Casado bendice el transfuguismo para reconstruir el centro derecha
El l¨ªder del PP celebra euf¨®rico en Murcia la derrota de la moci¨®n de censura y dice que esa es la f¨®rmula para ¡°acabar con la pesadilla de S¨¢nchez¡±
Murcia, y su pacto con tr¨¢nsfugas de Ciudadanos y disidentes de Vox, es ahora el modelo con que Pablo Casado pretende relanzar su proyecto. ¡°Hoy comienza la reconstrucci¨®n del centroderecha¡±, proclam¨® el jueves el l¨ªder del PP en Cartagena, donde aterriz¨® de improviso para bendecir la maniobra que ha permitido a su partido neutralizar la moci¨®n de censura contra el Gobierno murciano. All¨ª, mientras la izquierda se desga?itaba acusando a los populares de actuar como ¡°mafiosos y corruptos¡±, ha comenzado la batalla para librar a Espa?a de lo que Casado defini¨® como ¡°la pesadilla del Gobierno de S¨¢nchez¡±.
Las filas de la derecha estallaron de j¨²bilo nada m¨¢s consumarse el fracaso de la moci¨®n de censura impulsada por PSOE y Ciudadanos. El sal¨®n de plenos de la Asamblea regional se convirti¨® de repente en una fiesta ¡ªsin distancia social, por supuesto¡ª y al jolgorio se sum¨® Casado, siempre con la escolta de su secretario general, Teodoro Garc¨ªa Egea, el murciano al que sus rivales atribuyen la paternidad de la maniobra. ¡°Hoy gana la libertad¡±, se felicitaba el presidente regional, Fernando L¨®pez Miras. ¡°Comienza un maravilloso periodo de esperanza¡±, se un¨ªan al alborozo los tres diputados expulsados de Vox, a quienes Casado y Garc¨ªa Egea acudieron raudos para agradecerles su apoyo. Una nueva etapa en la que los purgados por Santiago Abascal aspiran a hacerse con la Consejer¨ªa de Educaci¨®n e implantar de inmediato el veto parental en las escuelas.
¡°No todo vale en pol¨ªtica¡±. As¨ª, con estas palabras, pronunciadas con firmeza y convencimiento, habl¨® Casado ante los periodistas. No se refer¨ªa el l¨ªder del PP a las consejer¨ªas otorgadas a tres diputados de Ciudadanos para que retirasen su firma de la moci¨®n de censura ni a la previsible entrada de los disidentes de Vox en el Gobierno de L¨®pez Miras. Casado hablaba de lo que considera una ¡°conjura¡± urdida por Pedro S¨¢nchez para ¡°desestabilizar el centroderecha¡± derribando al Ejecutivo de esa regi¨®n mediante una alianza con Ciudadanos. El dirigente del PP sostuvo que fue S¨¢nchez quien ¡°vino aqu¨ª a comprar voluntades¡±. Los cargos otorgados por el PP a los tr¨¢nsfugas del partido de Arrimadas o los expulsados de Vox son una cosa muy diferente, seg¨²n Casado: ¡°Un punto de uni¨®n de todos los que quieren que el sanchismo no siga gobernando¡±. Los populares han logrado evitar que ¡°S¨¢nchez y sus c¨®mplices le quiten la libertad a Murcia¡±, agreg¨® el presidente regional. Y de ah¨ª tanta euforia y tanta ¨¦pica como le puso ante la Asamblea el portavoz del PP, Joaqu¨ªn Segado: ¡°En Murcia empieza la cruzada para echar a S¨¢nchez de La Moncloa¡±
La moci¨®n fracas¨® por dos votos de diferencia, 23 a 21. La candidata de Ciudadanos, Ana Mart¨ªnez Vidal, solo logr¨® el apoyo de otro compa?ero suyo, adem¨¢s de los socialistas y de Unidas Podemos. Ni siquiera se sum¨® el tercer diputado de la formaci¨®n liberal que a¨²n no se ha ido, el presidente de la Asamblea regional, Alberto Castillo, que se abstuvo y dej¨® la duda de cu¨¢l va a ser su futuro pol¨ªtico. La muralla levantada por el PP sali¨® de un batiburrillo: sus propios diputados; los tr¨¢nsfugas de Ciudadanos; los expulsados de Vox, pero que siguen ostentando la marca en el Parlamento regional, y un cuarto diputado de esta ¨²ltima formaci¨®n que permanece fiel a Abascal. ¡°Un Gobierno Frankenstein¡±, ironizar¨ªa despu¨¦s la portavoz de Unidas Podemos, Mar¨ªa Mar¨ªn.
El diputado samur¨¢i
Ahora falta por definir el futuro papel de los autodenominados ¡°diputados libres de Vox¡±, con quienes el PP est¨¢ negociando su incorporaci¨®n al Ejecutivo. Estos tres parlamentarios fueron expulsados en junio del a?o pasado por un enfrentamiento con el secretario general, Javier Ortega Smith, al negarse a que este manejase sus cuentas. Pero como eran la mayor¨ªa en el grupo ¡ªsolo uno se aline¨® con la direcci¨®n¡ª conservan la marca en la Asamblea.
Los nuevos acompa?antes en la ¡°reconstrucci¨®n¡± de Casado tienen un l¨ªder muy definido, Juan Jos¨¦ Liarte, un abogado cartagenero de 47 a?os que profesa y difunde el c¨®digo bushido de los samur¨¢is: el jueves comenz¨® su intervenci¨®n contando una de sus conversaciones con su maestro, en torno a una copa de sake y una catana, en un monte de Jap¨®n. El tono de Liarte es bastante menos agresivo del habitual en Vox. En su intervenci¨®n ante el pleno de la Asamblea, incluso habl¨® de ¡°violencia machista¡±, mientras desgranaba sentencias como ¡°la victoria y la derrota son dos imposturas¡± o ¡°el honor es un buen vino que se bebe a solas¡±. Pero, sobre todo, Liarte tiene una idea fija: lo que Vox llama pin parental, es decir, otorgar a los padres la potestad de impedir que sus hijos acudan a actividades fuera del horario lectivo con cuyo contenido est¨¦n en desacuerdo. ¡°Para nosotros es un s¨ªmbolo¡±, repiti¨® tras la derrota de la moci¨®n. Y adem¨¢s, a?adi¨®, debe aprobarse cuanto antes.
En una comparecencia ante la prensa, Liarte empez¨® diciendo que ¨¦l no tiene la menor intenci¨®n de entrar en el Gobierno para acabar admitiendo que lo aceptar¨ªa si le insistiesen mucho. Y apunt¨® al inter¨¦s de su grupo por Educaci¨®n. Poco despu¨¦s, el diario La Verdad publicaba un borrador que est¨¢n negociando el PP y estos diputados en el que se prev¨¦ ceder la Consejer¨ªa de Educaci¨®n a una de ellos, Mabel Campuzano. Fuentes del Gobierno regional precisaron que es un ¡°documento m¨¢s¡± de los que se est¨¢n manejando. Liarte tambi¨¦n apunt¨® a sus preferencias por Industria y eso s¨ª que puede ser un problema: con esa cartera se ha premiado a uno de los tr¨¢nsfugas de Cs. Por lo visto, para reconstruir el centroderecha habr¨¢ mucha gente a la que contentar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.