La desolaci¨®n cunde entre los jueces ante una nueva renovaci¨®n frustrada del Poder Judicial

La marcha del comisario de Justicia de la UE, Didier Reynders, que desde diciembre actuaba como mediador entre el PSOE y el PP para tratar de desbloquear la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), cuyo mandato caduc¨® hace cinco a?os, ha enfriado las expectativas de alcanzar un acuerdo antes del verano y ha extendido la inquietud entre la carrera judicial. Las principales asociaciones de jueces han emitido comunicados en los ¨²ltimos d¨ªas instando a la renovaci¨®n ¡°inmediata¡± y advirtiendo de las consecuencias de esta situaci¨®n, que no solo afecta al funcionamiento ordinario del CGPJ, sino que hace tiempo que se deja notar en el d¨ªa a d¨ªa de los tribunales, especialmente del Tribunal Supremo, y que, seg¨²n lamentan los jueces, est¨¢ deteriorando la imagen que los ciudadanos tienen de la justicia.

Los efectos del bloqueo del CGPJ, se?alan jueces consultados, son dif¨ªciles de concretar, pero lo impregnan todo. Los vocales del Consejo defienden que ellos siguen haciendo el trabajo de siempre, que permite que los tribunales funcionen con normalidad, pero los jueces se quejan de que, desde que est¨¢ en funciones, no aborda planes a largo plazo que puedan servir para combatir problemas que se han incrementado en el ¨²ltimo lustro, como el aumento de la litigiosidad, o para tomar medidas ante las jubilaciones que se esperan para los pr¨®ximos a?os (un 30% de la carrera cumplir¨¢ 70 a?os en la pr¨®xima d¨¦cada). ¡°La sensaci¨®n es que no se est¨¢ haciendo nada que ayude a la justicia de base¡±, lamenta Sergio Oliva, portavoz de la Asociaci¨®n Judicial Francisco de Vitoria (AJFV), la segunda m¨¢s representativa y de tendencia moderada.

Esas carencias de las que se quejan los jueces acaban traslad¨¢ndose al ciudadano, que tiene que esperar m¨¢s para que se resuelva su caso. Seg¨²n los datos del propio Consejo, la duraci¨®n media de los procedimientos se ha duplicado en la ¨²ltima d¨¦cada en algunos ¨®rganos, desde los juzgados de primera instancia e instrucci¨®n encargados de los procedimientos penales a varias de las salas del Tribunal Supremo, el responsable de asegurar la aplicaci¨®n uniforme de las leyes.

El Supremo es el ¨®rgano m¨¢s directamente afectado por la interinidad del Consejo, ya que una reforma legal aprobada en 2021 proh¨ªbe que el CGPJ cuando, como ahora, est¨¦ en funciones, realice nombramientos discrecionales, que es la v¨ªa por la que se elige a los presidentes de la Audiencia Nacional, de los tribunales superiores auton¨®micos y de las audiencias provinciales y a todos los magistrados del alto tribunal. El PSOE impuls¨® ese cambio, que despoj¨® al ¨®rgano de gobierno de los jueces de su principal competencia, en un intento de presionar al PP para renovar el ¨®rgano. Tres a?os despu¨¦s, los populares siguen imponiendo excusas cambiantes para mantener el Consejo bloqueado y el Supremo tiene vacantes 25 de sus 75 plazas.

Magistrados ¡°pluriempleados¡±

¡°Estamos pluriempleados, tapando agujeros. La situaci¨®n no es de recibo¡±, se queja un magistrado de la Sala de lo Contencioso, que tiene vac¨ªos 12 de sus 33 puestos. Los magistrados de esta sala est¨¢n divididos por secciones, pero en los ¨²ltimos a?os muchos de ellos tienen que incorporarse a secciones que no son la suya para conseguir que sumen los cinco jueces necesarios para formar tribunal. ¡°Hacemos un trabajo que no nos corresponde, no s¨¦ si va a llegar un d¨ªa que nos plantemos, pero esto no puede mantenerse as¨ª eternamente¡±, advierte este magistrado.

Aunque en otros tribunales las consecuencias de la falta de renovaci¨®n del Consejo no sean tan tangibles, los jueces aseguran que pesan como una losa. ¡°Hay un des¨¢nimo general en la carrera judicial¡±, se?ala Edmundo Rodr¨ªguez, portavoz de la progresista Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD). El desaliento, aseguran los jueces, tiene varios focos. Unos de ellos, la sensaci¨®n de carrera truncada de jueces que aspiraban a puestos en tribunales provinciales o auton¨®micos o a conseguir una plaza en el Supremo, puertas que se han cerrado con el veto a los nombramientos discrecionales. ¡°La gente ahora aspira a cumplir 62 o 65 a?os y jubilarse¡±, apunta Rodr¨ªguez. Un estudio presentado en febrero por la AJFV revel¨® que las jubilaciones voluntarias o anticipadas se incrementaron en algo m¨¢s de 15 puntos en un solo a?o: del 31,4% que supusieron en 2022, al 47,4% de 2023.

En el ¨¢nimo de los jueces tambi¨¦n influye que el bloqueo del CGPJ est¨¢ trasladando al ciudadano la sensaci¨®n de que los pol¨ªticos pueden acabar influyendo en el dictado de las sentencias. ¡°Es leg¨ªtimo que el ciudadano se lo pregunte. De lo contrario, ?a qu¨¦ viene tanto inter¨¦s por controlar el CGPJ?¡±, advierte el portavoz de la Francisco de Vitoria. ¡°El da?o a la imagen que nos hace es impresionante¡±, a?ade la presidenta de la Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura (APM), Mar¨ªa Jes¨²s del Barco, la mayoritaria y de tendencia conservadora, pero que se ha desmarcado abiertamente de la estrategia del PP respecto al Consejo y pide que se renueve el ¨®rgano sin condiciones. ¡°No puedes obligar a un partido a hacer una reforma legal que no quiere, y ah¨ª el PSOE no ha enga?ado nunca¡±, se?ala Del Barco respecto a la imposici¨®n de los populares de que, antes de renovar el Consejo, se reforme el sistema de elecci¨®n del ¨®rgano para que los 12 vocales jueces sean elegidos por los miembros de la carrera. La APM aboga por esa reforma, que cree ¡°irrenunciable¡±, pero no comparte que sea una condici¨®n previa a la elecci¨®n de un nuevo Consejo.

La peor contribuci¨®n a esta imagen de deterioro que lamentan los jueces la aporta el propio Consejo, un ¨®rgano diezmado en su composici¨®n (de los 21 miembros que le otorga la composici¨®n se ha quedado en 16 tras dos dimisiones, dos jubilaciones y un fallecimiento), al que un grupo de ocho vocales conservadores han convertido en un instrumento m¨¢s para hacer oposici¨®n al Gobierno de Pedro S¨¢nchez. Este bloque ha ido ganando peso tras las sucesivas salidas de vocales y volver¨¢ a hacerlo cuando Vicente Guilarte, el actual presidente suplente (el segundo interino tras la dimisi¨®n en 2022 de Carlos Lesmes), confirme su renuncia, anunciada por ¨¦l mismo para julio si antes no hay acuerdo entre el PSOE y el PP.

¡°Le han hecho la vida imposible¡±

Guilarte es un abogado y jurista conservador que, como el resto de vocales de este grupo, fue propuesto por el PP en 2013 para formar parte del ¨®rgano. Siempre se mantuvo al margen de las cuitas internas de su sector, pero se convirti¨® en presidente el verano pasado al ser el vocal de m¨¢s edad y aprovech¨® la proyecci¨®n para trabajar en todos los frentes a favor de la renovaci¨®n. ¡°No se lo han perdonado, le han hecho la vida imposible¡±, se?ala un vocal progresista. Desde la presidencia, Guilarte tambi¨¦n se ha apartado de los pronunciamientos de su grupo m¨¢s cr¨ªticos contra el Ejecutivo, como los acuerdos contra la amnist¨ªa o contra la designaci¨®n del fiscal general, por lo que el sector progresista teme que su salida aumente el poder del n¨²cleo conservador m¨¢s duro. No obstante, el hecho de que su sucesor sea, tambi¨¦n por edad, Wenceslao Olea, magistrado del Supremo al que se atribuye un ¡°perfil institucional¡± y que tampoco forma parte de ese n¨²cleo atrincherado contra el Ejecutivo, es visto por parte de los progresistas como ¡°un mal menor¡±.

Para este sector, algunos de los ¨²ltimos episodios de enfrentamientos entre bloques, como la elecci¨®n de una letrada con plaza en Madrid para teledirigir desde la capital la Escuela Judicial, con sede en Barcelona, constatan el af¨¢n de los conservadores por ejercer ¡°un control absoluto¡± de todos los ¨®rganos del CGPJ. El siguiente cap¨ªtulo se prev¨¦ para la pr¨®xima semana, cuando el pleno previsiblemente vote si se regula el voto telem¨¢tico para las elecciones de las salas de gobierno del Supremo, la Audiencia Nacional y los tribunales superiores de justicia. El gabinete t¨¦cnico del CGPJ lo avala, pero las salas de gobiernos de los principales tribunales, donde la mayor¨ªa de miembros electos pertenecen a la APM, se oponen a cambiar un sistema con el que han controlado tradicionalmente la c¨²pula judicial. Los conservadores del Consejo se preparan para deso¨ªr a su gabinete t¨¦cnico, aseguran fuentes del ¨®rgano.