Txema Salvans, antrop¨®logo del ocio junto al mar

El fot¨®grafo Txema Salvans (Barcelona, 1971) lleva 15 a?os trabajando en la cosa mediterr¨¢nea, desde Barcelona hasta Algeciras, pero en ninguna de sus im¨¢genes se ve el mar, porque a ¨¦l lo que le interesa es lo que ocurre fuera del agua; en la misma orilla o unos cuantos metros tierra adentro. Por eso instala su c¨¢mara de espaldas al agua para captar im¨¢genes de las personas que deciden pasar su tiemplo libre en la costa en escenarios surrealistas y grotescos. Desde una cementera a una petroqu¨ªmica, pasando por una piscin...

El fot¨®grafo Txema Salvans (Barcelona, 1971) lleva 15 a?os trabajando en la cosa mediterr¨¢nea, desde Barcelona hasta Algeciras, pero en ninguna de sus im¨¢genes se ve el mar, porque a ¨¦l lo que le interesa es lo que ocurre fuera del agua; en la misma orilla o unos cuantos metros tierra adentro. Por eso instala su c¨¢mara de espaldas al agua para captar im¨¢genes de las personas que deciden pasar su tiemplo libre en la costa en escenarios surrealistas y grotescos. Desde una cementera a una petroqu¨ªmica, pasando por una piscina encajonada entre paredes de ladrillos, en castillos inflables en medio de descampados, en abigarrados apartamentos en nuevas ciudades de vacaciones surgidas donde hace poco el l¨ªmite entre la tierra y el mar era virgen o en estructuras de hormig¨®n al lado de una base de submarinos del ej¨¦rcito.

Salvans act¨²a con su c¨¢mara como un antrop¨®logo de campo buscando captar comportamientos sociales vinculados con el ocio; sea en el Garraf, Oropesa de Mar, Torrevieja, Cartagena, Pulp¨ª, Algeciras o Gibraltar. Este extenso trabajo, realizado entre el a?o 2005 y 2020 y recorriendo unos 150.000 kil¨®metros, condensado en 49 fotograf¨ªas bajo el nombre de Perfect Day, puede verse en Foto Colectania de Barcelona desde este martes hasta el 21 de noviembre.

¡°No ense?ar el mar es clave para ampliar la sensaci¨®n de extra?eza y desolaci¨®n¡±, explica Salvans. Y lo consigue, porque no se puede entender que la pareja de j¨®venes que se besan amorosamente en la playa haya decidido pasar esos momentos de placer en un rinc¨®n tan inh¨®spito como una refiner¨ªa de petr¨®leo de Gibraltar-San Roque con sus amenazantes chimeneas. Produce tanta desolaci¨®n como el ver a una mujer que toma el sol en la azotea de un edificio junto a un bloque en construcci¨®n en el que la gr¨²a transporta por encima de la relajada mujer una enorme estructura. ¡°Nuestra existencia se enmarca entre un suceso altamente improbable que es nacer y otro suceso inevitable que es la muerte. En ese sentido, cada segundo de vida es un Perfect Day¡±, comenta el fot¨®grafo, ¡°pesimista¡± confeso que cree que ¡°la pregunta no es si la especie humana va a sobrevivir, que parece claro que si, sino en qu¨¦ condiciones¡±.

Lo dice junto a esta fotograf¨ªa de la mujer amenazada que realiz¨® despu¨¦s de entrar en la imprenta el libro con este material publicado en mayo de 2020 por la prestigiosa editorial Mack. Titulado tambi¨¦n Perfect Day, se agot¨® de forma r¨¢pida. ¡°Por eso es una muy buena oportunidad visitar la exposici¨®n¡±, asegura Pepe Font de Mora, director de Foto Colectania, durante la presentaci¨®n de la muestra realizada con la colaboraci¨®n de la Fundaci¨®n Banco Sabadell.

Para Salvans lo importante en sus fotograf¨ªas ¡°es el contexto¡±, esos ¡°escenarios dist¨®picos del mediterr¨¢neo espa?ol en los que las personas han decidido pasar su tiempo libre¡±. Pero en todos sus trabajos hay alg¨²n ser humano, ¡°para darle una dimensi¨®n tr¨¢gica. Me siento como un dramaturgo¡±, asegura. Salvans suele colocar su c¨¢mara anal¨®gica de gran formato, instalada en un tr¨ªpode sobre la furgoneta para tener una perspectiva superior de la escena, acorde con la est¨¦tica que persigue. ¡°La paradoja de esta manera de trabajar es que cuanto m¨¢s compleja es la liturgia que acompa?a al acto fotogr¨¢fico m¨¢s visible soy, pero m¨¢s desapercibido paso¡±, asegura.

Ser¨¢ por eso por lo que a la mayor¨ªa de las personas no les pide permiso para fotografiarlas. En referencia a la pareja de la foto que se besa asegura: ¡°Yo ya estaba all¨ª cuando ellos llegaron. Era evidente que estaba trabajando y a ellos no les molestaba mi presencia, as¨ª que los fotografi¨¦ sin pedir permiso. Si les hubiera pedido permiso no habr¨ªa hecho la foto que quer¨ªa hacer, sino la que el fotografiado propone, que es diferente¡±. Y a?ade: ¡°Tampoco nadie me ha dicho que no los fotograf¨ªe, si perciben que le hago fotos¡±.

¡°Empec¨¦ a trabajar en este proyecto del ocio de una manera intuitiva y poco a poco fui viendo que el tema era el ocio y el Mediterr¨¢neo, m¨¢s concretamente, c¨®mo la gente pasa su tiempo libre, porque creo que da mucha informaci¨®n de c¨®mo es nuestra sociedad¡±, explica Salvans.

Y viendo esas acequias con aguas turbias donde un joven pesca, las plataformas de cemento que esconde la naturaleza arrasada donde las familias deciden pasar un d¨ªa junto al mar o el c¨¦sped artificial donde se colocan las tumbonas, dan como resultado una sociedad que ha normalizado encontrar placer en lugares degradados y, de entrada, inh¨®spitos.

¡°Mis fotos pueden verse de forma individual, en la serie completa y en di¨¢logo con otras series mismas. Como si fuera un autor¡±. De hecho, estas im¨¢genes las hizo a la vez que otra de sus series: Waiting Game, su duro testimonio sobre la prostituci¨®n, en la que no pone el ¨¦nfasis en la actitud o en el lenguaje corporal, sino en la sensaci¨®n de espera como parte del drama de estas mujeres. Y s¨ª, s¨ª que se parecen.