El Ayuntamiento de Madrid comunic¨® a la Fiscal¨ªa otra presunta estafa millonaria con la venta de mascarillas
La Polic¨ªa Municipal indag¨® sobre el pago de 1,25 millones a una consultora de Nueva York a cambio de 500.000 tapabocas que no se ¡°ajustaban a la normativa¡±
La compra de material sanitario fue un caos en la peor fase de la pandemia y, como demuestran las investigaciones abiertas, dio pie a que presuntos estafadores hicieran el agosto. Un juzgado acorrala actualmente a Luis Medina y Alberto Luce?o por cobrar comisiones millonarias e ¡°inflar¡± presuntamente los precios en la venta de material sanitario al Ayuntamiento de Madrid. Pero no es el ¨²nico caso que sufri¨® el Consistorio. Seg¨²n la documentaci¨®n que la Administraci¨®n ha enviado a la Fiscal¨ªa, la propia Polic¨ªa Municipal ha indagado sobre otro fraude en la adquisici¨®n de 500.000 mascarillas FPP2 a trav¨¦s de una supuesta consultora llamada Sinclair and Wilde, a la que se pag¨® al menos 1,25 millones de euros mediante transferencia bancaria.
El intendente jefe de la Unidad de Coordinaci¨®n Judicial firm¨® un informe el 5 de marzo de 2021, donde explicaba el caso. Seg¨²n el escrito, el 23 de marzo de 2020, a los pocos d¨ªas de decretarse el confinamiento, el Ayuntamiento ¡°acept¨® la compra [precio y condiciones] de un total de 500.000 mascarillas FFP2 marca EKO a trav¨¦s de la consultora Sinclair and Wilde, residenciada en Nueva York¡±. ¡°El objetivo [era] dotar de estos equipos a todos los servicios de emergencias y protecci¨®n civil [del Consistorio]¡±, explica el documento policial, al que tuvo acceso EL PA?S. De esta forma, esa misma jornada, mediante una transferencia bancaria a trav¨¦s de Bankinter, se efectu¨® el pago de la mitad del importe acordado por el total de la mercanc¨ªa: 1,25 millones de los 2,5 millones de euros que se hab¨ªan pactado.
Pero los problemas surgieron pronto. El 7 de abril, seg¨²n incide el informe, los servicios jur¨ªdicos detectaron ¡°irregularidades¡±, por lo que ¡°se dio orden de reintegro de la cantidad abonada al proveedor¡±. ¡°El motivo de dicha solicitud es el incumplimiento del contrato por parte del beneficiario de dicha transferencia¡±, escribi¨® el Ayuntamiento en el email enviado a Bankinter. Adem¨¢s, el Consistorio ¡°inst¨® nuevamente a la consultora Sinclair and Wilde a trav¨¦s de correos electr¨®nicos para que se remitieran los correspondientes certificados de conformidad de las mascarillas FPP2¡±. Pero no se logr¨® ninguna respuesta de la consultora: ¡°Ni en sentido positivo ni negativo¡±.
La comprobaci¨®n del material llegado tambi¨¦n increment¨® las sospechas. As¨ª, el 4 de mayo, el director de Operaciones del Plan de Emergencia Municipal del Ayuntamiento denunci¨® por escrito que, tras analizar las mascarillas, ¡°existen indicios suficientes para presuponer que no se ajustan a los requisitos t¨¦cnicos, ni a la normativa espa?ola ni europea¡±. Adem¨¢s, se intent¨® contactar durante meses sin ¨¦xito con Philippe Haim Solomon, la ¡°persona que tuvo relaci¨®n contractual¡± con el Consistorio para esta operaci¨®n, seg¨²n la Polic¨ªa Municipal, que tambi¨¦n incorpor¨® a sus indagaciones informes t¨¦cnicos donde se se?ala la ¡°no idoneidad del producto¡± comprado.
¡°La documentaci¨®n facilitada no se corresponde con las certificaciones preceptivas que exige ni la UE ni el Estado espa?ol, incluyendo documentos que se indican para otros productos que pueden ser productos cosm¨¦ticos¡±, escribe el intendente jefe, que enumera posibles delitos de fraude, contra los consumidores y contra la propiedad industrial ¡ª¡°debido a que se ha utilizado indebidamente el marcado CE para declarar conforme a las prescripciones establecidas por la UE¡±, se?ala¡ª. El polic¨ªa atribuye la responsabilidad a Solomon, que nunca fue localizado, seg¨²n la informaci¨®n enviada a Anticorrupci¨®n.
Intervenci¨®n de la Polic¨ªa de Nueva York
Los intentos por localizar a Solomon resultaron en vano. Seg¨²n la documentaci¨®n incorporada al sumario del caso de Medina y Luce?o, el Ayuntamiento de Madrid trat¨® de contactar durante meses con el supuesto representante de Sinclair and Wilde. El 4 de agosto de 2020, por ejemplo, se le env¨ªa un email: ¡°Estimado Philippe. Llevamos varios d¨ªas esperando, tal y como estaba comprometido, el certificado de conformidad de las mascarillas FPP2. Al efecto te he enviado varios mensajes que no has contestado. Es por ello que, de no recibir la documentaci¨®n adecuada a la mayor urgencia posible, debemos acordar la devoluci¨®n del producto y del dinero¡±, escribe Elena Collado, alto cargo del ¨¢rea de Hacienda y Personal del Consistorio, que tambi¨¦n interactu¨® con los comisionistas Medina y Luce?o.
Ante la falta de respuesta, la Polic¨ªa Municipal pidi¨® ayuda en octubre de 2020 a la Polic¨ªa Metropolitana de Nueva York, que acudi¨® en noviembre a la direcci¨®n donde se encontraban las supuestas instalaciones de la consultora. Pero all¨ª, seg¨²n la informaci¨®n enviada por los agentes de EE UU, no hallan ninguna oficina de Sinclair and Wilde. Tampoco a Solomon. En su lugar, se topan con un tal Henry M. F., que asegura que ocupa dichas oficinas y que, ¡°como un favor a un cliente¡±, permiti¨® que Sinclair usara la direcci¨®n postal de su empresa.
Henry M. F., a su vez, a?adi¨® que hab¨ªa contactado en alguna ocasi¨®n con Solomon, pero solo por ¡°videollamada o email¡±. Nunca lo conoci¨® en persona, repiti¨®, antes de remachar que cre¨ªa ¡°que vive en alg¨²n lugar de Europa¡±. ¡°Tambi¨¦n inform¨® [de] que recientemente ha estado recibiendo varias cartas dirigidas a Sinclair de diferentes jurisdicciones judiciales, la m¨¢s reciente del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos / Distrito Sur Florida¡±, escriben los efectivos de la Polic¨ªa de Nueva York. El informe de la Polic¨ªa de Madrid a?ade que, tras pedir m¨¢s ayuda para encontrar al sospechoso, a fecha de enero de 2021, no ¡°es localizado en los EE UU y el mismo puede estar domiciliado en Inglaterra en estos momentos, sin que se haya confirmado esta residencia de manera oficial¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.