallecillos (alamy)Los senderistas catalanes conocen muy bien este parque natural, con 19 rutas se?alizadas que permiten descubrir paisajes donde se alternan cimas pr¨¢cticamente peladas con frondosas laderas de monta?a. La carretera de acceso sube hasta el Coll d¡¯Estenalles, punto de uni¨®n entre las dos sierras que dan nombre al parque. Las rutas por este escenario natural suelen iniciarse en Matadepera, que siempre despunta en todos los listados como la localidad catalana con mayor calidad de vida, rodeada de urbanizaciones de lujo. Se encuentra a solo nueve kil¨®metros de la populosa ciudad de Terrassa, pero a los pies de la espectacular sierra de Sant Lloren? del Munt. A unos cuatro kil¨®metros del pueblo, se llega al monasterio de Sant Lloren? del Munt, un edificio rom¨¢nico del siglo XI, que constituye una copia casi exacta del cenobio de Sant Cugat del Vall¨¨s, pues los proyectaron los mismos monjes. Est¨¢ sobre la cima de la Mola, que con sus 1.095 metros es el punto m¨¢s alto de la Serra de l¡¯Obac y el coraz¨®n del Parc Natural de Sant Lloren? del Munt i Serra de l¡¯Obac. A lo largo y ancho de todo el parque natural hay senderos se?alizados que permiten, en excursiones a pie de una o dos horas, descubrir paisajes de una gran belleza. Luego, monta?a abajo, se puede hacer un alto en Mura, peque?¨ªsimo y pintoresco pueblo con calles de fuerte pendiente y casas de piedra donde se respira un aire sosegado que parece de una ¨¦poca ya desaparecida. Curiosamente, en la parte m¨¢s baja del pueblo se encuentra la iglesia de Sant Mart¨ª, un bello edificio rom¨¢nico con un t¨ªmpano esculpido que representa la Adoraci¨®n de los Reyes Magos. Y en los alrededores hay otros muchos rincones deliciosos, como la Font de l¡¯Era, fuente rodeada de una zona de p¨ªcnic, la Font del Rector, junto al torrente de Estenalles, o el Gorg del Pare, donde en primavera y oto?o, cuando el agua es m¨¢s abundante, se forman peque?os saltos de agua.Marti Garcia (getty images)Este antiguo monasterio benedictino excavado en la roca no se sabe muy bien si est¨¢ en el cielo o en la tierra. Ya la carretera de llegada desde Sant Feliu de Codines, colgada en un despe?adero que domina el valle del Tenes, es un fabuloso anticipo. Un r¨²stico puente da acceso al monasterio, enclavado en la roca y rodeado de un entorno natural con espectaculares vistas y cascadas como la de Sant Miquel del Fai (en la imagen). el complejo Cim d¡¯?ligues, donde se hacen exhibiciones de vuelo de aves rapaces, como ¨¢guilas o halcones, y visitas guiadas por los aviarios del recinto.JackF (getty images)El nombre de esta poblaci¨®n evoca balnearios y aguas termales, pues all¨ª manan aguas a 74¡ãC de reconocidas propiedades terap¨¦uticas, conocidas ya en el siglo I antes de Cristo y que hoy se pueden seguir disfrutando en sus tres hoteles-balneario. A finales del siglo XIX el balneario conoci¨® un gran desarrollo. De esta actividad termal dan fe la Font del Lle¨®, situada en la plaza del mismo nombre (ojo, que a nadie se le ocurra beber un trago para refrescarse porque esta agua tambi¨¦n mana a 74¡ãC), en el centro de Caldes; las mencionadas termas romanas, del s. I a.C., las mejor conservadas de toda la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, formadas por una piscina rodeada de galer¨ªas cubiertas por b¨®vedas de medio punto; o los ba?os termales El Safareig, un espacio p¨²blico donde se puede disfrutar de un ba?o terap¨¦utico que aprovecha la estructura de un antiguo lavadero. Tambi¨¦n los tres hoteles-balneario de Caldes: Termes Victoria, Broquetas y Vila de Caldes. Pero si uno quiere saberlo todo sobre el termalismo, debe hacer una pausada visita al Museu Thermalia dedicado a la cultura del agua termal, con la exhibici¨®n 'L¡¯ess¨¨ncia balne¨¤ria'. De sus cuatro plantas una est¨¢ dedicada al termalismo, otra a exposiciones temporales y en las otras dos hay una muestra con obras del pintor y escultor Manolo Hugu¨¦, que lleg¨® a Caldes de Montbui, precisamente, atra¨ªdo por las propiedades medicinales de sus aguas termales. Adem¨¢s, fruto de la amistad que Hugu¨¦ mantuvo con Picasso, tambi¨¦n hay una peque?a exposici¨®n de obras del c¨¦lebre pintor malague?o.Xavier Fores - Joana Roncero (alamy)Los amantes de la arqueolog¨ªa tienen cita en el yacimiento que hay junto al pueblo de Ol¨¨rdola, en la comarca del Alt Pened¨¨s, un batiburrillo de construcciones de diferentes per¨ªodos que abarcan desde la Edad del Bronce hasta la ¨¦poca altomedieval, con murallas cicl¨®peas y medievales, una atalaya romana, restos de un castillo, muestras ¨ªberas, un aljibe y una capilla moz¨¢rabe. Es aconsejable ir con buen calzado y, tras la visita, pasear por los alrededores. Dentro del recinto hay un centro de interpretaci¨®n que ilustra sobre el paso del hombre por este enclave estrat¨¦gico. En la imagen, la iglesia rom¨¢nica de Sant Miquel, en la parte m¨¢s alta del municipio de Ol¨¨rdola.Josep Curto (alamy)El tiempo parece haberse detenido en la Colonia G¨¹ell, situada cerca de Santa Coloma de Cervell¨®, en la comarca del Baix Llobregat. Esta antigua colonia industrial modernista ¡ªabierta a visitas todos los fines de semana de 10.00 a 15.00; 8,5 euros por persona¡ª se conserva tal y como la ide¨® Antoni Gaud¨ª (1852-1926) en 1890 para albergar a los trabajadores de la compa?¨ªa textil G¨¹ell, que su propietario decidi¨® llevarse fuera de Barcelona, donde ya estallaban los conflictos obreros. Las formas de la cripta modernista dise?ada por el arquitecto de Reus son un proleg¨®meno de la del templo de la Sagrada Familia. Todos los edificios del complejo son modernistas y un paseo entre ellos permite respirar la atm¨®sfera de la Catalu?a de finales del XIX. En su d¨ªa, la colonia utiliz¨® la tecnolog¨ªa m¨¢s avanzada y contaba con servicios sociales pioneros para mejorar la vida de los trabajadores: viviendas unifamiliares, escuela, comercios, servicios m¨¦dicos, jardines, y hasta un ateneo y un teatro.Ivan Vdovin (alamy)Para salir del bullicio de Barcelona sin apartarse mucho de la ciudad, se puede subir a esta sierra que protege la ciudad y que representa su principal pulm¨®n verde. Es un verdadero tesoro natural para disfrutar de la naturaleza, hacer senderismo, practicar el ciclismo o incluso montar a caballo. Con m¨¢s de 8.000 hect¨¢reas de superficie, est¨¢ considerado uno de los mayores parques metropolitanos espa?oles. Dentro de sus l¨ªmites hay dos reservas naturales: la Font Groga y la Rierada-Can Balasc. Se puede ir en el funicular al parque de atracciones del Tibidabo, desde donde se alcanzan vistas fabulosas de toda la ciudad, o dirigirse al otro lado de la monta?a para caminar por sus numerosos senderos. Para disfrutar de las mejores vistas, hay miradores a cada lado: desde Torre Bar¨®, en Nou Barris, que contempla el Montseny, y desde el collado de Finestrelles, en Les Corts, que abarca una panor¨¢mica de la ciudad hasta el Maresme.James Sturcke (alamy)