ERC exige que rueden cabezas por el espionaje para no romper la mayor¨ªa
Aragon¨¨s env¨ªa un mensaje claro en Madrid: no basta con reuniones, pide culpables
Lejos de sofocarse, el incendio pol¨ªtico por el esc¨¢ndalo del espionaje a dirigentes independentistas catalanes se extiende y agrava por momentos. ERC, insatisfecha con las explicaciones que ha recibido hasta ahora en p¨²blico y sobre todo en privado por parte del Gobierno, ya amenaza abiertamente con romper la mayor¨ªa de la investidura. Los 13 esca?os de ERC son claves para la mayor¨ªa de las leyes. Los republicanos han trasladado ya un mensaje claro al Ejecutivo, en p¨²blico y sobre todo en privado: si quieren recuperar la confianza, necesitan que alguien asuma responsabilidades: esto es, que ruede alguna cabeza pol¨ªtica. Fuentes de ERC se?alan que Pere Aragon¨¨s, el president, que tambi¨¦n est¨¢ entre los espiados, no le est¨¢ exigiendo a Pedro S¨¢nchez la ca¨ªda de un cargo concreto ¡ªun ministro o la m¨¢xima responsable del CNI¡ª, pero s¨ª le ha dicho claro que este asunto no se resolver¨¢ solo con buenas palabras y alguien tiene que caer.
Aragon¨¨s se pas¨® ayer todo el d¨ªa en Madrid para conceder varias entrevistas, reunirse con los grupos pol¨ªticos que exigen una comisi¨®n de investigaci¨®n sobre este esc¨¢ndalo ¡ªincluido Unidas Podemos, miembro de la coalicion de Gobierno¡ª y trasladar un mensaje claro: ¡°Esto no se soluciona con una reuni¨®n [entre ¨¦l y S¨¢nchez]. Alguien debe asumir responsabilidades, y es el Gobierno el que debe decidir el nivel. La confianza en estos momentos es cero. A partir de las decisiones que tome o no tome el Gobierno, decidiremos qu¨¦ pasar¨¢ con el resto de la legislatura¡±, se?al¨® en una comparecencia a las puertas del Congreso. Aragon¨¨s admiti¨® en una entrevista en la Cadena SER que S¨¢nchez y ¨¦l se han intercambiado mensajes en los que el presidente le ha trasladado su apoyo, pero insiste en que a¨²n no tiene ni una explicaci¨®n formal de lo que ha pasado ni una soluci¨®n pol¨ªtica.
Desde el Ejecutivo insisten en que el contacto con la Generalitat es permanente, no solo entre presidentes sino entre los equipos ¡ªsobre todo ?scar L¨®pez, el jefe de Gabinete de S¨¢nchez, y Sergi Sabri¨¢, que lidera el de Aragon¨¨s¡ª para buscar una soluci¨®n. La voluntad del Ejecutivo, a?aden fuentes del Gobierno, es la de dar todos los pasos necesarios para recuperar la confianza. Incluida la posibilidad de que los l¨ªderes se re¨²nan y se reactive cuanto antes la mesa de di¨¢logo. Pero el problema con el espionaje es que el Gobierno no admite en ning¨²n momento que se haya producido y, por tanto, mucho menos puede ofrecer la cabeza de alg¨²n responsable. La ministra de Defensa, Margarita Robles, de quien depende el CNI, argumenta que no puede comentar nada sobre sus actividades, lo que abre paso a todas las especulaciones. Pero s¨ª asegura que todo lo que hace este centro es ¡°con todas las garant¨ªas que establece la ley¡±: esto es, que si hubiera intervenciones ser¨ªa con autorizaci¨®n judicial, como fija la norma. Mientras, desde Unidas Podemos, Pablo Echenique pide que ¡°rueden cabezas¡± si se ha hecho algo sin instrucciones del Ejecutivo o que ¡°se pida perd¨®n¡± si se ha realizado un espionaje autorizado por un juez.
La situaci¨®n es diab¨®lica, porque el Gobierno insiste en que no tiene nada que ocultar y no tiene ninguna responsabilidad en el espionaje, pero a la vez no puede dar ninguna explicaci¨®n ni confirmar o desmentir nada de las actividades del CNI porque asegura que la ley se lo impide. El asunto seguir¨¢ creciendo y no solo por ERC, sino porque varios grupos, incluido otro aliado clave, el PNV, van a seguir presionando. De hecho, su portavoz, Aitor Esteban, preguntar¨¢ el mi¨¦rcoles a Robles sobre este asunto.
Apoyo del PP
El PSOE se est¨¢ quedando bastante solo en este asunto, aunque con toda probabilidad podr¨¢ contar con el apoyo del PP para rechazar una comisi¨®n de investigaci¨®n sobre actividades del CNI. Aragon¨¦s se reuni¨® ayer en el Congreso con los principales socios gubernamentales y parlamentarios del Ejecutivo y negoci¨® con ellos una estrategia ¡°de frente com¨²n¡± para forzar una reacci¨®n del sector socialista del Ejecutivo. Ni el PDeCAT, ni Junts, ni siquiera la CUP, relacionaron su enorme malestar y rechazo al espionaje con el desmarque en pr¨®ximas votaciones de la m¨¢xima relevancia, como la que debe convalidar el jueves de la semana que viene el decreto del Ejecutivo con las medidas para combatir la crisis provocada por la guerra en Ucrania. Esa negociaci¨®n se lleva en paralelo, y por ahora se desliga del caso Pegasus.
El PSOE no apoya en estos momentos la creaci¨®n de una comisi¨®n de investigaci¨®n. La ministra de Defensa, Margarita Robles, confi¨® ayer en que se constituya la Comisi¨®n de Control de los cr¨¦ditos destinados a gastos reservados para que se pueda hablar ¡°sin ninguna reserva¡±. Robles ha pedido comparecer en la Comisi¨®n de Defensa para hablar sobre la pol¨ªtica de la UE, pero all¨ª no puede dar explicaciones sobre este asunto, aunque sea preguntada por los grupos parlamentarios.
Algunos grupos se plantean aprovechar este pr¨®ximo lunes la comparecencia ya programada del jefe de gabinete del presidente, ?scar L¨®pez, en otra comisi¨®n del Congreso para preguntarle sobre este caso. Varios partidos nacionalistas argumentan que no es cre¨ªble que Espa?a haya comprado el programa Pegasus y se haya podido utilizar, incluso por parte del CNI y con autorizaci¨®n legal de un juez del Tribunal Supremo, y que el jefe del Ejecutivo no supiese nada ni hubiese tenido acceso a esos informes.
Mientras, dentro del independentismo, que parec¨ªa unirse moment¨¢neamente por este caso, se recrudece la divisi¨®n. Incluso dentro de Junts per Catalunya. El PSC y el grupo de Carles Puigdemont comparten el Gobierno de la Diputaci¨®n de Barcelona, un ente clave en el reparto de subvenciones a los municipios y cargos para los partidos. Laura Borr¨¤s, la presidenta del Parlament, de Junts, insisti¨® ayer en que no se puede pactar y gobernar ¡°con los partidos que utilizan las cloacas del Estado¡±. La idea de romper ese pacto tambi¨¦n fue expresada por otros dos independientes de ese partido: el diputado catal¨¢n Jaume Alonso Cuevillas y el representante en el Parlamento Europeo Toni Com¨ªn, informa Camilo S. Baquero.
Pero el alma m¨¢s neoconvergente del partido no ve tan clara esa ruptura. Dejar¨ªa a Junts fuera del Ejecutivo de la Diputaci¨®n y a la vez obligar¨ªa a replantear multitud de pactos municipales y en consejos comarcales, en los que se ha preferido pactar con el PSC para marginar a ERC. El vicepresident Jordi Puigner¨®, tambi¨¦n de Junts, apost¨® por ¡°diferenciar¡± los pactos municipales de la pol¨ªtica nacional.
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