S¨¢nchez propone un cambio de la ley del CNI para mejorar los controles judiciales e internos
El presidente ofrecer¨¢ agilizar la nueva legislaci¨®n de secretos y algunas desclasificaciones de espionajes con autorizaci¨®n judicial, y pasar¨¢ a la ofensiva contra el PP por los audios de Villarejo y Kitchen. ¡°El Gobierno ni conoce ni decide sobre las decisiones operativas de los servicios de inteligencia¡±, ha dicho en el pleno monogr¨¢fico sobre Pegasus
El pleno monogr¨¢fico del caso Pegasus de este jueves en el Congreso contendr¨¢ novedades importantes. El presidente Pedro S¨¢nchez ha decidido pasar a la ofensiva en un asunto muy sensible, que ha puesto en riesgo incluso la mayor¨ªa de la legislatura. Tambi¨¦n anunciar¨¢ cambios relevantes para demostrar que est¨¢ dispuesto a mejorar el funcionamiento del Centro Nacional de Inteligencia despu¨¦s de los esc¨¢ndalos del espionaje a l¨ªderes independentistas y a la c¨²pula del propio Ejecutivo. S¨¢nchez llevar¨¢ a la sesi¨®n como anuncio estrella un cambio profundo en la ley del CNI, de 2002, para aumentar los controles judiciales e internos en los servicios de inteligencia espa?oles y garantizar que se disipan todas las sospechas sobre ellos en l¨ªnea con lo que le ha reclamado el PNV, su aliado m¨¢s estable. Tambi¨¦n precisar¨¢ que se agilizar¨¢ la nueva ley de secretos oficiales en el pr¨®ximo periodo de sesiones y que se desclasificar¨¢n las autorizaciones de espionajes que pida la Audiencia Nacional.
El PNV registr¨® el pasado 17 de mayo una proposici¨®n de ley para modificar la norma que regula el CNI y en la que planteaba aumentar los controles para pasar, por ejemplo, de que sea uno a tres los jueces del Tribunal Supremo que autoricen cualquier espionaje y tambi¨¦n para limitar el sistema con el que se puede investigar a un sospechoso, sobre todo por las enormes cr¨ªticas que ha provocado Pegasus. Este programa inform¨¢tico, de una empresa israel¨ª y que se vende a Estados, es un sistema muy invasivo que est¨¢ en discusi¨®n en toda Europa: varios pa¨ªses est¨¢n pensando en prohibirlo y se ha formado una comisi¨®n de investigaci¨®n en el Europarlamento. S¨¢nchez ofrecer¨¢ as¨ª a sus socios y aliados pol¨ªticos en el pleno los detalles de ese aumento de controles, pero fuentes del Ejecutivo confirman el cambio de la ley del CNI, la decisi¨®n pol¨ªtica m¨¢s relevante despu¨¦s de la destituci¨®n de su anterior directora, Paz Esteban.
El Gobierno lleva semanas estudiando posibles soluciones, y diversas fuentes se?alan en privado que esta crisis ha demostrado que el funcionamiento del CNI es mejorable. Seg¨²n asegura La Moncloa, el presidente ni siquiera sab¨ªa que estaba siendo espiado en 2019 el entonces vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragon¨¨s, actual presidente catal¨¢n y uno de los m¨¢ximos dirigentes de ERC, socio fundamental de la legislatura. S¨¢nchez, en l¨ªnea con el debate que se est¨¢ produciendo en otros pa¨ªses europeos, donde Pegasus est¨¢ siendo muy criticado, ofrecer¨¢ garant¨ªas de que su Gobierno mejorar¨¢ los controles de los servicios de inteligencia para evitar las suspicacias y fuertes cr¨ªticas que ha generado el espionaje a un grupo de 65 dirigentes independentistas.
El anuncio del cambio legal ser¨¢ la parte pensada por La Moncloa para satisfacer no solo a los aliados de la mayor¨ªa, con los que quiere recuperar la confianza para fortalecer el bloque progresista de la legislatura y permitir llegar sin problemas al final de este mandato, sino tambi¨¦n a otros partidos que ven con recelo la posibilidad de que el CNI haya actuado de forma aut¨®noma sin los suficientes controles en un asunto tan delicado como el espionaje a pol¨ªticos. El jefe del Gobierno har¨¢ otro gui?o al PNV al detallar, como ya avanz¨® hace una semana el ministro de la Presidencia, F¨¦lix Bola?os, en la comisi¨®n donde enumer¨® el plan normativo para 2022, que la ley de secretos oficiales que data de 1968, en pleno Franquismo, tambi¨¦n se reformar¨¢ en el pr¨®ximo periodo de sesiones, que comienza en septiembre y acaba en diciembre. Los nacionalistas vascos llevan desde 2019 requiriendo la modificaci¨®n y actualizaci¨®n de esa norma y que se recorten los plazos para desclasificar secretos a 25 a?os, y a 10 para los asuntos considerados reservados.
El jefe del Ejecutivo tambi¨¦n precisar¨¢ en su comparecencia la intenci¨®n del Gobierno de permitir algunas desclasificaciones de documentos oficiales secretos, como est¨¢n demandando ahora los socios por los espionajes a independentistas por el caso Pegasus, pero solo si lo reclama la Audiencia Nacional. Es lo que sucedi¨® en diciembre de 2018 cuando el Ejecutivo orden¨® desclasificar documentos secretos de la llamada Operaci¨®n Kitchen dise?ada desde el Ministerio del Interior en 2013, cuando gobernaba el Ejecutivo del PP de Mariano Rajoy, para acorralar y conseguir informaci¨®n del extesorero popular Luis B¨¢rcenas.
S¨¢nchez y su equipo est¨¢n preparando, adem¨¢s, una ofensiva en el discurso contra el PP y los partidos de derechas, que le criticar¨¢n por motivos opuestos a los de la mayor¨ªa de la investidura y por haber destituido a la directora del CNI por lo que entiende que ha sido una cesi¨®n m¨¢s a los separatistas para continuar en La Moncloa.
El presidente tiene preparado un discurso centrado en los audios del pol¨¦mico comisario Jos¨¦ Manuel Villarejo, que ha publicado EL PA?S en los ¨²ltimos d¨ªas, y que muestran c¨®mo la entonces secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, trataba de impedir que se conocieran los Papeles de B¨¢rcenas y otros movimientos, o el caso Kitchen, donde ha quedado demostrado que se utiliz¨® a la polic¨ªa cuando el PP estaba en el poder para intentar entorpecer la investigaci¨®n del caso G¨¹rtel y espiar a Luis B¨¢rcenas. S¨¢nchez intentar¨¢ mostrar as¨ª que su Gobierno est¨¢ dispuesto a ser m¨¢s transparente y dar m¨¢s garant¨ªas para profundizar en la regeneraci¨®n democr¨¢tica que prometi¨® cuando gan¨® la moci¨®n de censura, hace ahora cuatro a?os, frente a un PP que hizo todo lo contrario mientras estaba en el Gobierno.
El Ejecutivo pretende as¨ª con esos cambios legales ¡°reforzar las garant¨ªas judiciales¡± de los espionajes que efect¨²e el CNI para recuperar los da?os de ¡°confianza¡± y credibilidad que le ha causado el esc¨¢ndalo del espionaje a independentistas registrado por Citizen Lab, un laboratorio de la Universidad de Toronto especializado en este tipo de investigaciones.
Tres grupos pol¨ªticos, Junts per Catalunya, del Plural; ERC y EH Bildu ¡ªlos dos ¨²ltimos suelen votar con el Gobierno de coalici¨®n del PSOE y Unidas Podemos¡ª demandaron la comparecencia del presidente para que diera cuenta de lo que conoce sobre el caso Pegasus y, sobre todo, para que explique en la C¨¢mara las medidas que piensa adoptar para que no se repitan en el futuro espionajes de este tipo de programas inform¨¢ticos en ¡°representantes pol¨ªticos, activistas, abogados, periodistas, instituciones y sus familiares y allegados¡±. El esc¨¢ndalo ha provocado una ruptura en las complejas relaciones entre el Ejecutivo y estos socios de legislatura, que est¨¢ lejos de amainar como se comprob¨® el mi¨¦rcoles de nuevo en la sesi¨®n de control del Congreso.
La portavoz de Junts, M¨ªriam Nogueras, volvi¨® a reprochar al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que no se enteraran de lo que estaba pasando en el CNI y que hubieran usado Pegasus, distintos cuerpos policiales, para espiar a rivales pol¨ªticos. Marlaska neg¨® esos extremos, confirm¨® que las fuerzas de seguridad tienen instrumentos y m¨¦todos para espiar, pero siempre ¡°con garant¨ªas y autorizaciones judiciales¡± y para combatir el terrorismo, el crimen organizado y la trata de mujeres. Y enfatiz¨®: ¡°No se persiguen ideas, se persiguen delitos¡±.
Esos argumentos no han convencido hasta ahora ni a Junts ni tampoco a ERC, la CUP, EH Bildu y ni siquiera al PNV. La formaci¨®n nacionalista vasca present¨® en plena pol¨¦mica por el caso Pegasus una propuesta para cambiar el CNI y vincular el nombramiento de su director con el presidente del Gobierno y evidenciar as¨ª qui¨¦n es el responsable pol¨ªtico del centro, aunque formalmente ese organismo dependa del Ministerio de Defensa. El PNV planteaba que las autorizaciones judiciales de los espionajes que ahora firma un juez del Supremo pasasen a firmarse por un ¨®rgano colegiado de tres jueces y se detallasen en las autorizaciones los medios e instrumentos t¨¦cnicos que se pensaban usar para llevar a cabo esos cometidos.
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