China responde a los nuevos aranceles de Trump con m¨¢s impuestos a productos de EE UU

La guerra comercial entre China y Estados Unidos es ya un hecho. Ante la nueva subida de aranceles del 10% a productos chinos importados en el mercado de Estados Unidos decretada por Donald Trump y que ha entrado en vigor este martes, Pek¨ªn ha respondido de la misma manera que hace un mes: de forma inmediata, teledirigida contra sectores concretos y en m¨²ltiples frentes, pero sin hacer demasiado ruido. China impondr¨¢ a partir del 10 de marzo nuevos aranceles adicionales de hasta el 15% contra diversos productos del sector agroalimentario estadounidense; ha restringido las exportaciones de productos chinos a 15 empresas estadounidenses vinculadas a defensa y seguridad por su potencial doble uso civil y militar, y ha a?adido 10 nuevas empresas del pa¨ªs norteamericano a la lista de entidades no fiables (lo que permite a Pek¨ªn imponer medidas punitivas).

Los aranceles adicionales estadounidenses, que se suman a los que ya soportaban los productos chinos de forma previa ¨Dincluido el 10% que entr¨® en vigor el 4 de febrero¨D, ¡°violan las normas de la OMC y socavan el sistema multilateral de comercio¡±, ha afirmado este martes un portavoz del Ministerio de Comercio de China. Esta voz oficial ha denunciado, una vez m¨¢s, que las nuevas barreras comerciales se hayan impuesto por motivos relacionados con la entrada ilegal de fentanilo en Estados Unidos, un potente opi¨¢ceo sint¨¦tico que est¨¢ causando una verdadera epidemia. ¡°China est¨¢ muy descontenta con esto y se opone firmemente, y tomar¨¢ contramedidas para salvaguardar con firmeza sus propios derechos e intereses¡±, argumentaba el portavoz poco antes de que los ministerios correspondientes anunciaran la bater¨ªa de r¨¦plicas.

Los grav¨¢menes chinos, publicados poco despu¨¦s de la una de la tarde en China (medianoche en Estados Unidos: esto es, cuando arrancaba el d¨ªa 4 en este pa¨ªs), ser¨¢n del 15% adicional al pollo, el trigo, el ma¨ªz y el algod¨®n estadounidenses y del 10% adicional al sorgo, la soja, la carne de cerdo, la carne de vacuno, los productos de mar y de r¨ªo, las frutas, las verduras y los l¨¢cteos, seg¨²n ha anunciado el Ministerio de Finanzas chino en un comunicado.

Adem¨¢s, 15 empresas estadounidenses vinculadas a sectores tecnol¨®gicos, de defensa y seguridad han sido a?adidas a la lista de control de exportaciones de China por su potencial doble uso civil y militar ¡°con el fin de salvaguardar la seguridad y los intereses nacionales y cumplir con las obligaciones internacionales como la no proliferaci¨®n¡±, seg¨²n el comunicado del Ministerio de Comercio, que ser¨¢ el organismo encargado de autorizar de forma previa la exportaci¨®n de productos a estas entidades.

La lista de compa?¨ªas incluye a Leidos, dedicada a la aviaci¨®n y la investigaci¨®n biom¨¦dica; Gibbs & Cox, la mayor empresa independiente estadounidense de arquitectura naval e ingenier¨ªa marina; IP Video Market Info, centrada en la tecnolog¨ªa de seguridad f¨ªsica, videovigilancia, la rob¨®tica y la detecci¨®n de armas. Adem¨¢s, hay empresas de inteligencia artificial, como Shield Al y HavocAI, y fabricantes de drones como Skydio y Red Six Solution.

Otras 10 compa?¨ªas de Estados Unidos han sido incluidas en la lista de entidades no fiables de China por su implicaci¨®n en la venta de armas a Taiw¨¢n, la isla autogobernada que Pek¨ªn considera una parte irrenunciable de su territorio y a la que Washington apoya militarmente. Estas empresas no podr¨¢n realizar actividades de importaci¨®n ni exportaci¨®n con China ni nuevas inversiones en el gigante asi¨¢tico, seg¨²n el anuncio del Ministerio de Comercio.

Sobre Illumina Inc, una empresa estadounidense de biotecnolog¨ªa incluida en la lista de entidades no fiables hace un mes (en la primera r¨¦plica china contra los aranceles de Trump), Pek¨ªn ha especificado tambi¨¦n este martes que no podr¨¢ exportar a China sus secuenciadores gen¨¦ticos.

Las medidas chinas se suman a la respuesta de hace un mes, cuando Pek¨ªn anunci¨® grav¨¢menes adicionales de entre el 10% y el 15% a diferentes productos energ¨¦ticos, maquinaria agr¨ªcola y autom¨®viles de gran cilindrada; restricciones a la exportaci¨®n de varios productos relacionados con minerales cr¨ªticos clave en la producci¨®n de tecnolog¨ªa y armamento, adem¨¢s de una investigaci¨®n antimonopolio contra Google, que sigue abierta.

La nueva salva de Trump golpea a China en un momento inc¨®modo, justo coincidiendo con el arranque de uno de los eventos pol¨ªticos m¨¢s importantes del a?o, las llamadas Dos Sesiones, durante el cual se re¨²nen en Pek¨ªn la Asamblea Nacional Popular (el Parlamento chino) y la Conferencia Consultiva (un organismo asesor). En los pr¨®ximos d¨ªas se espera una intervenci¨®n del primer ministro chino, Li Qiang, en la que fijar¨¢ objetivos importantes para este 2025, como la cifra de crecimiento de la econom¨ªa y el presupuesto dedicado a defensa, y la celebraci¨®n de la ¨²nica rueda de prensa anual del ministro de Exteriores, Wang Yi (en la que, en cualquier caso, las preguntas son pactadas de antemano). Ambas, as¨ª como las comparecencias sin acceso a la prensa que tiene previstas el presidente del pa¨ªs, Xi Jinping, podr¨ªan ofrecer pistas de c¨®mo valora el liderazgo comunista esta nueva contienda.

En Pek¨ªn, alejada de la pol¨ªtica del tuit y el espect¨¢culo televisivo instalada en la Casa Blanca, apenas ha habido pronunciamientos oficiales sobre los zarpazos arancelarios, m¨¢s all¨¢ de los habituales portavoces. Al poco de la primera embestida tarifaria, Trump asegur¨® que ten¨ªa previsto hablar en los d¨ªas siguientes con su hom¨®logo chino. Pero hasta la fecha no se ha producido ning¨²n contacto oficial entre los m¨¢ximos l¨ªderes de la primera y la segunda potencia mundial para tratar de limar asperezas o alcanzar un acuerdo.

China s¨ª asegur¨® la semana pasada que su Ministerio de Comercio ha estado en contacto con sus contrapartes estadounidenses, y el ministro de Comercio, Wang Wentao, escribi¨® tambi¨¦n la semana pasada una carta a Jamieson Greer, nuevo representante comercial de Estados Unidos, en el que le felicitaba por el nombramiento y expresaba su preocupaci¨®n por la pol¨ªtica arancelaria de Washington.