El barco fenicio hundido en Mazarr¨®n hace 2.600 a?os vuelve a tierra
Los trabajos de extracci¨®n del pecio han comenzado este viernes, tres d¨¦cadas despu¨¦s de su hallazgo. Los t¨¦cnicos tardar¨¢n unos cuatro a?os en restaurar y mostrar la nave
A simple vista, no parece m¨¢s que un peque?o trozo de madera antigua, empapada en agua. Sin embargo, las decenas de periodistas que se arremolinan en torno al objeto para fotografiarlo o grabarlo, la presencia de decenas de t¨¦cnicos y dirigentes pol¨ªticos, incluido el mismo presidente de la Regi¨®n de Murcia, Fernando L¨®pez Miras, y los numerosos curiosos congregados en la zona delatan que este no es un pedazo de madera cualquiera. Es el primero de los veinte fragmentos que desde hoy y durante los pr¨®ximos dos meses se van a extraer del fondo del mar en la costa del municipio de Mazarr¨®n y que forman el barco fenicio de unos 2.600 a?os de antig¨¹edad hundido en la playa de La Isla de esa localidad costera. Para contemplarlo entero, restaurado y conservado en un museo, deber¨¢n pasar a¨²n, como m¨ªnimo, cuatro a?os. Pero el primer paso para ello se ha dado este viernes.
Esta primera extracci¨®n ¡°representa un hito para la arqueolog¨ªa en Espa?a y a nivel internacional¡±, ha subrayado el arque¨®logo de la Universidad de Valencia que dirige los trabajos, Carlos de Juan, mientras mostraba la pieza, de solo unos 72 cent¨ªmetros de largo por 26 de ancho. Se ha elegido este trozo para comenzar los trabajos por ser de los m¨¢s sencillos para su manipulaci¨®n: estaba ya completamente separado del barco, en la parte de la proa de la embarcaci¨®n en el costado de estribor, y las tareas no han durado m¨¢s de unas tres horas. La pieza m¨¢s grande, la de la quilla, que ser¨¢ la ¨²ltima en salir del mar, mide unos 3,3 metros de largo por 70 cent¨ªmetros de ancho y De Juan calcula que su extracci¨®n se demorar¨¢ entre 7 y 8 d¨ªas.
Entre medias, dos meses de trabajo (44 d¨ªas h¨¢biles, ha detallado, hasta la primera semana de noviembre), en los que se comenzar¨¢ por retirar las cuadernas (las piezas de madera trasversales que forman el esqueleto de la embarcaci¨®n, 13 en total) y se continuar¨¢ por el resto de tablas, de los fragmentos m¨¢s peque?os a los m¨¢s grandes.
Un trabajo minucioso y complejo
El trabajo es minucioso y complejo por la gran fragilidad de la madera, que err¨®neamente se hab¨ªa dicho que era de higuera o de pino. De Juan ha aclarado que los primeros an¨¢lisis han determinado que se trata de una especie de la familia de las Sabinas, podr¨ªa ser del denominado ¡°cipr¨¦s de Cartagena¡±. Los arque¨®logos saben a ciencia cierta que la embarcaci¨®n se construy¨® en la zona y De Juan ha subrayado que ¡°es el ¨²nico ejemplo¡± de un barco fenicio del que disponemos donde se van a poder estudiar t¨¦cnicas de carpinter¨ªa tra¨ªdas del Mediterr¨¢neo oriental, as¨ª como la ¡°integraci¨®n, convivencia y trasferencia¡± con otras t¨¦cnicas de construcci¨®n y navegaci¨®n de las comunidades locales que viv¨ªan en esta zona en aquella ¨¦poca.
Para extraer las piezas se van a utilizar dos m¨¦todos. El m¨¢s complejo, que se ha probado este viernes de manera piloto, es la fabricaci¨®n sobre la marcha, en el fondo del mar, de una ¡°cama¡± de fibra de carbono sobre la que se apoyar¨¢ cada pieza para su extracci¨®n en posici¨®n horizontal. Se har¨¢ as¨ª con las piezas de las que no se conoce la forma exacta de su cara exterior porque est¨¢n apoyadas en la arena. Para las que s¨ª se conoce la forma, se han prefabricado ya esas camas, con lo que el procedimiento ser¨¢ m¨¢s r¨¢pido.
De Juan ha subrayado que, para la conservaci¨®n de la madera, es fundamental que no se seque, por lo que todos los fragmentos se trasladar¨¢n al laboratorio especializado del Museo Nacional de Arqueolog¨ªa Subacu¨¢tica (ARQUA), en Cartagena, o bien sumergidas en cubetas, como en el caso de hoy, o envueltas en una cubierta pl¨¢stica para preservar la humedad. El laboratorio especializado, de los m¨¢s punteros del mundo en esta materia, tratar¨¢ las piezas para su consolidaci¨®n y restauraci¨®n en un proceso que durar¨¢, como m¨ªnimo, cuatro a?os. Tras la extracci¨®n de todas las piezas, se va a llevar a cabo tambi¨¦n una excavaci¨®n del entorno en el que estaba el barco, por si apareciera alg¨²n objeto perteneciente a su cargamento, aunque el grueso del mismo se encontraba dentro de la embarcaci¨®n y fue extra¨ªdo a finales de los a?os 90.
Este pecio, denominado Mazarr¨®n II, fue descubierto en 1994, en la misma zona en la que unos a?os antes hab¨ªan aparecido tambi¨¦n los restos de otra embarcaci¨®n de la misma ¨¦poca, la Mazarr¨®n I. De esta ¨²ltima apenas se conservaba un fragmento, que actualmente se puede visitar en el ARQUA. El Mazarr¨®n II, sin embargo, se encontraba en unas condiciones excepcionales: su estructura se conservaba completa desde la proa hasta la popa y conten¨ªa un cargamento de lingotes de mineral de plomo, un ¨¢nfora y un molino de mano, ¨²tiles de navegaci¨®n y su ancla, de madera y plomo. Es, explica De Juan, lo que en arqueolog¨ªa se denomina un ¡°¨²nicum¡±, una pieza de inter¨¦s arqueol¨®gico excepcional, que abre la puerta a estudiar la interacci¨®n de la cultura fenicia con las poblaciones locales de la ¨¦poca, a conocer m¨¢s sobre sus t¨¦cnicas de navegaci¨®n y de construcci¨®n, a analizar posibles hibridaciones. No es, como se ha dicho ¡°en titulares ol¨ªmpicos¡±, el barco m¨¢s antiguo o mejor conservado del mundo, lo cual ¡°no le resta importancia, porque sigue siendo un hallazgo incre¨ªble¡±, defiende.