Las responsables de Sanidad de la Delegaci¨®n del Gobierno contradicen la tesis de la Guardia Civil sobre el 8-M
Las funcionarias recalcan que, con la informaci¨®n que se ten¨ªa entonces, no es extra?o que se permitieran las movilizaciones
La Guardia Civil ha aprovechado la elaboraci¨®n del segundo informe enviado a la juez del caso 8-M para interrogar tambi¨¦n a las dos responsables del ?rea de Sanidad de la Delegaci¨®n del Gobierno en la Comunidad de Madrid. Las dos funcionarias, a preguntas de los agentes, insistieron en que no les parece ¡°extra?o¡± que se permitiera la manifestaci¨®n feminista del 8 de marzo en la capital, as¨ª como otras celebradas en aquellas fechas, ya que entonces no se ten¨ªa la misma informaci¨®n que ahora. Dos testimonios que contradicen la tesis principal del instituto armado, que afirma en sus escrit...
La Guardia Civil ha aprovechado la elaboraci¨®n del segundo informe enviado a la juez del caso 8-M para interrogar tambi¨¦n a las dos responsables del ?rea de Sanidad de la Delegaci¨®n del Gobierno en la Comunidad de Madrid. Las dos funcionarias, a preguntas de los agentes, insistieron en que no les parece ¡°extra?o¡± que se permitiera la manifestaci¨®n feminista del 8 de marzo en la capital, as¨ª como otras celebradas en aquellas fechas, ya que entonces no se ten¨ªa la misma informaci¨®n que ahora. Dos testimonios que contradicen la tesis principal del instituto armado, que afirma en sus escritos ¡ªdonde se incluyen errores y especulaciones¡ª que las autoridades sanitarias conoc¨ªan la ¡°gravedad de la epidemia¡± desde enero y que no se deb¨ªa haber celebrado ninguna movilizaci¨®n desde el 5 de marzo.
Esta cuesti¨®n resulta fundamental en la investigaci¨®n abierta en el Juzgado de Instrucci¨®n 51 de Madrid, ya que la magistrada Carmen Rodr¨ªguez-Medel trata de dilucidar si la Delegaci¨®n del Gobierno contaba en aquel momento con ¡°suficientes datos para prohibirlas legalmente por razones sanitarias¡± y, por ello, mantiene imputado por un delito de prevaricaci¨®n al m¨¢ximo responsable de ese ¨®rgano, el socialista Jos¨¦ Manuel Franco. A este respecto, la directora del ?rea de Sanidad, m¨¦dico de carrera, cont¨® a los agentes que ¡°en fechas pr¨®ximas al 8 de marzo la informaci¨®n no era la misma y no se pod¨ªan evaluar los riesgos¡± como ahora. Ella misma admite que, visto a d¨ªa de hoy y con los datos de los que se disponen actualmente, considerar¨ªa ¡°descabellado¡± celebrar esas movilizaciones y que pudieron ayudar a elevar los contagios, pero entonces ¡°no le pareci¨® extra?o que no se suspendieran¡±.
En la misma l¨ªnea se pronuncia la jefa del ?rea, tambi¨¦n funcionaria: ¡°En aquel momento no fue lo m¨¢s oportuno, pero tampoco se ten¨ªan los plenos conocimientos actuales que tenemos de la covid-19 ahora¡±. Pese a estas palabras, en la parte del informe donde se plasman las conclusiones extra¨ªdas de ambas declaraciones, los agentes de la Guardia Civil obvian ese matiz y consideran que ¡°el dato de inter¨¦s principal¡± es que el Ministerio de Sanidad ya apreciaba entonces ¡°posibles riesgos¡±. Un argumento que basan, por ejemplo, en que en aquella ¨¦poca ya se hab¨ªan difundido algunos protocolos e informaciones en la Delegaci¨®n del Gobierno sobre medidas de higiene y distanciamiento social, e incluso se hab¨ªa celebrado una reuni¨®n por videoconferencia para abordar aspectos relacionados con el coronavirus.
Estas consideraciones parciales del instituto armado, que ha incluido en su segundo informe el off the record de Irene Montero sobre la marcha del 8-M, se conocen despu¨¦s de que la Abogac¨ªa del Estado cargase ya contra los comentarios que vert¨ªa en el primer documento enviado a la juez. El ¨®rgano jur¨ªdico dependiente del Gobierno recalc¨® que las pesquisas de los agentes contienen un ¡°claro sesgo acusatorio¡±, ¡°deslizan continuas sospechas y comentarios suspicaces¡±, y no analizan ¡°evidencias cient¨ªficas, solo referencias mutiladas o parciales a documentos t¨¦cnicos o noticias de prensa, que en modo alguno pueden caracterizarse como una base cient¨ªfica¡±. El informe forense encargado por la magistrada tambi¨¦n conclu¨ªa que ¡°no es posible saber si una persona que haya asistido a cualquiera de las manifestaciones celebradas dichos d¨ªas y que haya resultado infectada por el virus lo haya sido en esas concentraciones masivas de personas o en otro lugar, transporte p¨²blico, establecimiento p¨²blico, etc.¡±
¡°Es manifiesto y notorio que, hasta el 14 de marzo, no hab¨ªa ninguna resoluci¨®n de ninguna autoridad competente en materia sanitaria, ni local, ni auton¨®mica, ni estatal, que limitara las concentraciones de personas¡±, continuaba la Abogac¨ªa en otro escrito. Varios expertos consultados por El PA?S coinciden en que la marcha del 8-M result¨® marginal para la pandemia y consideran que, por ejemplo, fue m¨¢s relevante el transporte p¨²blico para la expansi¨®n del virus.
El caso 8-M ha revolucionado la pol¨ªtica nacional, con la Guardia Civil como epicentro del se¨ªsmo. El primer informe del instituto armado enviado a la juez provoc¨® el cese del coronel Diego P¨¦rez de los Cobos, que estaba al mando de la Comandancia donde trabajan los agentes que confeccionaron el documento. Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, neg¨® en un primer momento la relaci¨®n entre la destituci¨®n y la causa, pero tras varias contradicciones acab¨® admiti¨¦ndolo.
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