Bricolaje a contrarreloj en el Mobile de la esperanza

La l¨ªnea 9 del Metro est¨¢ repleta de carteler¨ªa para que el visitante no se pierda. Los congresistas este a?o no tienen que recoger una acreditaci¨®n f¨ªsica. Todo funciona a trav¨¦s de una app. El recinto de Fira de Barcelona en Gran Via ya est¨¢ abierto para los acreditados la tarde de este domingo, la v¨ªspera de un Mobile World Congress que, pese a aspirar a apenas la mitad de los visitantes que antes de la pandemia, prev¨¦ recuperar su cariz internacional con 50.000 visitantes hasta el jueves. ¡°Ma?ana el sol volver¨¢ a brillar y las puertas volver¨¢n a abrirse¡±, ha asegurado el presidente de GSMA, John Hoffman. Seg¨²n el Servicio Meteorol¨®gico de Catalu?a ser¨¢ un d¨ªa bastante nublado en L¡¯Hospitalet, pero sea como sea el congreso se presenta como un halo de esperanza: tanto por su continuidad como para que Barcelona se mantenga como polo de atracci¨®n del turismo de negocios.

Las medidas sanitarias contin¨²an muy presentes. En la entrada, los vigilantes obligan a comprar una mascarilla FFP2 a quienes no la llevan y la organizaci¨®n ha pedido con antelaci¨®n los certificados covid a los asistentes. ¡°Algunos se quejan del precio [dos euros] y de por qu¨¦ no avisan, pero s¨ª avisan¡±, explica Artur Cuadrada, que vende los cubrebocas a las puertas del congreso. ¡°Tengo prisa¡±, espeta un visitante sin parar cuando se le pregunta por su participaci¨®n en el evento. Pide si puede pagar con American Express y se va r¨¢pido. Un empleado de Amazon Web Services que no quiere dar su nombre emplaza al servicio de prensa. Al final, accede a explicar que es su primera vez en Barcelona y que esta ma?ana ha visitado la Sagrada Familia. Un congresista de la reguladora de telecomunicaciones ARTP Senegal, Boubacar Kambel, cuenta asimismo con excitaci¨®n que ha aprovechado para visitar el Camp Nou.

En Fira Gran Via los congresistas pod¨ªan este domingo hacer tr¨¢mites como recoger la targeta T-Esdeveniment para usar el transporte p¨²blico (a¨²n de cart¨®n). M¨®vil en mano y mascarilla abajo por unos instantes, los visitantes pueden acceder tras superar el reconocimiento facial. Dentro del recinto impera una moqueta tapada a¨²n por una capa de pl¨¢stico. El Mobile huele a pintura, a nuevo. El zumbido de los aspiradores no para y los trabajos de montaje de ¨²ltima hora, con escaleras en todas partes y carteles sueltos, dan la idea de que todo est¨¢ por hacer. ¡°En una hora habremos terminado¡±, explica Elisabet, responsable de la empresa de montaje de estands h¨²ngara Octopus, en un espacio donde pr¨¢cticamente no hay nada. ¡°Lo hemos movido todo en camiones y los trabajadores han venido, algunos, en avi¨®n¡±, detalla.

¡°Conectividad desatada¡± es el lema del congreso. La red ha salvado negocios, pero el adjetivo elegido resulta antag¨®nico con la presencialidad, que pese a las predicciones optimistas ser¨¢ a¨²n comedida este a?o. La jefa de marketing de la compa?¨ªa Blacknut, Daphne Parot, exclama: ¡°?S¨ª, estamos muy emocionados!¡±, sobre la participaci¨®n en el evento. Su empresa, que participa en el Mobile en el pabell¨®n de Francia, es como ¡°un Netflix de los videojuegos¡± y explica que esperan reunirse estos d¨ªas con operadores de telefon¨ªa interesados en proporcionar su servicio, as¨ª como con posibles inversores para expandir su negocio, ya presente en 40 pa¨ªses. Vige Vijana, que ha llegado a Barcelona desde la India con su marido y su hija, explica desde el estand de la startup norteamericana Robin que es la primera vez que acude al evento. En el Hall 5 destaca la ausencia del pabell¨®n ruso, que GSMA vet¨® por el conflicto armado en Ucrania, mientras recupera a Ericsson y LG, que marcaron el goteo de cancelaciones en 2020 (cuando no hubo congreso) y se ausentaron en 2021, en una edici¨®n reducida.

Entre los halls de Fira destaca el traj¨ªn de furgonetas cargadas de plantas, como la del proveedor oficial Eix-Jardines. Una trabajadora de la empresa asegura que, cuando acabe el congreso, todas volver¨¢n al vivero.

Elena y Luc¨ªa, dos estudiantes que trabajar¨¢n como azafatas apuntan que, entradas en el oficio en plena pandemia, se han convertido en expertas de tomar la temperatura, suministrar gel hidroalcoh¨®lico y comprobar la ventilaci¨®n del recinto. En el estand de Huawei un grupo de jazz canta en directo la canci¨®n popularizada por Ella Fitzgerald y Louis Amstrong They can¡¯t take that away from me [No me lo pueden arrebatar]. Este lunes empieza el Mobile.