Feij¨®o acepta la ley de plazos del aborto que el PP recurri¨® hace 12 a?os

En plena pol¨¦mica con Vox por el derecho de las mujeres al aborto, Alberto N¨²?ez Feij¨®o ha revelado que el PP que ¨¦l preside acepta ahora la ley de plazos vigente aprobada en 2010 por los socialistas, a pesar de que el PP la recurri¨® ante el Tribunal Constitucional hace casi 13 a?os. Ante la cercan¨ªa de la decisi¨®n del tribunal de garant¨ªas sobre el recurso del PP, que abordar¨¢, tras una d¨¦cada de retraso, en el pr¨®ximo pleno del 7 de febrero, Feij¨®o expres¨® este martes que su partido ci?e su discrepancia al hecho de que no se exija permiso paterno para que las menores de edad puedan abortar, que ellos consideran que s¨ª debe ser imperativo. ¡°El resto de las cuestiones no son cuestiones mollares para el PP¡±, subray¨® Feij¨®o, aceptando as¨ª la ley de plazos que los propios conservadores cuestionaron por inconstitucional.

Feij¨®o, como confirman tambi¨¦n fuentes oficiales del PP, asume y acepta la ley de plazos vigente, que permite a las mujeres abortar libremente durante las primeras 14 semanas de gestaci¨®n. ¡°Nosotros tenemos una discrepancia sustancial en cuanto a la ley del aborto socialista en tanto en que pensamos que las menores de edad, que no pueden conducir, no deben tener esa capacidad de decidir interrumpir el embarazo sin el conocimiento de sus padres. Esa es la discrepancia sustancial¡±, explic¨® ayer el l¨ªder del PP en una entrevista en Telemadrid. ¡°Hay algunos miembros del PP que pueden estar m¨¢s a favor o en contra de la interrupci¨®n del embarazo durante unos plazos, se puede discutir el n¨²mero de semanas, pero lo que es sustancial en nuestro partido, donde tenemos un acuerdo base, es que las menores deben tener el consentimiento de sus padres¡±.

Es decir, el PP de Feij¨®o solo cuestiona ahora que las menores puedan abortar sin permiso paterno ¨Dy deja abierta la puerta a debatir el n¨²mero de semanas en las que se permite el aborto libre¨D, pero no discute el modelo de la ley vigente de plazos, frente al modelo anterior de supuestos, el de la ley de 1985. Aquel permit¨ªa abortar a las mujeres solo en tres casos: riesgo grave para la salud f¨ªsica o mental de la mujer embarazada, violaci¨®n o malformaciones o taras, f¨ªsicas o ps¨ªquicas, en el feto. A pesar de que en el PP conviven distintas corrientes ¨Dy destacados dirigentes, como el alcalde de Madrid, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez Almeida, defienden el regreso a la ley de supuestos¨D, Feij¨®o opta por asumir la ley de plazos, que el propio PP recurri¨® ante el Tribunal Constitucional.

El l¨ªder del PP se escud¨® este martes en que el recurso es muy antiguo y sugiri¨® que no lo comparte, aunque lo cierto es que los populares no lo han retirado. ¡°El recurso es sobre la ley anterior [porque la ley de plazos ha sido actualizada despu¨¦s de 2010, aunque el modelo base es el mismo], estamos muy retrasados en este asunto, la legislaci¨®n va muy por delante¡±, argument¨® Feij¨®o. ¡°En Europa todos los pa¨ªses tienen una ley de plazos. Se puede discutir si son 12, 14, 16 [semanas]. Pero el problema fundamental que nosotros tenemos es que nos parece que mientras haya minor¨ªa de edad una decisi¨®n tan trascendente debe ser con consentimiento de los padres¡±, incidi¨® el jefe de los conservadores, que opta por no abrir el frente del modelo del aborto en Espa?a.

Fuentes de su entorno m¨¢s directo confirman que el PP asume la ley de plazos y recuerdan que ¡°el PP ya ha gobernado ocho a?os con esa norma¡±, puesto que Mariano Rajoy pudo haberla modificado y no lo hizo. ¡°La ley de plazos est¨¢ ampliamente superada en el PP, que gobern¨® ocho a?os con ella¡±, inciden estas mismas fuentes. Aunque el Gobierno de Rajoy s¨ª reform¨® la ley ¨Dsin tocar la estructura del sistema de plazos¨D para hacer obligatorio el consentimiento de los padres en el caso de las menores de edad que quisieran abortar, precisamente lo que quiere recuperar Feij¨®o. Los populares tambi¨¦n incluyeron un plazo de reflexi¨®n de tres d¨ªas para que las mujeres se replanteen su decisi¨®n de abortar, una medida eliminada despu¨¦s por los socialistas y que el PP ha pedido recuperar en las enmiendas al nuevo proyecto de ley del Gobierno de Pedro S¨¢nchez sobre el aborto.

Se trata de la primera vez que Feij¨®o se pronuncia de forma tan clara sobre el modelo de interrupci¨®n voluntaria del embarazo, que el Tribunal Constitucional tiene que decir ahora si se ajusta o no a la Constituci¨®n espa?ola.

El recurso del PP contra la ley del aborto que estudiar¨¢ el Constitucional a principios de febrero impugn¨® ocho art¨ªculos y la disposici¨®n final segunda de la ley, la parte que modifica la ley de autonom¨ªa del paciente y por la cual las mujeres de 16 y 17 a?os podr¨ªan abortar sin consentimiento paterno, aunque s¨ª informando a sus padres o tutores. El PP bas¨® su recurso en la sentencia del Tribunal Constitucional de 1985 que hablaba del nasciturus (el no nacido) como un ¡°bien jur¨ªdicamente protegido¡±. En ese fallo, el alto tribunal dec¨ªa que los derechos de la mujer no pueden tener ¡°primac¨ªa absoluta¡± sobre los del no nacido, salvo en los tres supuestos marcados por la ley de 1985 ¨Dviolaci¨®n, salud de la madre o malformaci¨®n del feto¨D. Por eso, seg¨²n dec¨ªa el PP en el recurso, la ley de plazos, que cre¨® un plazo de aborto libre y sin ninguna explicaci¨®n hasta la semana 14, vulneraba la doctrina del Constitucional.

La direcci¨®n del PP de Feij¨®o ha navegado en vaivenes con el recurso del aborto, hasta que ahora Feij¨®o ha clarificado la posici¨®n del partido. El pasado junio, el vicesecretario Institucional del PP, Esteban Gonz¨¢lez Pons, declar¨® en G¨¦nova que el PP quer¨ªa que el Constitucional tumbara la ley de plazos al afirmar que ¡°cuando uno presenta uno recurso, le interesa que prospere¡±. Este lunes, sin embargo, el nuevo portavoz de Feij¨®o, Borja S¨¦mper, opt¨® por no defender el recurso y se limit¨® a confiar en que ¡°12 a?os despu¨¦s, de una vez se manifieste el Constitucional¡±. Feij¨®o toma partido y acepta la ley de plazos, pero de momento no ha ordenado al PP que, en consecuencia, retire el recurso que cuestion¨® su constitucionalidad.