La p¨¦rdida de pasajeros se ceba con el aeropuerto de Barcelona

El aeropuerto de Barcelona¡ªEl Prat no da con la f¨®rmula para recuperar la velocidad de crucero y dejar atr¨¢s las turbulencias causadas por la pandemia de la covid que ha paralizado el mundo. El tr¨¢fico a¨¦reo apenas remonta en el aeropuerto Josep Tarradellas y el aer¨®dromo catal¨¢n cerrar¨¢ el a?o con unas cifras a la baja.

Seg¨²n los datos publicados por Aena, el mes de noviembre confirm¨® que el Josep Tarradellas est¨¢ al frente de los aeropuertos nacionales que m¨¢s actividad han perdido, en comparaci¨®n con la ¨¦poca prepandemia. Los 2,3 millones de pasajeros del pen¨²ltimo mes del a?o son un 36,2% menos que los datos de noviembre de 2019. El frenazo es m¨¢s acusado que en Madrid-Barajas, donde se registr¨® un 35% menos de usuarios, y confirma que entre los quince aeropuertos espa?oles con m¨¢s traj¨ªn, ning¨²n otro cae tanto como El Prat. Seg¨²n los datos recogidos por Aena en toda su red nacional, la p¨¦rdida media de viajeros es del 26,7%, en comparaci¨®n con el mismo mes de hace dos a?os.

No se trata de una circunstancia puntual, sino que el retraso en la recuperaci¨®n que acumulan las pistas de Barcelona se observa con mayor claridad poniendo el foco en los datos acumulados de todo el a?o. Entre enero y noviembre, por sus terminales pasaron 16,6 millones de pasajeros, lo que supone un 66,1% menos que en 2019. Madrid est¨¢ un 63% por debajo, M¨¢laga un 57%, Valencia un 54,4%, Bilbao un 58,2% y Palma un 52,2%.

Entre los escasos aeropuertos que presentan peores datos que Barcelona se encuentran las dos instalaciones que quedan m¨¢s cercanas: Reus y Girona. El primero ha dado servicio este a?o a un 84,8% menos de viajeros que en 2019, mientras que por la infraestructura situada en t¨¦rmino de Vilob¨ª d¡¯Onyar ha sufrido un decrecimiento del 84,2%.

La directora del aeropuerto de Barcelona, Sonia Corrochano, pone de relieve que el estancamiento de la actividad responde a ¡°una mezcla de factores¡±. Corrochano argumenta que el largo radio est¨¢ lejos a¨²n de ofrecer el abanico de rutas que daba antes de la pandemia, porque de las 47 conexiones que hab¨ªa en 2019, actualmente est¨¢n operativas una treintena. Adem¨¢s, la incertidumbre acecha otras rutas que ten¨ªan peso espec¨ªfico en el volumen de pasajeros que despacha El Prat. Es el caso de los vuelos con Marruecos: ¡°estaban funcionando muy bien hasta que lleg¨® el cierre¡±, indica la directora. Alude a la decisi¨®n del gobierno marroqu¨ª de suspender todos los vuelos procedentes del extranjero para impedir la propagaci¨®n de la variante ¨®micron del coronavirus.

Un portavoz de Aena a?ade que, adem¨¢s, la tradicional programaci¨®n de ferias y congresos en la capital catalana ha quedado muy diezmada, lo que ha arrastrado a la baja todo el tr¨¢fico a¨¦reo que nutre a estos eventos. Con respecto a por qu¨¦ en Barcelona el impacto es mayor que en otros grandes aeropuertos de la red estatal, Aena justifica que Madrid-Barajas ha sufrido efectos similares que Barcelona, pero ha podido aprovechar el tr¨¢fico que reportan las conexiones con Latinoam¨¦rica.

El gestor aeroportuario argumenta que cada aeropuerto est¨¢ sujeto a unas caracter¨ªsticas propias, que condicionan su actividad. As¨ª, en el caso de los aeropuertos catalanes de Reus y Girona, las dos instalaciones han sufrido ¡°la dependencia¡± de aerol¨ªneas que pr¨¢cticamente monopolizan el tr¨¢fico. En el caso de Girona es Ryanair, y en Reus la operativa queda supeditada a lo que haga Jet2.

Sonia Corrochano se muestra reservada sobre la afectaci¨®n que pueda tener la sexta ola de la covid en el tr¨¢fico del aeropuerto de Barcelona. Se?ala que, por ahora, la afectaci¨®n m¨¢s notoria se produce en las ocupaciones de los vuelos. ¡°Son mucho m¨¢s bajas¡±, detalla. Un extremo que confirman desde Vueling. La aerol¨ªnea nacida el 2004 en Barcelona da servicio a casi un tercio de los viajeros que vuelan desde las pistas de El Prat. En noviembre de 2019 Vueling ofrec¨ªa 83 rutas, y actualmente son 75. De promedio, hace dos a?os eran 1.100 vuelos semanales, y actualmente se rozan los 750. La reducci¨®n de la oferta de destinos no es muy acusada, pero s¨ª se nota en las frecuencias de cada ruta y en el volumen de gente que viaja dentro de cada avi¨®n. Las ocupaciones ¡°no tienen nada que ver¡±, informan desde la compa?¨ªa.