S¨¢nchez se afana en la paz del partido y de la coalici¨®n

¡°As¨ª no se puede seguir¡­¡±Esta sentencia del l¨ªder de Junts, Carles Puigdemont, dirigida a modo de aviso al presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, uno m¨¢s desde que empez¨® la legislatura surgida de las elecciones del verano de 2023, y que se produce con extraordinaria asiduidad, ha activado, tambi¨¦n una vez m¨¢s, el mecanismo de di¨¢logo entre el partido independentista conservador y el Ejecutivo central. A la espera de una reuni¨®n en Suiza, que pu...

¡°As¨ª no se puede seguir¡­¡±Esta sentencia del l¨ªder de Junts, Carles Puigdemont, dirigida a modo de aviso al presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, uno m¨¢s desde que empez¨® la legislatura surgida de las elecciones del verano de 2023, y que se produce con extraordinaria asiduidad, ha activado, tambi¨¦n una vez m¨¢s, el mecanismo de di¨¢logo entre el partido independentista conservador y el Ejecutivo central. A la espera de una reuni¨®n en Suiza, que puede producirse en cualquier momento, el Gobierno se resigna a que la convalidaci¨®n de tres decretos leyes este mismo mi¨¦rcoles en el Congreso no est¨¦ garantizada. Esta din¨¢mica de imprevisibilidad pol¨ªtica no puede verse acrecentada, adem¨¢s, por conflictos internos: ni en el PSOE, ni con Sumar, ¨²nico socio oficial del Gobierno de coalici¨®n. Pedro S¨¢nchez pone personalmente de su parte para que as¨ª sea.

La paz interna del PSOE es una realidad de la que se vanagloria su secretario general, acorde con lo que ocurre habitualmente en los partidos pol¨ªticos cuando est¨¢n en el poder. Solo los presidentes auton¨®micos, es decir, los gobernantes, pueden alzar la voz y ser cuan cr¨ªticos quieran con su l¨ªder, incluso aunque sea presidente del Gobierno de Espa?a. Aun as¨ª, S¨¢nchez pretende tener las menores aristas posibles y, al menos, formalmente, relacionarse con todos los dirigentes territoriales de su partido con normalidad, sean o no de su agrado.

La presencia de S¨¢nchez este fin de semana en tres congresos regionales del PSOE muestra ese inter¨¦s en demostrar que es el secretario general de todos; de los militantes y dirigentes de Castilla¨CLa Mancha, con el reelegido Emiliano Garc¨ªa¨CPage, a la cabeza. Al igual que con el extreme?o Miguel ?ngel Gallardo, a quien brinda el apoyo de todo el PSOE para que los socialistas vuelvan a ganar las elecciones como tantos a?os ocurri¨® con Juan Carlos Rodr¨ªguez Ibarra y, despu¨¦s, con Guillermo Fern¨¢ndez-Vara. Los militantes han elegido a Gallardo frente a la que se consideraba candidata de Ferraz y ahora toca cerrar filas por inter¨¦s mutuo.

Nada que disimular ni teatralizar con el afecto mostrado el viernes en Avil¨¦s entre el reelegido l¨ªder de los socialistas asturianos, Adri¨¢n Barb¨®n, presidente del Principado de Asturias, y el presidente de Espa?a. El primero mostr¨® reticencias y dudas sobre el alcance del acuerdo del PSOE con Junts sobre la financiaci¨®n singular de Catalu?a, a¨²n por concretar, pero la relaci¨®n entre ambos no se ha deteriorado un ¨¢pice. Ese asunto siempre ser¨¢ espinoso. Garc¨ªa¨CPage record¨® este domingo en su discurso su oposici¨®n a ¡°privilegios¡± de una regi¨®n sobre otra.

A¨²n queda por dilucidarse el congreso en Cantabria en el que los dos aspirantes ¡ªel actual secretario general, Pablo Zuloaga, y Pedro Casares¡ª tienen la mejor de las relaciones con S¨¢nchez, aunque se presuponga que el presidente no hubiera promovido un cambio. En Arag¨®n, Pilar Alegr¨ªa, ministra de Educaci¨®n y portavoz del Gobierno, competir¨¢ por la direcci¨®n con Dar¨ªo Villagrasa, que cuenta con el apoyo de Javier Lamb¨¢n, y todo su bloque, a¨²n secretario general y presidente auton¨®mico hasta 2023.

Quienes ostentan desde hoy las secretar¨ªas generales regionales y quienes las conseguir¨¢n en las pr¨®ximas semanas saben que ese estatus es la rampa para disputar el poder al PP en las siguientes elecciones auton¨®micas. La designaci¨®n de Mar¨ªa Jes¨²s Montero, vicepresidenta primera el Gobierno, comol¨ªder del PSOE de Andaluc¨ªa, solo tiene ese horizonte. Quienes ya han perdido elecciones, deb¨ªan dar una paso atr¨¢s y dejar a otro u otra que lo intente; se?alan interlocutores de la direcci¨®n federal, adem¨¢s de que S¨¢nchez se sienta m¨¢s c¨®modo si sus barones y baronesas son de su cuerda.

El presidente del Gobierno, adem¨¢s de sus preferencias y las del aparato de Ferraz sobre los l¨ªderes territoriales, ha querido dejar un mensaje, que encierra una petici¨®n, en los congresos regionales de este fin de semana: defender la gesti¨®n del Gobierno central en virtud de los resultados socioecon¨®micos de Espa?a.

Ni ruido en el partido ni bronca en el Gobierno con Sumar, ahora por el calendario sobre la aprobaci¨®n en el Consejo de Ministros de la jornada de 37,5 horas auspiciada por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz. El asunto no est¨¢ resuelto entre ella y el ministro de Econom¨ªa, Carlos Cuerpo, se?alan fuentes de las dos partes. En Trabajo consideran que algo se ha movido a su favor, en cuanto que se ha acercado la fecha de la aprobaci¨®n en el Consejo al incluirlo en la pr¨®xima reuni¨®n de la Comisi¨®n Delegada de Asuntos Econ¨®micos, paso inicial imprescindible. No a?adir m¨¢s problemas en la coalici¨®n a los que ya hay, insisten estas fuentes. Este mi¨¦rcoles, el Ejecutivo a¨²n no tiene certezas sobre qu¨¦ votar¨¢ Junts en los tres decretos que se discuten en un pleno extraordinario del Congreso. S¨ª dan por seguro que el grupo de Puigdemont votar¨¢ en contra del gravamen de las energ¨¦ticas y saldr¨¢ derrotado. No tienen clara su posici¨®n sobre la reforma de la jubilaci¨®n activa, que saldr¨¢ adelante gracias al voto del PP, que acepta el texto una vez avalado por la CEOE y los sindicatos, y tampoco sobre otro decreto con ayudas al transporte y revalorizaci¨®n de las pensiones. El Gobierno conf¨ªa en su aprobaci¨®n pero no las tiene todas consigo al no tener clara la dimensi¨®n del ¡°esto no puede seguir as¨ª? de Puigdemont.