ADIF descarga las responsabilidades de seguridad en Renfe y sus maquinistas: ¡°El fallo humano super¨® lo previsible¡±

Seg¨²n la premisa que blande ADIF (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), si el maquinista hubiera frenado cuatro segundos antes, el tren hubiera pasado la curva de A Grandeira trepidante pero airosamente, ¡°a 160 kil¨®metros por hora o menos¡±. Ese es el doble de la velocidad estipulada para ese punto cr¨ªtico de la v¨ªa a la entrada de Santiago, 80 kil¨®metros por hora, que ser¨ªa una marcha ¡°de confort¡± en la que, seg¨²n el excargo de la empresa p¨²blica acusado en el juicio, Andr¨¦s Cortabitarte, ¡°no se derrama una taza de caf¨¦¡±. Cuando cort¨® la llamada del interventor al darse cuenta del punto fatal al que llegaba, el maquinista tambi¨¦n imputado, Francisco Garz¨®n, solo logr¨® reducir la marcha hasta los 179 kil¨®metros por hora. El tren descarril¨® y se desencaden¨® la tragedia. Poco antes y poco despu¨¦s del accidente del Alvia-730, seg¨²n la documentaci¨®n judicial que ha exhibido este jueves la defensa del maquinista, hubo en Espa?a varios descarrilamientos por exceso de velocidad al tomar curvas. La mayor¨ªa fueron en la l¨ªnea del FEVE, a menos del doble de la velocidad indicada para el tramo, pero no se tomaron medidas. La cuesti¨®n del riesgo por exceso de velocidad era algo que estaba ¡°arrumbado¡± en este pa¨ªs por la falta de accidentes, ha reconocido esta ma?ana, durante una declaraci¨®n de cinco horas, un directivo de ADIF bajo cuya ¨®rbita se hallaba el departamento que capitaneaba Cortabitarte, director de Seguridad en la Circulaci¨®n cuando se puso en marcha la catastr¨®fica l¨ªnea 082.

Este alto cargo, Alfonso Ochoa, propuesto como testigo por la Abogac¨ªa del Estado, ha salido en defensa de su excompa?ero en ADIF, ha dicho que ninguna de las inspecciones realizada por la compa?¨ªa en viaje por la l¨ªnea Ourense-Santiago notific¨® nada sobre la curva, y ha afirmado que a la administradora ferroviaria no lleg¨® la alerta del jefe de maquinistas de Galicia sobre aquel escenario: ¡°Propuestas como la de Mazaira se diluyen y se pierden¡±. Su declaraci¨®n ha destacado por descargar las mayores responsabilidades de seguridad en Renfe y los propios conductores, porque el factor humano es la clave cuando no existen sistemas de protecci¨®n avanzados como el ERTMS. Sin embargo, ha admitido que antes del desastre en el barrio compostelano de Angrois ¡°nadie detect¨®¡± el peligro. La Transici¨®n Significativa de Velocidad, un concepto que naci¨® con el siniestro de Santiago y oblig¨® a se?alizar y balizar tramos en toda Espa?a, ¡°no se ten¨ªa en cuenta¡±, ¡°no era motivo de preocupaci¨®n¡±, ¡°no se mitigaba¡±. ¡°Lo que siento es que esto haya ocurrido porque hubi¨¦ramos estado todos tan poco h¨¢biles¡±, ha lamentado Ochoa de Olza Gal¨¦, entonces director general de Operaciones e Ingenier¨ªa de ADIF, hoy en el puesto de director de Seguimiento T¨¦cnico. En este macrojuicio no hay ning¨²n responsable de Renfe en el banquillo, pero contra la operadora y su seguro tambi¨¦n se dirige la acci¨®n civil dentro del proceso penal.

Que en el juicio por el accidente mortal del Alvia se iba a escenificar la pugna entre ADIF y Renfe era algo que se adivinaba desde la instrucci¨®n, y desde el momento en que la Abogac¨ªa del Estado asumi¨® la defensa de la primera de las dos empresas p¨²blicas, cuyo director de seguridad en la circulaci¨®n cuando se puso en marcha la v¨ªa (representado por otro letrado), est¨¢ acusado de 80 delitos de homicidio y 145 de lesiones por imprudencia grave profesional. Est¨¢n en juego, para las empresas y sus respectivas aseguradoras, 57.686.635,93 euros, la cantidad total que se reclama por da?os y perjuicios en materia de responsabilidad civil. Tambi¨¦n la reputaci¨®n y la imagen p¨²blica.

¡°Que cada palo aguante su vela¡±, ha llegado a expresar Ochoa, cuando le apretaban los letrados con las preguntas sobre las responsabilidades de seguridad de ADIF. Para ¨¦l, cuando la empresa p¨²blica Ineco realiz¨® el an¨¢lisis independiente de seguridad y export¨® el riesgo de la curva de Angrois, ¡°la pelota¡± de las variables del factor humano estaba ¡°sobre el tejado¡± de Renfe y era de su ¡°exclusiva competencia¡±. Y entre las medidas ¡°mitigadoras¡± que, seg¨²n ¨¦l, pod¨ªa haber tenido en cuenta la empresa que explota los trenes estaba la de la formaci¨®n, o la de poner, como se hace en otros lugares ¡°de Europa¡±, ¡°un segundo agente [conductor, asistente]¡± en la cabina. El fiscal, Mario Pi?eiro, le ha recordado al testigo (que neg¨® sentirse condicionado para declarar por su empresa) que la exportaci¨®n de riesgos de la obra se hac¨ªa a ADIF y no a Renfe.

¡°Ahora de nada vale llorar sobre la leche derramada y echarse la culpa el uno al otro¡±, ha planteado en un momento Ochoa de Olza. ¡°Realmente es lo que est¨¢n haciendo, echarse la culpa el uno al otro¡±, le ha afeado la magistrada, Elena Fern¨¢ndez Curr¨¢s. En esta octava jornada, la jueza ha intervenido varias veces, para pedir que no se repitiesen preguntas en un interrogatorio que parec¨ªa interminable, y para rogar claridad en el ¡°farragoso¡± debate ferroviaro. Sobre todo al jefe de la Abogac¨ªa del Estado en Galicia, Javier Su¨¢rez, interesado en conceptos f¨ªsicos sobre aceleraciones y curvas, le ha pedido ¡°enderezar¡± la ¡°deriva hipert¨¦cnica de las preguntas¡±: ¡°Puede ser contraproducente para el resultado del juicio¡±, le ha avisado.

Riesgo ¡°despreciable¡±

Para este ingeniero de Caminos (con 34 a?os de experiencia en las empresas ferroviarias espa?olas) que hoy declaraba, el riesgo de la v¨ªa era ¡°despreciable¡±, y no ¡°intolerable¡±, como defendieron el pasado martes dos directivos del Cedex (Centro de Estudios y Experimentaci¨®n de Obras P¨²blicas). Adem¨¢s, ¡°no ten¨ªa nada de singular¡± que el escal¨®n de velocidad en aquel punto ¡°dependiera exclusivamente del maquinista¡±. Seg¨²n el criterio de Ochoa, ADIF hab¨ªa dispuesto en el lugar medidas mitigadoras (¡°muchas, aunque cueste creerlo¡±), a pesar de que el sistema de ayuda a la conducci¨®n en aquel tramo de llegada a la capital de Galicia era el ASFA que no frenaba los trenes y estaba conectado a se?ales semaf¨®ricas siempre en verde. En su opini¨®n, si esas ¡°barreras¡± no sirvieron de nada en este accidente fue porque ¡°el fallo humano super¨® lo previsible¡±.

El directivo de la empresa administradora ¡ªque en 2022 ha elaborado un estudio comparativo de tramos similares para presentar como informe pericial en el juzgado, en el que no se citan los descarrilamientos que ha puesto sobre la mesa el abogado del maquinista¡ª ha afirmado que ¡°nadie traslad¨® el riesgo en la curva a nadie en ADIF¡±, a pesar de que constan nueve inspecciones. Tambi¨¦n ha dicho que Cortabitarte ¡°no era consciente¡±. ¡°No creo que se le pueda relacionar con todas estas cosas¡±, ha comentado, a la vez que ha apuntado que la direcci¨®n de Seguridad en la Circulaci¨®n solo realizaba uno de los 10 informes que se enviaban a la Direcci¨®n General de Ferrocarriles para la aprobaci¨®n de la l¨ªnea. ¡°?ADIF no puede percibir ese riesgo en las pruebas?¡±, le ha preguntado el fiscal. ¡°Pues no, porque en las pruebas se afrontan las curvas a su velocidad... si el maquinista es cabal no lo vas a percibir¡±, ha respondido Ochoa.

¡°A m¨ª francamente me sorprendi¨®¡±, ha dicho el ingeniero sobre el accidente de Angrois y el despiste del maquinista, que se desorient¨® del lugar en el que estaba cuando le llam¨® por tel¨¦fono el interventor del tren (una conversaci¨®n por el m¨®vil corporativo que se alarg¨® 100 segundos). Ochoa ha explicado que la decisi¨®n de retirar del proyecto original el ERTMS en los ¨²ltimos kil¨®metros hasta la estaci¨®n de Santiago, un mecanismo que hubiera frenado el tren hasta los 80 kil¨®metros por hora, fue del Ministerio de Fomento. ?l considera la decisi¨®n adecuada y dijo que se tom¨® ¡°por funcionalidad¡±.

¡°Si Renfe cre¨ªa que deb¨ªa dotarse de balizas [el tramo] solo ten¨ªa que plantearlo. Cualquier cosa que se plantee con seriedad se estudia y seguramente se acabar¨¢ haciendo¡±, ha dicho el cargo a cuyo departamento estaba adscrita la direcci¨®n de Cortabitarte. ¡°Quien puede percibir el riesgo realmente son los maquinistas¡±, ha insistido: ¡°hay unos canales en su empresa por los que se comunican por menos de nada cuando quieren¡±, ha apuntado. Pero no puede quedarse en una charla ¡°en la cantina¡± sino trasladarse a ¡°las comisiones de seguridad¡±, ha reprochado cuando en el interrogatorio le han recordado que un responsable de circulaci¨®n de su empresa en Santiago hab¨ªa reconocido, en la cuarta sesi¨®n, que ¨¦l s¨ª hab¨ªa escuchado los comentarios de los conductores, sin dar parte a nadie en ADIF.

Tras el accidente, solo un mes despu¨¦s, se se?alizaron y se instalaron balizas en los ¡°cambios significativos de velocidad¡±, esa terminolog¨ªa que tambi¨¦n empez¨® a manejarse despu¨¦s de la cat¨¢strofe. Ochoa de Olza ha dicho que la decisi¨®n de instalar estos elementos que antes no se pon¨ªan (pero que el jefe de maquinistas hab¨ªa pedido expresamente por escrito) se tom¨® desde la CIAF (Comisi¨®n de Investigaci¨®n de Accidentes Ferroviarios) y la Direcci¨®n General de Ferrocarriles, que dio la orden el 1 de agosto de 2013, solo una semana despu¨¦s del descarrilamiento mortal en A Grandeira. Una curva que, tal y como ha sostenido en su declaraci¨®n el cargo de ADIF, ¡°no ten¨ªa nada de especial¡±.