C¨¦sar Tolosa: un juez discreto que ha pasado por todos los ¨®rdenes jurisdiccionales
El magistrado lleg¨® al Supremo en 2014 y cinco a?os despu¨¦s fue elegido para presidir su Sala de lo Contencioso-Administrativo
C¨¦sar Tolosa (Santa Mar¨ªa la Real de Nieva (Segovia), 1957), pr¨®ximo magistrado del Tribunal Constitucional por designaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), ha pasado por sus anteriores destinos ejerciendo la labor de juez con moderaci¨®n, sin estridencias. Los vocales conservadores, que le han propuesto, dijeron durante varios meses que no encontraban candidatos, pero ¨¦l estuvo ah¨ª desde el primer momento, disponible, sin hacer alharacas. Los progresistas le han aceptado sin problemas: conocen s...
C¨¦sar Tolosa (Santa Mar¨ªa la Real de Nieva (Segovia), 1957), pr¨®ximo magistrado del Tribunal Constitucional por designaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), ha pasado por sus anteriores destinos ejerciendo la labor de juez con moderaci¨®n, sin estridencias. Los vocales conservadores, que le han propuesto, dijeron durante varios meses que no encontraban candidatos, pero ¨¦l estuvo ah¨ª desde el primer momento, disponible, sin hacer alharacas. Los progresistas le han aceptado sin problemas: conocen su mentalidad conservadora pero saben tambi¨¦n que no tiene inclinaci¨®n para seguir instrucciones de nadie ni para medrar, seg¨²n explican fuentes del sector progresista del CGPJ.
El magistrado propuesto ¡ªque pertenece a la conservadora Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura (APM) desde hace m¨¢s de diez a?os¡ª ha pasado por pr¨¢cticamente todos los ¨®rdenes jurisdiccionales. Ha desempe?ado su funci¨®n en juzgados y tribunales de lo penal, lo civil, lo laboral y lo contencioso-administrativo, hasta llegar al Supremo hace ocho a?os. Un caso que tuvo resonancia y pas¨® por sus manos como juez de instrucci¨®n fue el que afect¨® al expresidente de Cantabria Juan Hormaechea. Cuando se habla de ¨¦l como magistrado conservador, alguna vez se le ha o¨ªdo decir que eso no le impidi¨® sentar en el banquillo a dicho dirigente (elegido con el apoyo del PP) y a los seis miembros de su equipo de gobierno. En octubre de 1994, el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria conden¨® a Hormaechea y a tres de sus consejeros a penas de prisi¨®n por malversaci¨®n y prevaricaci¨®n.
En 2004 C¨¦sar Tolosa fue elegido presidente del Tribunal Superior de Cantabria, cargo en el que permaneci¨® diez a?os. Alcanz¨® en 2014 el Supremo al segundo intento, elegido con 17 votos de los 21 en juego entonces en el Consejo General del Poder Judicial. Es decir, con un alto grado de consenso. Pr¨¢cticamente el mismo nivel de acuerdo que suscit¨® su elecci¨®n en 2019 como presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo, ocasi¨®n en la que cont¨® con el respaldo de 18 votos. La Sala se encontraba en una fase delicada, por los problemas derivados del anterior proceso de elecci¨®n del cargo de presidente y por las secuelas que dej¨® el debate sobre los recursos relacionados con los impuestos de las hipotecas.
En la actualidad, la Sala de lo Contencioso sigue siendo una pieza vital del Supremo con importantes asuntos pendientes y con numerosas plazas vacantes. Entre los asuntos que esperan sentencia est¨¢n los recursos contra los indultos a los condenados por el Supremo en la sentencia del proc¨¦s. Tolosa hab¨ªa decidido que este asunto fuera decidido por el pleno, dada su relevancia. Ocurri¨® despu¨¦s de que la Secci¨®n Quinta de dicha Sala cambiara de criterio sobre la legitimaci¨®n de los partidos pol¨ªticos para oponerse a la concesi¨®n de las medidas de gracia. Primero neg¨® dicha legitimaci¨®n pero al resolver un recurso, y tras un cambio parcial de magistrados, la acept¨®.
Ahora habr¨¢ que decidir sobre esta cuesti¨®n concreta por sentencia. Deber¨¢ hacerlo una Sala que cuenta con 23 miembros, en lugar de los 33 de su plantilla te¨®rica, que no ha podido completarse porque el Consejo del Poder Judicial sigue sin poder efectuar nombramientos. La presidencia de la Sala ser¨¢ ejercida ahora por el magistrado Pablo Lucas, que estuvo curiosamente entre los candidatos a acceder al Constitucional. Por ser el magistrado m¨¢s antiguo de dicha Sala, Lucas ocupar¨¢ el puesto transitoriamente, al menos hasta que el Consejo pueda recuperar su competencia legal sobre los nombramientos, que ahora tiene restringida al tener el mandato caducado.