Colau frena la apertura de ¡®cocinas fantasma¡¯ mientras decide c¨®mo las regula

El gobierno de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no quiere que proliferen en la ciudad grandes locales con decenas de cocinas donde se preparan platos para llevar a domicilio, las llamadas cocinas fantasma, sin antes evaluar qu¨¦ riesgos tienen para la vida de los barrios y para el negocio de los bares y restaurantes ya existentes. Por ello ha frenado su apertura, suspendiendo la concesi¨®n de permisos de establecimientos de platos preparados con obrador y cocinas industriales sin degustaci¨®n para decidir c¨®mo las regula.

¡°Era necesario actuar con contundencia y rapidez¡±, ha defendido la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, recordando la inquietud vecinal ante las obras de dos proyectos de los distritos de Les Corts y Sant Mart¨ª que ahora quedan congelados. La suspensi¨®n afecta a las obras y a la solicitud de actividad. Ni el consistorio ni el Gremio de Restauraci¨®n tienen constancia de que haya macrococinas fantasma operando.

En la ciudad s¨ª hay actividad de platos preparados o cocinas industriales, pero de peque?o tama?o. Desde la empresa Projectum, que act¨²a de oficina t¨¦cnica y se encarga de proyectos y obras para terceros, su gerente, Carlos Cervera, explica que las solicitudes se han quintuplicado durante la pandemia y que la firma ha abierto, con las licencias citadas, varios locales (que no cuantifica ni detalla d¨®nde est¨¢n) con un m¨¢ximo de ocho cocinas. Cervera asegura que la suspensi¨®n anunciada este viernes le afecta en cuatro proyectos que ten¨ªa en marcha. Otro negocio existente es de la firma Not So Dark, en la Travessera de Gr¨¤cia, que abri¨® hace unas semanas en un local de 500 metros que era un restaurante y opera con esta licencia. El consistorio analizar¨¢ si puede continuar con la actividad.

El Gremio de Restauraci¨®n ha aplaudido la suspensi¨®n: ¡°Ha de servir para consensuar una regulaci¨®n espec¨ªfica sobre los criterios de implantaci¨®n de macrococinas en el interior de la trama urbana de Barcelona¡±, ha expresado su director general, Roger Pallarols.

Uno de los elementos que valorar¨¢ el consistorio es si se permite la implantaci¨®n de esta actividad en barrios residenciales, ha explicado Sanz. Los vecinos afectados, que temen problemas de humo, ruido, olores o de movilidad por las decenas de repartidores que esperar¨ªan en la calle, reclaman que se consideren una actividad industrial y no se implanten en barrios de vivienda. La edil ha especificado que para regular el sector ser¨¢ preciso aprobar un plan especial urban¨ªstico para determinar las condiciones de implantaci¨®n de estas instalaciones; y una ordenanza que fije las condiciones para abrir la actividad econ¨®mica.

El teniente de alcalde de Econom¨ªa, Jaume Collboni, ha sido muy contundente a la hora de alertar de los riesgos que la proliferaci¨®n de esta actividad puede tener: ¡°Estamos a favor de la modernizaci¨®n de la econom¨ªa, el progreso de la ciudad y la digitalizaci¨®n, pero con normas. Normas que garanticen la tranquilidad de los vecinos, que no impacte en la contaminaci¨®n y la movilidad y en la econom¨ªa de la ciudad, que est¨¢ sufriendo mucho. Una competencia sin normas de otras plataformas al sector de la restauraci¨®n ser¨ªa dar el toque final a los bares y restaurantes de la ciudad¡±.

Uno de los fen¨®menos que ha constatado el consistorio en el caso de dos proyectos de cocina fantasma en los distritos de Les Corts y Sant Mart¨ª es que sus promotores comunican las obras al distrito sin explicar qu¨¦ ser¨¢ el local. ¡°Dejar¨¢n de ser cocinas fantasma y ser¨¢n actividad regulada compatible con la trama urbana y la progresi¨®n de la econom¨ªa local¡±, ha insistido Collboni.

La suspensi¨®n impacta en las dos obras. La de Les Corts fue paralizada por una cuesti¨®n de volumetr¨ªa del edificio; y la de Sant Mart¨ª podr¨¢ continuarlas, pero al no haber solicitado licencia se da por hecho de que se paralizar¨¢n a la espera de si la regulaci¨®n le da cabida.

Cuesti¨®n distinta son las cocinas en la Travessera de Gr¨¤cia, que est¨¢n en un local que ten¨ªa licencia de restaurante y cerr¨®. El consistorio est¨¢ analizando este caso. La suspensi¨®n de licencias incluye, para evitar picaresca, las de platos preparados y obradores de comida. La moratoria tendr¨¢ una vigencia de un a?o.