La oposici¨®n avasalla a Pere Aragon¨¨s en el primer pleno del gobierno en minor¨ªa de ERC
Los republicanos pierden una primera votaci¨®n clave, la del plan estad¨ªstico, que hace una semana se hab¨ªa tramitado sin problemas
El nuevo gobierno monocolor de Pere Aragon¨¨s ha recibido este mi¨¦rcoles una primera muestra de lo que le puede suponer sobrevivir en el Parlament con el solitario apoyo de 33 de 135 diputados. Los siete grupos de la oposici¨®n avasallaron al president culp¨¢ndole de provocar ¡°incertidumbre¡± y de actuar con ¡°temeridad¡±, y acus¨¢ndole de no querer negociar ni forjar alianzas estables. Aragon¨¨s replic¨® en su defensa que espera emular a Pedro S¨¤nchez, capaz de aprobar los Presupuestos con el apoyo de 11 grupos diferentes. Las cuentas dar¨¢n la medida de la legislatura pero ERC ha empezado a sentir la soledad al no lograr aprobar la ley del plan estad¨ªstico que hasta hace una semana se hab¨ªa tramitado con placidez.
El plan de estad¨ªstica, promovido por el Ejecutivo, lo hab¨ªa elaborado Jaume Gir¨®, exconsejero de Econom¨ªa (Junts) y ha recabado a favor los 33 votos de ERC. El PSC y los comunes votaron en contra y Junts y la CUP se abstuvieron. La votaci¨®n ha sido un retrato de lo que le puede aguardar a los republicanos. En las filas de Junts se insiste que era un texto t¨¦cnicamente votable pero que carece de visi¨®n de Estado y que han perdido la confianza en Aragon¨¨s por no querer ¡°culminar el proceso de independencia¡±. A trav¨¦s de las redes sociales, Carles Puigdemont ha dado muestras de que el plant¨®n de Junts no ser¨¢ anecd¨®tico: ¡°principio de realidad: con 33 diputados no se puede gobernar un pa¨ªs de 7,7 millones de habitantes¡±. El PSC ha argumentado su voto en contra alegando que la ley tiene deficiencias y que no les hab¨ªan llamado para negociar. Los comunes alegan que votan en funci¨®n del contexto.
Esquerra ha encajado esa primera derrota, con cierto aire de castigo, con un enfado monumental. ¡°El proyecto se aprob¨® [en comisi¨®n] hace una semana con el voto a favor de todos y la abstenci¨®n de Vox. Se ha hecho solo partidismo¡±, ha lamentado la diputada republicana Raquel Sans. Por otra parte, la C¨¢mara ha rechazado las enmiendas a la totalidad de Vox al proyecto de modificaci¨®n de la ley audiovisual, propuesta por Junts, que ha desempolvado mientras el Govern tramita otro proyecto.
La soledad del grupo de Pere Aragon¨¨s se repetir¨¢ posiblemente en varias votaciones. Con todo, las cuentas ser¨¢n la gran batalla y Aragon¨¨s aprovech¨® este mi¨¦rcoles su comparecencia espec¨ªfica sobre la orientaci¨®n del nuevo Govern para pedir responsabilidad a los grupos. Se ha puesto como espejo a Pedro S¨¢nchez. ¡°Si esos grandes acuerdos se produjeron en Madrid, tambi¨¦n tiene que ser posible en Catalu?a¡±, ha aventurado. El ejemplo, sin embargo, de momento est¨¢ lejos de cumplirse. El president quiere que Junts vote las cuentas que elabor¨® Gir¨®, pero el bando posconvergente deja claro que ejercer¨¢ de oposici¨®n sin ahorrar aspereza. En el primer pleno tras la ruptura, Albert Batet, jefe de filas de Junts, le ha espetado a Aragon¨¨s que no ha cumplido los acuerdos y que ERC ejerce el mando en la Generalitat buscando ¡°la hegemon¨ªa del partido y no el inter¨¦s de la ciudadan¨ªa¡±. ¡°Ha elegido estar solo¡±, ha afirmado Batet. ¡°Ahora se entiende por qu¨¦ ni usted quer¨ªa ni nosotros pod¨ªamos seguir en este Govern¡±, ha dicho en alusi¨®n a que no mencion¨® ni una vez el objetivo de lograr la independencia.
El PSC ha insistido en tenderle la mano a ERC para arrancar acuerdos de gobierno pero su l¨ªder, Salvador Illa, ha elevado el tono de sus reproches al acusar a Aragon¨¨s de ¡°rozar la temeridad¡± porque rechaza su apoyo para poder sacar adelante los presupuestos. El jefe de la oposici¨®n le ha recordado al president que tiene tantos esca?os como ¨¦l y no ha ocultado su estupefacci¨®n de que ERC aspire ahora a recabar el apoyo de Junts tras su salida del Govern. Tras instar a Aragon¨¨s a ¡°sentarse y dialogar¡± sino quiere ir a elecciones, Illa ha recordado que entre ERC y PSC suman los suficientes votos (66) para cerrar el pacto presupuestario en dos d¨ªas. La petici¨®n de Illa ha molestado a los comunes, cuya l¨ªder, J¨¦ssica Albiach, ha puntualizado que la mayor¨ªa en el Parlament est¨¢ en los 68 diputados y no en 66.
La negociaci¨®n entre el PSOE y ERC de los Presupuestos Generales del Estado ha sobrevolado toda la sesi¨®n del Parlament. Illa ha elevado su tono justo cuando est¨¢ a punto de expirar el plazo para presentar enmiendas a la totalidad. Los republicanos a¨²n no revelan qu¨¦ har¨¢n e insisten en que haya avances en la ¡°desjudicializaci¨®n¡±, como la reforma del delito de sedici¨®n. El popular Alejandro Fern¨¢ndez, del PP, ha afirmado que las reticencias de a pactar los presupuestos con el PSC son solo una escenificaci¨®n y augura un cambio de cromos.
Aragon¨¨s ha puesto como principal urgencia de su nuevo Govern la atenci¨®n a la crisis derivada de la inflaci¨®n y la guerra en Ucrania, seguido de las cuatro revoluciones pactadas en su d¨ªa con Junts (verde, feminista, democr¨¢tica y social) y la ¡°resoluci¨®n del conflicto pol¨ªtico¡±. ¡°Nadie puede renunciar a aprobar medidas como estas¡±, ha dicho el president tras desgranar su plan de choque social (por ejemplo, la ayuda para la compra de material escolar de 100 euros por ni?o) y que depende de la aprobaci¨®n de los nuevos Presupuestos. El president no ha aclarado cuando piensa presentar las cuentas -¡±medida a medida, proyecto a proyecto¡±- y ha acusado a los socialistas de no querer abrir los ojos para resolver el conflicto pol¨ªtico (¡°No se puede hacer ver que la represi¨®n ni existe¡±) y a Junts que se ponga de perfil en la actual situaci¨®n social y adem¨¢s le responsabilice de la ruptura de la coalici¨®n. ¡°La mayor¨ªa existe y se expresar¨¢n en votaciones si se pone adelante el inter¨¦s de pa¨ªs y dejamos atr¨¢s los intereses de partido¡±, ha defendido.
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