Murcia: un sainete pol¨ªtico con giro ins¨®lito

Un sorprendente estallido inicial, un enrevesado nudo de acuerdos, desencuentros y continuos giros de guion y un desenlace inesperado a la altura de la mejor s¨¢tira de Chesterton: la trama pol¨ªtica de la Regi¨®n de Murcia se ha complicado en este ¨²ltimo mes hasta dar lugar a una situaci¨®n ins¨®lita en el parlamentarismo espa?ol: tres pol¨ªticos tr¨¢nsfugas se han hecho con el control del grupo parlamentario al que traicionaron.

Primero fue la fallida moci¨®n de censura presentada el 10 de marzo por sorpresa por el PSOE y Ciudadanos contra el Gobierno del PP en la Asamblea regional. Despu¨¦s, el pacto alcanzado por el presidente murciano, el popular Fernando L¨®pez Miras, con tres tr¨¢nsfugas de Cs y tres diputados d¨ªscolos expulsados de Vox, para retener el poder. Y este viernes se producir¨¢ el ¨²ltimo cap¨ªtulo: la constituci¨®n de la junta de portavoces del Parlamento auton¨®mico, con un consejero del Gobierno regional que dimite para apuntillar a su propio partido ¡ªo expartido, Ciudadanos¡ª y con miembros del Ejecutivo en comisiones parlamentarias creadas para controlar al propio Gabinete. ¡°En 20 a?os, lo que ha pasado en Murcia se estudiar¨¢ en las facultades de Ciencias Pol¨ªticas de todo el mundo¡±, augura Diego Conesa, secretario regional del PSOE.

En un clima en el que no parece haber quedado Gobierno y oposici¨®n, sino vencedores y vencidos, el panorama parece despejado para L¨®pez Miras y sus socios durante la segunda mitad de la legislatura. Atrajo a sus filas a tres diputados de Cs ¡ªIsabel Franco, Valle Migu¨¦lez y Francisco ?lvarez¡ª y ofreci¨® consejer¨ªas a los tres d¨ªscolos de Vox ¡ªFrancisco Jos¨¦ Carrera, Juan Jos¨¦ Liarte y Mabel Campuzano, que se puso al frente de Educaci¨®n¡ª. Pero, aun as¨ª, el presidente murciano apreci¨® flecos en su mandato. Y este jueves ajust¨® la ¨²ltima tuerca de su trono: Francisco ?lvarez dimiti¨® de su cargo ¡ªque hab¨ªa asumido recientemente¡ª de consejero de Empleo, Investigaci¨®n y Universidades para pasar a ser portavoz del partido del que hab¨ªa sido fulminantemente expulsado: Ciudadanos.

El reglamento de la C¨¢mara ¡ªque no obliga a un diputado expulsado por su partido a abandonar el grupo¡ª s¨ª declara incompatible el cargo de consejero y la portavoc¨ªa parlamentaria. El grupo de Cs celebr¨® una votaci¨®n y ?lvarez fue elegido portavoz con el apoyo de los otros dos diputados tr¨¢nsfugas, el rechazo de los tres que se mantienen fieles al partido de In¨¦s Arrimadas y la abstenci¨®n clave de un sexto representante: Alberto Castillo, que es adem¨¢s presidente del Parlamento.

La principal impulsora de la fallida moci¨®n de censura contra el PP, Ana Mart¨ªnez Vidal, coordinadora regional de Cs, asegura que la enrevesada jugada de ?lvarez es ¡°una maniobra perfectamente coordinada para hacerse tambi¨¦n con el poder legislativo y desactivar la labor fiscalizadora y de control de la Asamblea¡±. En la formaci¨®n que preside Arrimadas en Madrid consideran que Montesquieu y su separaci¨®n de poderes han saltado por los aires. ¡°A estos tr¨¢nsfugas¡±, contin¨²a la diputada murciana, ¡°lo ¨²ltimo que les preocupa es el bienestar de los ciudadanos¡±; y subraya que todo lo han hecho con la connivencia del presidente de la Asamblea, Alberto Castillo, que va a ser ¡°reprobado¡± por Cs, formaci¨®n a la que pertenece, por permitir, con su abstenci¨®n, ¡°que un tr¨¢nsfuga expulsado de un partido sea el portavoz de ese partido¡±. ?lvarez defendi¨® este jueves en declaraciones a EL PA?S su maniobra para hacerse con la portavoc¨ªa del grupo, asegur¨® que ha contado con la supervisi¨®n de los servicios jur¨ªdicos de la C¨¢mara y argument¨® que lo ha hecho para ¡°desbloquear¡± el funcionamiento de la Asamblea murciana, paralizada, a su juicio, por la actitud de la direcci¨®n de Cs.

Con su portavoc¨ªa, ?lvarez se asegura que ninguno de los diputados arrimadistas pueda controlar las comisiones especiales o de investigaci¨®n del Parlamento regional. ?l, Franco y Migu¨¦lez forman parte de todas, incluida la que estudiar¨¢ el protocolo seguido por la Consejer¨ªa de Salud para la vacunaci¨®n contra la covid-19. Es lo que en Murcia se conoce como el vacunagate, en el que cientos de funcionarios se inocularon la vacuna sin que les tocara por turno (incluido el consejero popular de Salud, Manuel Villegas, que tuvo que dimitir). ¡°En las comisiones para controlar al Ejecutivo habr¨¢ consejeros del Gobierno¡±, critica el l¨ªder socialista, Diego Conesa. ¡°Es una anomal¨ªa democr¨¢tica, algo insostenible¡±.

Para Conesa, la Asamblea murciana est¨¢ ¡°corrompida e invadida por tr¨¢nsfugas¡±. Todo lo sucedido exhala ¡°un hedor a corrupci¨®n¡± que, en su opini¨®n, ¡°solo se puede limpiar con lej¨ªa democr¨¢tica¡±. Es decir, ¡°o con dimisiones regidas por la coherencia, la dignidad y la ¨¦tica pol¨ªtica¡± o con ¡°la convocatoria de nuevas elecciones¡±. Para el socialista, ganador de los ¨²ltimos comicios auton¨®micos, L¨®pez Miras ¡°ha roto las costuras democr¨¢ticas¡± gracias a ¡°las rencillas internas de Ciudadanos, que han destrozado el partido¡±.

En el PP simplemente se?alan que a partir de ma?ana ¡°se podr¨¢ retomar la actividad¡± de la Asamblea. Y achacan todo lo ocurrido a ¡°la actuaci¨®n de Ciudadanos¡± con su moci¨®n inicial. Los d¨ªscolos de Vox dicen que tienen ¡°intenci¨®n de dar estabilidad¡± y han reestructurado su participaci¨®n en las comisiones, incluyendo en ellas al ¨²nico diputado que sigue a las ¨®rdenes de Santiago Abascal, Pascual Salvador. Fuentes pr¨®ximas a los tr¨¢nsfugas de Cs aseguran que ¡°el Gobierno ha salido reforzado en su unidad, en torno a unos objetivos comunes¡± y ¡°por encima de personalismos y siglas¡±.

Con las placas tect¨®nicas de la pol¨ªtica murciana convertidas en dos bandos aparentemente irreconciliables, el terremoto de estas cuatro semanas parece haber dejado una desconfianza total. El r¨ªo Segura ya no es la ¨²nica cicatriz que atraviesa la Regi¨®n de Murcia.