Un cambio de perspectiva en el presupuesto de deportes

En las ¨²ltimas semanas y coincidiendo con la tramitaci¨®n simult¨¢nea en el Parlament de la ley de presupuestos y la del deporte, la Uni¨®n de Federaciones Deportivas de Catalu?a ha liderado una campa?a con el lema ¡°Salvemos el deporte¡± que reclama el 1% de los presupuestos de la Generalitat para 2020. Incluso algunos dirigentes federativos amenazan con un eventual paro general de las competiciones si no se aprueba el porcentaje de gasto mencionado. Es una evidencia que los recursos econ¨®micos de la Generalitat destinados al deporte han sufrido el impacto de la crisis y que, pese a una progresiva recuperaci¨®n, est¨¢n lejos del techo presupuestario de 2010. Sin embargo, la campa?a utiliza argumentos poco rigurosos para apoyar una petici¨®n que parece desmesurada.

Los anuncios publicitarios muestran cifras de tan s¨®lo cuatro pa¨ªses europeos ¡ªsin citar ninguna fuente¡ª de los que se asegura que destinan un porcentaje m¨ªnimo de un 1% de su presupuesto a las pol¨ªticas deportivas. Esta escasa comparaci¨®n sirve de fundamento para afirmar que ¡°Catalu?a est¨¢ a la cola de Europa en pol¨ªticas p¨²blicas deportivas¡± ya que s¨®lo destina un 0,2% de los recursos p¨²blicos.

Dejando de lado la limitaci¨®n de la muestra, la afirmaci¨®n es err¨®nea. Los datos referidos a Catalu?a se refieren exclusivamente al 0,2% (en realidad es el 0,25%) del presupuesto de la Generalitat, obviando que las pol¨ªticas deportivas p¨²blicas catalanas se realizan, tambi¨¦n, con los recursos econ¨®micos de los ayuntamientos, las diputaciones provinciales y el propio Estado a trav¨¦s del Consejo Superior de Deportes. Por poner un ejemplo de otro indicador, los C¨ªrculos de Comparaci¨®n Intermunicipal de la Diputaci¨®n de Barcelona sit¨²an en un promedio de 6,7% el porcentaje destinado a deportes en los gastos corrientes municipales. Hablar de cifras econ¨®micas destinadas a las pol¨ªticas deportivas p¨²blicas en Catalu?a y no tener en cuenta los recursos estatales y los de las administraciones locales es desvirtuar la realidad.

En cuanto a la petici¨®n de disponer del 1% del presupuesto de la Generalitat parece poco realista con los par¨¢metros actuales. Seg¨²n datos del INE de 2018, a pesar de los recortes Catalu?a es la comunidad que dispone del mayor presupuesto auton¨®mico destinado al deporte, mientras que, en valores relativos, la media del conjunto de todas las comunidades es del 0,18% de sus presupuestos. Aumentar al 1% significar¨ªa pasar de los 61 millones actuales a 275 millones del presupuesto real de gasto, que significar¨ªa un incremento del 350%. Teniendo en cuenta que el presupuesto estatal del Consejo Superior de Deportes del a?o 2019 ha sido de 204 millones de euros, la petici¨®n federativa parece quim¨¦rica.

Dicho esto, es evidente que cualquier persona relacionada con el sector deportivo est¨¢ dispuesta a apoyar que haya m¨¢s dinero p¨²blico para el deporte. El proyecto actual de presupuesto de la Secretaria General del Deporte es, a todas luces, insuficiente para hacer frente a las necesidades de los distintos ¨¢mbitos de la actividad f¨ªsica y deportes de nuestra sociedad. Para aumentarlo ser¨ªa aconsejable cambiar de perspectiva y reclamar un mayor presupuesto para el deporte desde una mirada m¨¢s transversal, que apoye planes y programas espec¨ªficos con objetivos saludables, educativos, desde la perspectiva de g¨¦nero, de integraci¨®n e inclusi¨®n social, etc. Como dec¨ªa Ra¨¹l Romeva en una reciente entrevista, ¡°es necesario que el deporte deje de ser s¨®lo tema de la secci¨®n de deportes de los peri¨®dicos¡±. Esto implicar¨ªa recursos de otros departamentos en programas conjuntos y un compromiso pol¨ªtico m¨¢s amplio con el valor del deporte como herramienta de transformaci¨®n social. La nueva ley del deporte podr¨ªa avanzar en este sentido.

Joan Carles Burriel es profesor i ex-director del INEFC de Barcelona