El Defensor del Pueblo insta al Gobierno a que permita viajar a Espa?a a la ni?a congole?a tutelada por un veterinario gaditano
Las autoridades deniegan el visado a la peque?a para que venga de vacaciones con la familia que la acoge en Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo
El Defensor del Pueblo ha enviado sendas sugerencias a los ministerios de Asuntos Exteriores e Interior para que faciliten el viaje a Espa?a de Esther, una ni?a congole?a de nueve a?os tutelada por un veterinario espa?ol residente en la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo. El veterinario, Luis Flores, que trabaja en un santuario de primates en el pa¨ªs africano, lleva desde junio batallando con las autoridades diplom¨¢ticas para poder llevar a la peque?a de vacaciones a Jerez de la Frontera (C¨¢diz).
En los correos electr¨®nicos que Flores ha estado intercambiando con distintas embajadas, la respuesta siempre ha sido negativa. Primero le argumentaron que las restricciones sanitarias imped¨ªan la entrada en Espa?a de ciudadanos congoleses y, despu¨¦s, que necesitaba homologar en un juzgado espa?ol la tutela de la peque?a. Flores lleva dos a?os sin poder ir a Espa?a y quiere que tanto Esther como su mujer y el hijo de dos a?os que tienen en com¨²n conozcan a los hermanos del veterinario y a su padre, que con 89 a?os estuvo a punto de morir por covid. Sin el visado de Esther, se quedar¨ªan en tierra. ¡°No pienso dejarla sola aqu¨ª, se le caer¨ªa el mundo encima¡±, cont¨® Flores a EL PA?S la semana pasada, la primera vez que hizo p¨²blica su historia.
Tras analizar la queja de Flores, el defensor en funciones, Francisco Fern¨¢ndez Marug¨¢n, considera que en el caso de Esther est¨¢n acreditados los motivos familiares imperativos as¨ª como los humanitarios, dos excepciones que establece la norma vigente que restringe la entrada desde determinados pa¨ªses debido a la pandemia. La instituci¨®n, sin embargo, no entra en la exigencia de las autoridades espa?olas de validar la tutela de la ni?a en Espa?a. El procedimiento de homologaci¨®n que le exigen a Flores, el llamado exequatur, sirve para validar sentencias extranjeras en Espa?a, como es el caso de la tutela, pero seg¨²n se desprende de las sugerencias del Defensor no ser¨ªa necesario para conceder un visado de corta duraci¨®n para unas vacaciones.
Flores lleg¨® a la Rep¨²blica del Congo a finales de 2016, donde ejerce como veterinario jefe del Centro de Rehabilitaci¨®n de Primates de Lwiro y donde lidera el programa de capacitaci¨®n de futuros profesionales. Viv¨ªa solo, pero poco despu¨¦s de su mudanza se cruz¨® con Esther, una ni?a que entonces ten¨ªa cinco a?os y que resid¨ªa con su madre en una chabola cercana a la casa del veterinario. La peque?a, que pasaba el d¨ªa sola, mal alimentada y sucia, comenz¨® a visitar a Flores asiduamente. Com¨ªa y descansaba en su casa y al anochecer volv¨ªa a dormir con su madre, que sufre una enfermedad mental, en el suelo de su chabola. Un d¨ªa, Esther apareci¨® llorando y pidi¨® quedarse a dormir e ir a la escuela y desde entonces se volvieron inseparables. La ni?a, seg¨²n Flores, es ahora la primera de la clase, ha aprendido franc¨¦s y chapurrea ingl¨¦s y espa?ol.
El veterinario, que por entonces comenzaba a formar su propia familia con Oda, su mujer ruandesa, y su hijo Antonio, inici¨® los tr¨¢mites para tutelar a Esther en un pa¨ªs donde no est¨¢n permitidas las adopciones. Busc¨® a la familia del padre fallecido de la ni?a, mont¨® un consejo familiar que decidi¨® por unanimidad que se hiciese cargo de la peque?a, la madre dio su benepl¨¢cito y un juzgado de menores local aprob¨® el tr¨¢mite en enero de 2020.
Ya en enero de este a?o, Flores se dirigi¨® a la Embajada espa?ola en Kinsasa, capital del pa¨ªs, para consultar qu¨¦ tendr¨ªa que hacer para homologar la tutela, pero, seg¨²n ¨¦l, nunca obtuvo respuesta. Fue solo en junio, cuando empez¨® a moverse para solicitar el visado, cuando se top¨® con todos los obst¨¢culos que a¨²n no ha logrado superar. Flores quiere salir de la regi¨®n donde vive, Sud Kivu, por motivos familiares, pero tambi¨¦n porque, seg¨²n cuenta, est¨¢ agotado psicol¨®gicamente. La zona lleva a?os experimentando una escalada de violencia y los informes de la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados, Acnur, da cuenta de las violaciones de derechos humanos derivadas de los conflictos entre diferentes grupos armados y el propio ej¨¦rcito. ¡°El Defensor est¨¢ teniendo en cuenta sencillamente el lugar y la situaci¨®n en la que vivimos y que solo estamos pidiendo un visado de corta duraci¨®n¡±, celebra Flores.
Fuentes de Asuntos Exteriores explicaron a EL PA?S la semana pasada cuando pregunt¨® por el caso que ¡°la legislaci¨®n espa?ola es muy garantista en el caso de menores¡±. ¡°Se ha procurado apoyar de todas las maneras la solicitud, pero debido a las restricciones de frontera derivadas de la pandemia y al no estar la tutela reconocida en Espa?a, no se puede autorizar la entrada¡±, a?adieron. En Interior tampoco ve¨ªan margen de maniobra. ¡°Mientras no tenga el exequatur que reconozca la legalidad de esa tutela no puede entrar en Espa?a¡±, aseguraron fuentes del departamento. Esa homologaci¨®n, un filtro para evitar adopciones fraudulentas o tr¨¢fico de ni?os, no es un tr¨¢mite contemplado para la aprobaci¨®n del visado, pero las autoridades espa?olas entienden que sin ¨¦l Esther no tiene derecho a viajar como familiar de un ciudadano de la UE.
Desde que dio a conocer su caso en EL PA?S, Flores ha contado su historia en varios medios locales y nacionales y ha iniciado una campa?a de firmas en la plataforma change.org que ya cuenta con m¨¢s de 42.000 apoyos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.