Una comarca granadina en contra del expolio de su agua
El Valle de Lecr¨ªn se levanta contra una embotelladora que prev¨¦ extraer casi medio mill¨®n de litros al d¨ªa para venderlos en los pa¨ªses ¨¢rabes
La comarca granadina del Valle de Lecr¨ªn, a medio camino entre la capital y la Costa Tropical, est¨¢ compuesta por 17 pueblos. No es f¨¢cil poner a tanta gente de acuerdo ¡ªaunque sea en contra de algo¡ª sobre un asunto y, sin embargo, el 13 de julio pasado, un texto del Bolet¨ªn Oficial del Estado (BOE) lo consigui¨®. Hay unanimidad en contra de la concesi¨®n que ese BOE otorga a la empresa Aguas Bellavista SL del aprovechamiento durante 25 a?os de las aguas subterr¨¢neas de un pozo originalmente destinado a regar almendros. En otras palabras, le concede la posibilidad de embotellar esa agua y comercializarla. La autorizaci¨®n permite extraer ocho litros por segundo, 28.800 litros por hora o 460.800 por las 16 horas diarias que la empresa concesionaria explotar¨¢ el pozo. 460 metros c¨²bicos al d¨ªa de agua durante 25 a?os que, en una ¨¦poca de escasez h¨ªdrica como la actual ponen en riesgo el agua de beber y regar de 17 pueblos. Por eso, el acuerdo es un¨¢nime: nadie quiere la embotelladora.
Rosa Fern¨¢ndez, portavoz de la Plataforma para la defensa del Agua del Valle de Lecr¨ªn y Sierra Nevada, entiende que poner en marcha esta embotelladora supondr¨¢ ¡°la privatizaci¨®n de un recurso fundamental como es el agua¡±, dice. El Valle de Lecr¨ªn, comenta, ¡°no es una comarca despoblada porque tiene opciones como la agricultura o el turismo, que lo mantienen vivo. Y siempre se ha hecho una gesti¨®n del agua justa. Pero si la venden a empresas, les est¨¢n vendiendo nuestro futuro, porque sin ella no es posible vivir¡±. En cualquier caso, la autorizaci¨®n de hace dos meses no es el s¨ª definitivo y a¨²n parece haber espacio para recursos y tr¨¢mites nuevos. Es el caso de Padul, el pueblo vecino. Aunque la embotelladora est¨¢ situada en el t¨¦rmino municipal vecino de Cozv¨ªjar, perteneciente al Ayuntamiento de Villamena, el Ayuntamiento de Padul es el primero que ha presentado recurso contra esa autorizaci¨®n.
Celia Villena (IU), alcaldesa de Padul, explica que ¡°hemos presentado recurso de alzada, un paso administrativo, pero si no lo paralizan, acudiremos al juzgado. No queremos la embotelladora¡±. Ese negocio, explica, se situar¨¢, si llega a t¨¦rmino, a poco m¨¢s de dos kil¨®metros de la Laguna de Padul, un humedal protegido que temen que se vea afectado por las extracciones de agua. En esa zona, dice Jos¨¦ Manuel Enr¨ªquez, de la plataforma para la defensa del agua, ¡°todos los acu¨ªferos est¨¢n conectados¡± y unos se recuperan a costa de otros. Adem¨¢s, mantiene, ¡°son ya demasiadas extracciones industriales¡±. Se refiere a otra embotelladora que hay en la localidad cercana de D¨²rcal, a apenas seis kil¨®metros en l¨ªnea recta de la recientemente aprobada, que extrae 10 litros por segundo durante las 24 horas del d¨ªa. La plataforma advierte contra la petici¨®n de una tercera empresa para abrir otra planta de extracci¨®n de agua cerca de all¨ª. ¡°Vamos a impedir a toda costa que se abran nuevas embotelladoras. No vamos a permitir una colonizaci¨®n energ¨¦tica¡±, dice Enr¨ªquez, que se refiere a la multiplicaci¨®n de peticiones para implantar aerogeneradores, embotelladoras y huertos solares en la zona.
Aunque a efectos del posible expolio del recurso es indiferente, hay una circunstancia que incrementa en cierto modo la molestia de los lugare?os y es el destino del agua. La empresa reconoce en su documentaci¨®n que la localizaci¨®n del pozo es interesante por ¡°su corta distancia y buena comunicaci¨®n con el Puerto de Motril [a 44 kil¨®metros] con vista a la exportaci¨®n a los pa¨ªses ¨¢rabes, que cada d¨ªa son m¨¢s demandantes de las aguas espa?olas, principalmente las de Andaluc¨ªa¡±. Y debe ser cierto ese inter¨¦s por el agua for¨¢nea en Asia porque, explica Rosa Fern¨¢ndez, gran parte del agua que se embotella en la localidad vecina de D¨²rcal viaja a China y los pa¨ªses ¨¢rabes.
Aguas del Manar, como han denominado a lo que antes era el pozo para regar almendros, est¨¢ en Cozv¨ªjar. Su alcalde es Manuel Luis V¨ªlchez (PSOE) y en este momento, dice, ¡°no s¨¦ si la embotelladora se pondr¨¢ finalmente en marcha¡±. V¨ªlchez se siente contra la espada y la pared. ¡°Estoy en contra porque es cierto que a largo plazo puede quitar recursos h¨ªdricos, pero si me piden alguna licencia y la empresa cumple la legislaci¨®n no me queda otra que d¨¢rsela¡±. V¨ªlchez, dice, ha consultado a la Junta y su ¨²nica posibilidad de negarse es si ¡°tenemos que dar una declaraci¨®n de bien de inter¨¦s social para esa actividad. En ese caso, pasar¨ªa por el pleno municipal y podr¨ªamos negarlo¡±.
El BOE concedi¨® ¡°el aprovechamiento¡± y, valga el juego de palabras, as¨ª ser¨¢ para la empresa que, llegado el caso, ponga en marcha la embotelladora. M¨¢s all¨¢ de los costes de instalaci¨®n industrial, algo m¨¢s de 3,6 millones de euros seg¨²n la valoraci¨®n de la empresa, el agua es gratis para la empresa, que no est¨¢ obligada a pagar canon alguno por ella, que va de la profundidad de la tierra a la botella sin que la administraci¨®n y los ciudadanos recauden nada. Curiosa exenci¨®n al uso de esa agua com¨²n ya que ese mismo l¨ªquido, si se dedicara a riego agr¨ªcola habr¨ªa que pagarlo. Seg¨²n la comunidad de regantes que gestiona la zona, el agricultor pagar¨¢ por litros consumidos o un canon fijo por hect¨¢rea o la medida de superficie propia del lugar. Un agua, por cierto, que es tratada como un elemento mineral ¡ª¡°como si fuera arena o cualquier materia prima mineral¡±, explica Rosa Fern¨¢ndez, de la plataforma para la defensa del agua¡ª ya que este tipo de extracciones est¨¢ regulada por la Ley de Minas de 1973, y no por ley de agua alguna. Como apostilla Fern¨¢ndez, ¡°es una ley no solo preconstitucional sino que el escenario medioambiental ha cambiado much¨ªsimo en estos 50 a?os¡±. En cuanto a los puestos de trabajo que se crean, tampoco es una industria que saque adelante a ninguna comarca. Ser¨¢n 13 puestos de trabajo: un gerente, dos encargados electromec¨¢nicos, tres administrativos y responsables de ventas y ocho operarios de planta.
Juan de la Flor es el empresario que dirige Aguas de Bellavista y el previsible gerente de la explotaci¨®n. Preguntado por este diario, De la Flor no ha querido comentar las molestias de los vecinos del Valle ni especificar cu¨¢ndo comenzar¨¢ la explotaci¨®n. ¡°Est¨¢ todo escrito en el BOE. No importa mi opini¨®n ni tengo por qu¨¦ darla. Las opiniones no valen, lo que valen son los escritos¡±, contest¨® a una llamada telef¨®nica de EL PA?S.
Ya sea para exportaci¨®n o para consumo en Espa?a, el negocio del agua embotellada va viento en popa. Seg¨²n el Informe del Consumo de Alimentaci¨®n en Espa?a 2022, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n, los espa?oles beben 64,28 litros por persona y a?o, que suponen a un precio de 0,21 euros el litro, un gasto en agua de botella de 13,63 euros por persona. O en otra dimensi¨®n, casi 3.000 millones de litros en botellas que suponen un negocio de 630 millones de euros.
Otros riesgos para El Valle
La extracci¨®n masiva del agua no es el ¨²nico riesgo que perciben los pobladores de los pueblos que componen el Valle de Lecr¨ªn. Los aerogeneradores se multiplican a ritmo r¨¢pido y algunos de ellos han provocado especial malestar en la ciudadan¨ªa. Es el caso de dos grandes molinos ya aprobados en la zona que hace un a?o ¨Cen la primera quincena de septiembre¨C ardieron m¨¢s de 5.000 hect¨¢reas de zona forestal. Y, en el horizonte, algunas peticiones ya de huertos solares. Es lo que Jos¨¦ Manuel Enr¨ªquez denomina ¡°colonizaci¨®n energ¨¦tica. Agua, viento y sol vendido a las empresas con m¨¢s perjuicios que beneficios para la gente local¡±.
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