El PP se ve abocado a pactar con Vox pero tratar¨¢ de achicar su espacio electoral

Hay 20 meses por delante para que el PP y Vox desarrollen sus estrategias hasta llegar a las elecciones municipales y auton¨®micas y, desde ese momento, enfilar las generales para derrotar al PSOE. Las bases ya est¨¢n puestas aunque habr¨¢ modulaciones por territorios, seg¨²n sus perspectivas electorales. Vox no es nada sin el PP, pero el primer partido de la oposici¨®n en Espa?a necesita a la formaci¨®n de Santiago Abascal para erigirse en gobierno. Esta realidad va en contra de la voluntad de los populares. Y las escaramuzas van a ir en aumento, seg¨²n prev¨¦n los interlocutores consultados por este peri¨®dico.

La vigilancia mutua va a estrecharse nada m¨¢s empezar el curso pol¨ªtico, aunque los choques de este verano anuncian un oto?o de tensi¨®n creciente. Vox no quiere que su perfil se diluya all¨ª donde ayuda a gobernar al PP, con su colaboraci¨®n imprescindible para sostener gobiernos auton¨®micos, ni que el PP le sobrepase en contundencia contra el Gobierno en las Cortes Generales. El PP se prepara para que Vox les coloque en situaciones muy inc¨®modas con la presentaci¨®n de iniciativas presididas por la carga ideol¨®gica en las que los populares no tienen el menor inter¨¦s.

Una vez superada la mitad de la legislatura en 13 comunidades aut¨®nomas y los m¨¢s de 8.000 municipios, los estudios cualitativos sobre intenci¨®n de voto, preocupaciones y liderazgos, se suceden en los partidos. Ciudadanos sigue siendo el objetivo a batir para el PP. Pero tambi¨¦n para Vox, que quiere sustituir a la formaci¨®n de In¨¦s Arrimadas en los gobiernos con el PP.

Algunos ya saben que Vox tendr¨¢ que ser el cooperador necesario para gobernar y desbancar al PSOE. Es el caso de Castilla-La Mancha, donde gobierna el socialista Emiliano Garc¨ªa-Page y tiene como jefe de la oposici¨®n a Paco N¨²?ez, presidente del PP de la regi¨®n. Este ha reconocido, en una entrevista a Europa Press, que mantiene conversaciones con Vox para llegar a acuerdos, aunque ese di¨¢logo lo quiere practicar con todos los partidos. Las apostillas no cubren ni desv¨ªan la intenci¨®n de N¨²?ez. ¡°El objetivo com¨²n es echar al socialismo¡±, y el entendimiento del ¡°centro-derecha¡±, porque, dice, el problema es el socialismo que ¡°trae miseria y falta de libertad¡±.

Es evidente que PP y Vox necesitan sumar para formar una mayor¨ªa. El PSOE manchego se agarra a subrayar el espacio ideol¨®gico en el que N¨²?ez ha colocado a Vox. ¡°Paco N¨²?ez es el ¨²nico pol¨ªtico de Espa?a que sit¨²a a Vox en el centro-derecha, cuando la ¨²nica alternativa de moderaci¨®n es la que representa Emiliano Garc¨ªa-Page¡±. Esta apreciaci¨®n del secretario de Organizaci¨®n del PSOE de Castilla-La Mancha y diputado nacional, Sergio Guti¨¦rrez, toca el eterno dilema de por d¨®nde se ganan las elecciones: por el centro, es la respuesta convencional. Si algo saben en determinadas regiones es que las fronteras se cruzan con facilidad por votantes que se sienten de centro y, unas veces pueden ir al PP y otras al PSOE. Castilla-La Mancha es una de ellas. Una baza esencial que utilizar¨¢n los socialistas ser¨¢ la de agitar la alianza de un partido extremista ¡ªdonde encuadrar¨¢ con intenci¨®n a Vox¡ª y el PP.

Este es el discurso que quiere esquivar el partido de Santiago Abascal, nada proclive a entretenerse con las asignaciones ideol¨®gicas que le hacen los dem¨¢s. ?l se dirige ¡°a los espa?oles¡±, frente a comunistas y tibios, estos ¨²ltimos en el lado del PP y Ciudadanos.

Sus proclamas se enfocan hacia asuntos como la identidad nacional, la inmigraci¨®n, y la defensa de ¡°la libertad¡±. Pero los espacios importan. En la mayor¨ªa de los territorios, los populares quieren dirigirse al ¡°centro-derecha¡±, pero tienen que compaginarlo con el recordatorio del resto de partidos de que a su lado est¨¢ Vox, a priori una opci¨®n que no seduce a los centristas. La esperanza del PP est¨¢ en que el partido de ultraderecha mantenga su ¡°techo de cemento armado¡±. Que no crezca, mejor que baje, se?ala un presidente auton¨®mico. Solo as¨ª su influencia y su capacidad de presi¨®n ser¨¢ limitada y manejable. Esta es la aspiraci¨®n territorial y nacional del PP.