Condenan a un mosso a dos a?os de c¨¢rcel por agredir a un periodista en una protesta en Barcelona

La Audiencia de Barcelona ha condenado a un agente antidisturbios de los Mossos d¡¯Esquadra a dos a?os de c¨¢rcel por agredir a un fotoperiodista durante las protestas por el desalojo del Banc Expropiat de Barcelona en 2016, al considerar que su actuaci¨®n fue ¡°gratuita¡±, ¡°innecesaria¡± e ¡°injustificada¡±.

En su sentencia, la secci¨®n d¨¦cima de la Audiencia ha decidido condenar al polic¨ªa por un delito de lesiones con uso de instrumento peligroso y la agravante de prevalencia del car¨¢cter p¨²blico de su cargo, y le impone tambi¨¦n la suspensi¨®n del ejercicio de su actividad durante el tiempo de la condena, as¨ª como el pago de 7.265 euros a la v¨ªctima en calidad de responsabilidad civil, de la que es subsidiaria la Generalitat.

Los hechos sucedieron hacia las 23 horas del 25 de mayo de 2016, durante la tercera noche de disturbios a ra¨ªz del desalojo del local okupa Banc Expropiat, una antigua sucursal bancaria ubicada en el barrio de Gr¨¤cia de Barcelona.

Ya hab¨ªa terminado la manifestaci¨®n cuando una mujer se encar¨® al cord¨®n policial de la calle Mare de D¨¦u dels Desamparats y levant¨® la visera del casco del jefe del dispositivo, que la tir¨® al suelo, una escena que llev¨® a los periodistas a reprochar la conducta de los mossos y motiv¨® que varios manifestantes lanzaran botellas de cristal a los agentes, que comenzaron a cargar.

En este contexto, sostiene la sentencia, el acusado, miembro de la BRIMO, se dirigi¨® hacia la v¨ªctima, fotoperiodista del diario La Directa, y le dio un golpe con la defensa en la pierna derecha, tras lo cual sobrepas¨® el cord¨®n policial, se adentr¨® en la plaza donde se hab¨ªa refugiado el fot¨®grafo y, dirigi¨¦ndose directamente a ¨¦l, le volvi¨® a golpear con la porra, esta vez en la mano.

Para los magistrados, ha quedado probado que el agente actu¨® ¡°con el ¨¢nimo de atentar contra la integridad f¨ªsica¡± de la v¨ªctima ¡°de forma gratuita¡± sin que esta ni las ¡°pocas personas que le rodeaban¡± estuvieran realizando ¡°ning¨²n acto hostil, ni violento, ni agresivo¡±. Adem¨¢s, subrayan, ¡°ning¨²n otro agente de los que acompa?aban al acusado en esa calle despleg¨® la fuerza en ese momento contra las personas que se encontraban en el mismo lugar que el perjudicado¡±.

Seg¨²n el tribunal, no consta que la v¨ªctima llevara puesto el brazalete de prensa ni ning¨²n otro distintivo visible que lo acreditara como profesional de la informaci¨®n durante el episodio, si bien habr¨ªa levantado las manos y manifestado ¡°prensa¡± antes de sufrir la agresi¨®n.

Por todo ello, la Audiencia, que ha absuelto al mosso del delito cometido por funcionario p¨²blico contra derechos individuales y estima la atenuante de dilaciones indebidas, considera que ¡°no concurr¨ªa ning¨²n motivo que justificara la actuaci¨®n violenta del agente acusado¡±.

¡°No se trata solamente de que la actuaci¨®n del agente no fuera proporcional porque debiera haber utilizado la porra de otro modo, debiera haber golpeado en otro lugar menos vulnerable del cuerpo, sino que no estaba justificado que utilizara su defensa de ning¨²n modo. No hubo ning¨²n exceso en una actuaci¨®n justificada del agente, sino una actuaci¨®n injustificada, contraria a derecho¡±, subraya.

La sala apunta, adem¨¢s, que la agresi¨®n por parte del mosso fue ¡°gratuita y por ende innecesaria¡± porque ¡°no exist¨ªa una necesidad racional de intervenir con la defensa en el momento que la utiliz¨®¡±, puesto que la v¨ªctima no cometi¨® ¡°ninguna agresi¨®n ileg¨ªtima¡± ni tampoco cre¨® una situaci¨®n de ¡°riesgo¡± para ¡°ser golpeado¡±.