Barcelona planta cara a los bicitaxis: ¡°Son el agujero negro¡±
Hay 500 de estos veh¨ªculos registrados y mil m¨¢s sin control. El Ayuntamiento va a redactar un decreto municipal para restringir las zonas de circulaci¨®n
¡°Los bicitaxis no solo son un peligro, sino que est¨¢n gobernados por mafias¡±, se queja Nuria Escurriol, vecina de la Barceloneta. ¡°Van a velocidades que ponen en riesgo a clientes y peatones, trapichean con drogas y les he visto hasta ofrecer servicios de prostituci¨®n. Para colmo, est¨¢n cargando las bater¨ªas de las bicicletas en los pisos. Ya llevamos dos incendios uno de ellos con muertos¡±. Estos veh¨ªculos pedalean por las zonas tur¨ªsticas de la capital catalana desde marzo de 2003. Escurriol lleva a?os ¡°haciendo guardias¡± en la calle de Drassana para que evitar ciertos excesos, desde orines a trapicheos, a las puertas de su casa. ¡°No s¨¦ a qui¨¦n interesa este tipo de negocio, pero es peligros¨ªsimo¡±, advierte.
El primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni (PSC), ya ha anunciado la intenci¨®n del equipo de gobierno respecto a los bicitaxis: ¡°Prohibirlos¡±. Esta semana Collboni lo ha solicitado abiertamente a la Generalitat, que es quien tiene las competencias. Hasta que la Administraci¨®n catalana decida el futuro del bicitaxi, el Ayuntamiento se lo va a poner dif¨ªcil. ¡°En 2019 pens¨¢bamos que podr¨ªamos controlar este fen¨®meno pero es imposible. El bicitaxi es un agujero negro de la ilegalidad y la inseguridad. Hay que prohibirlo porque Barcelona no es Bombay¡±, a?ade el teniente de alcalde.
En la capital catalana hay medio millar de bicitaxis registrados y con la pegatina obligatoria que proporciona Barcelona de Serveis Municipals (B:SM). Seg¨²n los c¨¢lculos del Consistorio, hay otros mil bicitaxis sin ning¨²n tipo de control. ¡°La Generalitat tiene que prohibirlo pero hasta que no lo haga vamos a redactar un decreto municipal para restringir las zonas de circulaci¨®n. Adem¨¢s, vamos a ampliar los dep¨®sitos municipales y pretendemos poder retener estos veh¨ªculos hasta seis meses. Es una lucha muy similar a la que hemos ganado al top manta¡±, asegura el primer teniente de alcalde. El Ayuntamiento, adem¨¢s, har¨¢ inspecciones para perseguir los aparcamientos ilegales de estos veh¨ªculos y, sobre todo, controlar en qu¨¦ condiciones se efect¨²a el cargado de las bater¨ªas.
Julien Lepri compr¨® hace unos meses los 40 bicitaxis de la empresa Funky Cycle. Esta semana se ha encontrado con esta oposici¨®n frontal del Consistorio a su actividad. ¡°Yo lo que le pido al Ayuntamiento es que regule la actividad y haga que se aplique la ley. En realidad, no se puede estar en contra de un transporte como el nuestro que es ecol¨®gico y sostenible¡±, advierte Lepri. El empresario lamenta la situaci¨®n en la que se encuentra el sector y pide diferenciar los bicitaxis legales de los que no lo son. ¡°Proponemos que haya un carn¨¦ y una ITV para poder circular con bicitaxis. Hacemos tours de una hora por 60 euros donde ejercemos de gu¨ªas tur¨ªsticos pero topamos con bandas, que no hablan ni castellano, que se alquilan las bicicletas entre ellos, que revientan precios¡¡±, lamenta. Mucha de esa competencia compra en AliExpress las bicicletas por 800 euros, las trucan para que sean m¨¢s veloces y se realquilan entre ellos el veh¨ªculo, por 50 euros al d¨ªa. Acaban conduci¨¦ndolos exmanteros o j¨®venes sin papeles que pueden llegar a ganar ¡ªsin pagar aut¨®nomos ni seguros ni ninguna de las obligaciones de las empresas legales¡ª cerca de 150 euros al d¨ªa. ¡°Adem¨¢s, trapichean con drogas, con latas de cerveza y nos amenazan al resto. Mis compa?eros han llegado a ver cuchillos por acercarse al hotel W a recoger a clientes¡±, denuncia.
La empresa Pura Vida tiene seis bicitaxis. Su due?o, Erwin Triebels, defiende: ¡°El 50% de mis clientes son turistas con movilidad reducida que si no fuese por nosotros no podr¨ªan visitar la ciudad. Es cierto que hay bicitaxis que no se comportan y ponen en peligro a todos. Est¨¢n haciendo da?o al sector, pero las administraciones deber¨ªan diferenciarnos¡±. Trielbels advierte de que aquellos que cumplen la normativa son entre 40 y 100 bicitaxis de los 1.500 que operan en la ciudad.
173 euros por no tener la bici registrada o no tener seguro
Desde Colón hasta la escultura de la Cara de Barcelona, de Roy Lichtenstein, al principio de la Via Laietana, se podría llegar casi saltando de bicitaxi en bicitaxi. La tarde del jueves, los conductores, a desgana y adormilados en los asientos de los pasajeros, esperaban a clientes. Ninguno de estos chóferes sabía que el Ayuntamiento pretende prohibirlos. Desconfían cuando les preguntan si trabajan de forma legal o si realquilan vehículos. El regateo es continuo con los pasajeros en esta zona de Barcelona y hay conductores que están dispuestos a llevar a clientes —con síntomas de haber saciado su sed durante buena parte de la tarde— a la Barceloneta por cinco euros cada viajero (algunos llevan hasta a cuatro en asientos donde solo caben dos).
Cuando la Guardia Urbana hace controles a estos vehículos solicita el número de registro obligatorio y el seguro. Si no se tiene, o si el conductor es menor de edad, se requisa el bicitaxi y se lleva al depósito donde tendrán que abonar 173 euros de multa y 2,5 euros por cada hora.
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