El comisionista Luis Medina: ¡°Lo que hablamos fue: ¡®Un tercio para m¨ª, un tercio para Alberto y un tercio para la empresa malasia¡±

Luis Medina se present¨® ante el fiscal anticorrupci¨®n como un probo empresario que cobra con naturalidad comisiones, aunque sea en el peor momento de la pandemia, y que se ha sentido enga?ado por su socio Alberto Luce?o porque este se ha llevado m¨¢s dinero que ¨¦l como corretaje por la venta de material sanitario al Ayuntamiento de Madrid. El hermano del duque de Feria declar¨® que su ¨²nico trabajo en este negocio fue el de ¡°facilitador¡± para poner en contacto...

Luis Medina se present¨® ante el fiscal anticorrupci¨®n como un probo empresario que cobra con naturalidad comisiones, aunque sea en el peor momento de la pandemia, y que se ha sentido enga?ado por su socio Alberto Luce?o porque este se ha llevado m¨¢s dinero que ¨¦l como corretaje por la venta de material sanitario al Ayuntamiento de Madrid. El hermano del duque de Feria declar¨® que su ¨²nico trabajo en este negocio fue el de ¡°facilitador¡± para poner en contacto a Luce?o, que ten¨ªa contactos en China para conseguir pertrechos m¨¦dicos, con la responsable de compras del Ayuntamiento de Madrid, Elena Collado. Un trabajo que le report¨® un mill¨®n de d¨®lares, ¡°menos del 10% [de comisi¨®n], que no es nada¡±, le explica al fiscal, quien manifiesta que en el asunto ¡°hay muchas cosas raras¡±. ¡°Lo que hablamos Luce?o y yo era que las comisiones se divid¨ªan en tercios: que era un tercio para m¨ª, un tercio para ¨¦l y un tercio para la empresa malasia¡±, asegura Luis Medina. Pero su parte fue un mill¨®n, y la de su socio, casi cinco millones.

La declaraci¨®n de Luis Medina, acompa?ado de dos abogados, se produjo el 13 de abril del a?o pasado, durante unos 40 minutos. Al principio se muestra algo nervioso, y tutea al fiscal. Su posici¨®n es clara: todo es legal, hizo un trabajo de intermediaci¨®n por el que cobr¨®, se desentendi¨® del asunto y, ahora, con el esc¨¢ndalo por las abultadas comisiones, ¨¦l tambi¨¦n se ha escandalizado por lo que se embols¨® su socio. La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n, en su querella, atribuye a los dos empresarios delitos de estafa agravada, blanqueo y falsedad.

El interrogado se define a s¨ª mismo como ¡°un facilitador, un introductor¡±, cuya ¨²nica misi¨®n fue enlazar a Luceno, con contactos en China, y con el Ayuntamiento. ¡°Mi labor es ¨²nicamente ponerles en contacto, y yo del monto total, si lo sumas, lo que me llevo es menos de un 10% de comisi¨®n¡±, le cuenta al fiscal, a quien le explica: ¡°En esa ¨¦poca las comisiones eran mayores porque eran unos meses en los que hab¨ªa mucha demanda y muy poca oferta y entonces todo se disparaba¡±.

Medina detalla que obtuvo el contacto de Elena Collado, responsable de compras del Ayuntamiento de Madrid, gracias a una profesora de su universidad, que, a su vez, ¡°conoce bien al hermano del alcalde¡± de la capital. ?l, seg¨²n insiste, le dio el contacto a Luce?o y nada m¨¢s. ¡°Yo no tengo ninguna relaci¨®n con Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida¡±, insiste. El ministerio p¨²blico vuelve a preguntar por la relaci¨®n de negocios de los socios:

Fiscal. ?Qu¨¦ relaci¨®n ten¨ªa usted...?

Luis Medina: Yo desde que acabamos con todo eso... creo que qued¨¦ un d¨ªa a comer con Alberto, a toro pasado, el pasado abril o mayo, que vino a mi casa y, a partir de ah¨ª alguna vez le preguntaba [a Luce?o] por si hab¨ªa alguna comisi¨®n m¨¢s que cobrar... y ¨¦l no me coge el tel¨¦fono ni nada. (...) Pero vamos, yo llevo un a?o que no s¨¦ nada de ¨¦l y, vamos, que tengo mil llamadas y mensajes sin contestar.

El motivo de este malestar es, cuenta el hijo de Naty Abascal, que se enter¨® de que su socio lo hab¨ªa enga?ado y hab¨ªa cobrado una comisi¨®n muy voluminosa, del 45% de lo vendido en mascarillas, seg¨²n ha admitido el propio Luce?o: ¡°Yo tengo que fiarme de lo que me diga ¨¦l y lo que hablamos un poco era que [las comisiones] se divid¨ªan en tercios, que era un tercio para m¨ª, un tercio para ¨¦l y un tercio para la empresa malasia. Y ya est¨¢. Eso era lo que yo s¨¦ a d¨ªa de hoy; es ayer por la tarde que me entero realmente de lo que este se?or se llev¨®...¡±.

El fiscal insiste una y otra vez en los documentos y en conocer la operativa del comercio internacional, del que Luis Medina se muestra dominador. Para el ministerio p¨²blico, este es un caso raro.

Fiscal. Ya ha visto usted que hay muchas cosas raras, ?no?

Luis Medina: S¨ª, s¨ª, pero desde luego lo que no es raro, si nos vamos a los hechos, es que yo lo que he cobrado de todas estas operaciones es menos de un 10%, que no es nada, vamos, comprendo yo, seg¨²n las normas de la ICC [siglas en ingl¨¦s de la C¨¢mara de Comercio Internacional], en ning¨²n caso es delictivo (...) Pero de nuevo, enti¨¦ndame, que yo no ten¨ªa nada que ver, que yo les puse en contacto, ellos se lo guisaron y ellos se lo comieron, y ya¡±.

El fiscal se interesa por lo que hizo Luis Medina con el dinero, e incluso le hace una sugerencia de que, seg¨²n d¨®nde lo haya llevado, puede haber un hipot¨¦tico alzamiento de bienes para evitar el embargo. Es el momento en que sus abogados se agitan, e insisten al un¨ªsono con su cliente en que de eso nada, que la colaboraci¨®n va a ser m¨¢xima. Y del yate que tiene en Gibraltar, valorado en 325.000 euros, Medina se ofrece a entregar todos los papeles. Medina le deja claro al fiscal que ve normal gastarse el dinero de esa comisi¨®n como ¨¦l desee. En sus cuentas solo hab¨ªa 247 euros cuando el juez ha intentado embargarle.

Fiscal: ?Qu¨¦ hizo usted con el mill¨®n de d¨®lares que recibi¨® de la comisi¨®n?

Luis Medina: Bueno, mis gastos, mis cosas.