Robles acusa a los exmilitares que enviaron una carta al Rey de querer implicarlo en la lucha pol¨ªtica

La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha acusado hoy en el Congreso a los 73 mandos retirados del Ej¨¦rcito de Tierra que han enviado una carta al Rey en contra del Gobierno, al que consideran una amenaza para la unidad de Espa?a, de vulnerar la neutralidad pol¨ªtica de las Fuerzas Armadas y pretender ¡°implicar¡± al jefe del Estado en la batalla partidista.

Robles ha aprovechado su intervenci¨®n en el pleno del Congreso, en defensa del presupuesto de su departamento, para criticar a quienes, ¡°en misivas, ampar¨¢ndose en una carrera militar que ya no sirven, de la que est¨¢n muy lejos, sin defender los valores castrenses, pretenden implicar al jefe del Estado, Su Majestad el Rey, vulnerando la clave fundamental [de las Fuerzas Armadas] que es la neutralidad pol¨ªtica¡±. En la carta al Monarca, fechada el 25 de noviembre, los exmilitares, pertenecientes a la XXIII promoci¨®n de la Academia de Zaragoza, asumen el lenguaje y el discurso de Vox: aluden al ¡°Gobierno social-comunista, apoyado por filoetarras e independentistas¡± como una amenaza para la ¡°cohesi¨®n nacional¡± y la unidad de Espa?a.

¡°El jefe del Estado es de todos, no de algunos que ciertamente con determinadas cartas y misivas, implicando a Su Majestad el Rey, no est¨¢n haciendo lo que tienen que hacer como servidores p¨²blicos, ni defendiendo aquellos valores que caracterizan a la familia militar¡±, ha agregado en tono grave. Robles ha pasado de inmediato a exponer el presupuesto, cortando los aplausos de la bancada socialista.

Previamente, la titular de Defensa hab¨ªa expresado su ¡°agradecimiento, reconocimiento y orgullo a los 120.000 hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas que en este momento, sirviendo a la Constituci¨®n y desde la m¨¢s estricta neutralidad pol¨ªtica, est¨¢n en misiones en el extranjero, en misiones permanentes, haciendo de rastreadores en la Operaci¨®n Misi¨®n Baluarte, como antes lo hicieron en la Operaci¨®n Balmis¡±, de lucha contra la pandemia.

Robles ha recordado a los 188 muertos en misiones de paz, a los asesinados por el terrorismo, ¡°particularmente por la banda terrorista ETA¡±, y a los que est¨¢n retirados, pero ¡°siguen cuidando los valores que defiende la instituci¨®n castrense de neutralidad pol¨ªtica y de servicio a los ciudadanos¡±. Incluso ha expresado su ¡°reconocimiento¡± a los generales que hoy se sientan en los esca?os de Vox y el PP. ¡°En una opci¨®n leg¨ªtima, est¨¢n aqu¨ª haciendo pol¨ªtica de partidos, defienden lo que creen que son los intereses de los ciudadanos. A ellos mi reconocimiento aunque estemos tan distantes de ellos¡±, ha dicho, contraponi¨¦ndolos con los 73 mandos militares firmantes de la carta al Rey.

Todos los signatarios de la misiva (un teniente general, dos generales de divisi¨®n, cuatro generales de brigada y 66 coroneles) est¨¢n ya retirados, por lo que no est¨¢n sujetos al c¨®digo disciplinario militar y no se les puede aplicar ninguna sanci¨®n. Sin embargo, la ministra no ha querido pasar por alto el hecho de que los antiguos mandos no han actuado como ciudadanos particulares, sino haciendo ostentaci¨®n de su empleo militar y de su pertenencia a la XXIII promoci¨®n de la Academia de Zaragoza. Y se han dirigido al Rey, que es capit¨¢n general de los ej¨¦rcitos.

Defensa se ha tomado muy en serio la carta porque no se trata de un hecho aislado, sino de un movimiento en contra del Gobierno que busca recabar adhesiones entre el personal de las Fuerzas Armadas.

La carta de los 73 mandos del Ej¨¦rcito de Tierra no es la primera iniciativa de este tipo. El 10 de noviembre, 39 jefes y oficiales del Ej¨¦rcito del Aire (un general de divisi¨®n, 23 coroneles, tres tenientes coroneles y 12 capitanes), todos de la XIX promoci¨®n de la academia de San Javier (Murcia), remitieron al Rey y al presidente del Parlamento Europeo una misiva similar. La ministra guard¨® entonces silencio, pero ahora no ha querido hacerlo y ha elegido para responderles un lugar especialmente simb¨®lico: la tribuna del hemiciclo del Congreso, sede de la soberan¨ªa popular.