Una votaci¨®n en el Congreso abre un nuevo frente entre los polic¨ªas y el Gobierno
Organizaciones de agentes, enfrentados ya a PSOE y Unidas Podemos por la reforma de la ¡®ley mordaza¡¯, cargan contra ambos partidos por oponerse a una propuesta del PP para volver a subirles el sueldo
El enfrentamiento abierto entre los sindicatos y asociaciones de la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil con el Gobierno, lejos de amainar, subi¨® este mi¨¦rcoles un nuevo pelda?o. El motivo: la decisi¨®n de los dos partidos del Ejecutivo de coalici¨®n, PSOE y Unidas Podemos, de votar en el Congreso en contra de una proposici¨®n de ley del PP que planteaba una modificaci¨®n legal para facilitar nuevas subidas salariales para los agentes de ambos cuerpos con el argu...
El enfrentamiento abierto entre los sindicatos y asociaciones de la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil con el Gobierno, lejos de amainar, subi¨® este mi¨¦rcoles un nuevo pelda?o. El motivo: la decisi¨®n de los dos partidos del Ejecutivo de coalici¨®n, PSOE y Unidas Podemos, de votar en el Congreso en contra de una proposici¨®n de ley del PP que planteaba una modificaci¨®n legal para facilitar nuevas subidas salariales para los agentes de ambos cuerpos con el argumento de que la equiparaci¨®n salarial con las polic¨ªas auton¨®micas a¨²n no se hab¨ªa producido. Las cuatro organizaciones mayoritarias de agentes mostraron, tras conocerse el resultado de la votaci¨®n, su malestar con los partidos del ejecutivo.
El debate parlamentario por la equiparaci¨®n salarial de este mi¨¦rcoles ha servido para reproducir milim¨¦tricamente la divisi¨®n pol¨ªtica surgida ante las reclamaciones policiales contra la reforma de la ley mordaza. Por un lado, los tres partidos de la derecha, que consideran a las fuerzas de seguridad y sus familias un importante caladero de votos, ha apoyado en bloque la propuesta del PP, aunque Vox y Ciudadanos consideran que se queda corta para las aspiraciones de los agentes. Enfrente, el PSOE y Unidas Podemos, que creen que la proposici¨®n no era ¡°jur¨ªdicamente viable¡± e, incluso, que no ten¨ªa encaje en la Constituci¨®n. Entre medias, acusaciones cruzadas de los grupos parlamentarios en los que han salido a relucir ETA, el caso Kitchen, el dictador Francisco Franco y, por supuesto, la ley mordaza. El resultado final de la votaci¨®n, 155 votos a favor de iniciar su tramitaci¨®n y 190 en contra.
Justicia Guardia Civil (Jucil), la asociaci¨®n profesional mayoritaria en el instituto armado, ha acusado en un comunicado de ¡°irracionalidad¡± y ¡°ceguera¡± a los diputados que votaron en contra. Aar¨®n Rivero, secretario general de Justicia Policial (Jupol), mayoritaria en la Polic¨ªa Nacional, tambi¨¦n critic¨® la posici¨®n de la mayor¨ªa de la C¨¢mara: ¡°Se ha vuelto a perder una oportunidad para acabar con una situaci¨®n injusta desde hace m¨¢s de 30 a?os¡±. Por su parte, el Sindicato Unificado de Polic¨ªa (SUP) y la Asociaci¨®n Unificada de la Guardia Civil (AUGC), que han tildado de ¡°indignante¡± el resultado de la votaci¨®n, han acusado al Gobierno en un comunicado conjunto de dar la espalda a los agentes y de utilizar ¡°la pol¨ªtica de seguridad como una moneda de cambio en pol¨ªtica¡± para conseguir el apoyo de las fuerzas nacionalistas.
El origen del nuevo frente viene de lejos, de las discrepancias entre las organizaciones policiales y el Ministerio del Interior sobre el cumplimiento del acuerdo firmado en marzo de 2018 por el entonces ministro Juan Ignacio Zoido, del PP, para la equiparaci¨®n salarial de los polic¨ªas y guardias civiles con las polic¨ªas auton¨®micas. Este, cifrado en 807 millones de euros, ha supuesto que los polic¨ªas pasen a ganar en tres a?os 561 euros brutos m¨¢s al mes, y los guardias civiles, 720.
Desde un primer momento, este acuerdo fue rechazado por Justicia Salarial Policial (Jusapol, la plataforma que en 2018 sac¨® a la calle a miles de agentes precisamente para reclamar la equiparaci¨®n salarial y que es el origen de Jupol y Jucil), que exigi¨® lo que llam¨® la ¡°equiparaci¨®n salarial real¡±, que obligar¨ªa a un desembolso de casi el doble de dinero e incluye un mecanismo de actualizaci¨®n autom¨¢tica ligada a futuras subidas de los cuerpos auton¨®micas. Los otros sindicatos se han ido uniendo posteriormente a esta reivindicaci¨®n con el argumento de que Interior no ha cumplido el acuerdo en su literalidad.
Jusapol, Jupol y Jucil llegaron a recoger medio mill¨®n de firmas y a plantear en el Congreso una Iniciativa Legislativa Popular, cuya tramitaci¨®n finalmente fue rechazado por PSOE y Unidas Podemos, que impusieron su mayor¨ªa en Mesa del Congreso para bloquearla. Aquello ya provoc¨® movilizaciones policiales. El 3 de marzo de 2020, justo antes del primer estado de alarma por la covid, estas tres organizaciones congregaron a miles de agentes ante la C¨¢mara baja. Muchos asistentes cubrieron sus rostros con caretas de Anonymous y rompieron el cord¨®n policial para plantarse ante la Puerta de los Leones. En aquella protesta se llegaron a repartir pasquines an¨®nimos en los que se incitaba a los agentes a participar, una semana m¨¢s tarde, en una huelga encubierta con bajas m¨¦dicas ¡ªpolic¨ªas y guardias civiles no tienen reconocido este derecho¡ª, que finalmente fue fallida.
La diferencia ahora es que a estas tres organizaciones se han sumado otros sindicatos y asociaciones, adem¨¢s de unirse el malestar que ya exist¨ªa con el Gobierno desde finales de noviembre, cuando se conocieron las enmiendas que PSOE y Unidas Podemos planteaban para la ley mordaza. Entonces, los sindicatos y asociaciones salieron en tromba a criticar la iniciativa al considerar que, de aprobarse, supondr¨ªa un perjuicio para el trabajo diario de los agentes. Por ello, anunciaron movilizaciones que se plasmaron, primero, en concentraciones y, d¨ªas despu¨¦s, en una manifestaci¨®n, el pasado 27 de noviembre, que congreg¨® a 20.000 personas en las calles de Madrid. En ambas protestas, los agentes estuvieron arropados por PP, Vox y Ciudadanos, cuyos tres l¨ªderes (Pablo Casado, Santiago Abascal e In¨¦s Arrimadas, respectivamente) acudieron a las protestas.