El independentismo asalta Pimec en un renovado inter¨¦s por el escenario empresarial
Las elecciones se celebran este martes despu¨¦s de que grandes empresas hayan abandonado la C¨¢mara de Comercio
Casi dos a?os despu¨¦s de que ganara el asalto a la C¨¢mara de Comercio de Barcelona, el independentismo acecha ahora a Pimec, la influyente patronal catalana de pymes que vivir¨¢ este martes sus primeras elecciones con dos candidatos en liza. La candidatura encabezada por el empresario vallesano Pere Barrios, apoyada por la Assemblea Nacional Catalana (ANC), intentar¨¢ ganar las elecciones de la organizaci¨®n a la liderada por Antoni Ca?ete, actual secretario general de la patronal y ungido el pasado verano como delf¨ªn del actual presidente, Josep Gonz¨¢lez. Una posible victoria de los de Barrios ser¨ªa la entrada de una plataforma comandada por el secesionismo en la representaci¨®n institucional de la Generalitat, mientras su otra plataforma de poder, la Cambra, presiona a los partidos soberanistas para que modifiquen la ley que les permita ese mismo acceso.
El punto de partida es desigual y juega a favor de Ca?ete. Logr¨® validar 370 de los avales presentados para poder asistir a las elecciones, mientras que Eines Pimec ¡ªEines es el t¨¦rmino que utilizan como gen¨¦rico las candidaturas apoyadas por la ANC¡ª logr¨® en torno a 130. Y la candidatura continuista tambi¨¦n tiene una supuesta ventaja gracias al apoyo que le han ofrecido distintas federaciones y gremios asociados a Pimec, cuyo apoyo puede llegar a tener hasta 30 votos. Pero la alta capacidad de movilizaci¨®n de la ANC vuelve a generar desconfianza sobre cu¨¢l podr¨ªa ser la reacci¨®n de los votantes de Eines, que han denunciado una campa?a anunciada casi sin tiempo de preparaci¨®n y con toda la estructura de Pimec en su contra.
¡°Dependo cero de la ANC, pero s¨ª es cierto que nos han ayudado en la parte log¨ªstica con un apoyo inestimable¡±, dice Barrios, pese a las suspicacias que genera ese apoyo en el conjunto del empresariado. Niega esa versi¨®n su rival en las urnas, Antoni Ca?ete, quien acusa a Eines Pimec de ¡°utilizar los recursos de la ANC, que quiere instrumentalizar una candidatura para sus intereses y pervertir las elecciones. Les est¨¢n haciendo un flaco favor al pa¨ªs¡±.
¡°Pese a ser una carrera desigual, estamos notando la fuerza de mucha gente que te deja la delegaci¨®n de voto por debajo de la puerta de la empresa y de casa¡±, explica Pere Barrios, un empresario del sector metal¨²rgico con experiencia en Pimec (presidi¨® su organizaci¨®n vallesana) y actual vicepresidente de la C¨¢mara de Comercio, a la que accedi¨® con Eines del Pa¨ªs. Barrios fue, de hecho, una de las personas que optaron a la presidencia de la entidad cuando su candidatura se impuso en las elecciones, aunque despu¨¦s ese cargo recay¨® en Joan Canadell y, despu¨¦s, en M¨°nica Roca.
Ca?ete defiende dos puntos de su candidatura. Uno es el que denomina el ¡°activismo empresarial¡± para situar a las pymes donde les pertoca por peso, y otras es la defensa del ¡°capitalismo inclusivo¡±, en l¨ªnea con la demanda de un nuevo contrato social que evite las fisuras entre clases sociales y piense en las personas que est¨¢n en riesgo de quedarse descolgadas del sistema. Pero defiende el actual modelo patronal espa?ol ¡ª¡±Similar al europeo¡±, remacha¡ª, en el que conviven dos grandes patronales especializadas seg¨²n la dimensi¨®n de sus empresas: grandes o peque?as.
Barrios defiende ¡°un cambio radical en la patronal, pero no por una cuesti¨®n independentista, sino porque Pimec est¨¢ envejecida y que ha tenido un perfil muy bajo y con un complejo de inferioridad que no toca en estos momentos¡±. Apunta, por ejemplo, que Pimec no participe en muchos convenios colectivos pese a ser las pymes las empresas predominantes en el tejido empresarial catal¨¢n.
Pimec es solo un paso m¨¢s en el que la ANC est¨¢ extendiendo sus redes para dar m¨¢s preponderancia social al discurso independentista. Su brazo sindical, la Intersindical-CSC, con apenas tres centenares de delegados en empresas, fue el responsable de la convocatoria de huelga que sufri¨® Catalu?a en febrero de 2019. Despu¨¦s se impusieron en la C¨¢mara de Comercio de Barcelona, hist¨®rica palanca de poder del catalanismo empresarial, y dieron la batalla en las elecciones por la Universitat de Barcelona.
Su segunda batalla empresarial llega d¨ªas despu¨¦s de que volviera a levantarse la polvareda por su irrupci¨®n en la C¨¢mara de Comercio de Barcelona. Tres empresas que participaban en el pleno de la instituci¨®n despu¨¦s de haber ocupado los asientos de pago han comunicado recientemente su marcha de la institucional. Ni Naturgy, ni Abertis ni Catalonia Hotels han admitido que su renuncia tenga que ver con el discurso marcadamente agresivo de Canadell, que abandon¨® la presidencia de la entidad para concurrir como n¨²mero tres de Junts en las elecciones catalanas del 14 de febrero. S¨ª en cambio con un cambio de pol¨ªtica de gastos y de representaci¨®n, aunque el ruido en torno a su decisi¨®n se ha relacionado con ese acerbo secesionista y el discurso anti gran empresa mantenida por Canadell. Barrios intenta poner espacio respecto al expresidente de la C¨¢mara: ¡°Se lo dije, que en poco tiempo hab¨ªa conseguido enemistarse con todo el mundo y eso, a veces, no lleva a ninguna parte¡±.
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