El exjefe de investigaci¨®n de Mossos pone contra las cuerdas al exconsejero de Interior Miquel Buch por la escolta de Puigdemont

El intendente Antoni Rodr¨ªguez era, hasta que fue apartado de forma fulminante hace a?o y medio, jefe de investigaci¨®n de los Mossos d¡¯Esquadra. Como tal, lider¨® algunas de las causas m¨¢s sonadas contra dirigentes pol¨ªticos en Catalu?a: la expresidenta del Parlament Laura Borr¨¤s (condenada por trocear contratos para favorecer a un amigo) y el exconsejero de Interior Miquel Buch, que desde este mi¨¦rcoles se sienta en el banquillo de los acusados por nombrar asesor a un mosso que, en realidad, se dedic¨® presuntamente a escoltar al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont en B¨¦lgica. Arropado por sus familiares y por los partidos independentistas, el exconsejero de Junts se enfrenta a la Fiscal¨ªa (que le pide seis a?os de c¨¢rcel y 27 de inhabilitaci¨®n por malversaci¨®n y prevaricaci¨®n) y, tambi¨¦n, al colmillo del intendente, que en su declaraci¨®n como testigo le ha puesto contra las cuerdas.

En julio de 2018, tras la huida de Puigdemont a B¨¦lgica y la aplicaci¨®n del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n, el Departamento de Interior fich¨® al sargento de los Mossos d¡¯Esquadra Llu¨ªs Escol¨¤ como asesor de Interior. Estuvo en ese cargo de confianza hasta marzo de 2019 y en ese tiempo percibi¨® m¨¢s de 52.000 euros de las arcas p¨²blicas. El fichaje cumpli¨® todos los requisitos formales y fue legal, ha admitido el intendente Rodr¨ªguez. El nombramiento, sin embargo, fue una tapadera de la verdadera labor encomendada a Escol¨¤: proteger a Puigdemont en su huida a Waterloo (B¨¦lgica). El intendente ha admitido, a preguntas de la defensa del escolta, que no puede saber qu¨¦ hac¨ªa Escol¨¤ en cada momento en el extranjero, pero ha dado por hecho que aprovech¨® su cargo para ejercer de protector del expresident despu¨¦s de su huida de la justicia espa?ola. Como cooperador necesario en los delitos, el escolta afronta una petici¨®n algo inferior a la de Buch: cuatro a?os y medio de c¨¢rcel y 23 de inhabilitaci¨®n.

Buch ha llegado este mi¨¦rcoles al Palacio de Justicia de Barcelona arropado por representantes de su partido, Junts, y tambi¨¦n de Esquerra Republicana. El juicio ha arrancado con la declaraci¨®n, como testigos, de mossos que participaron en la investigaci¨®n (como Rodr¨ªguez) o que formaban parte del ¨¢rea de escoltas de la polic¨ªa catalana. A esa unidad hab¨ªa pertenecido, durante muchos a?os, el propio Escol¨¤. La vista oral tiene dos fechas clave: el viernes, cuando est¨¢ previsto que declare por videoconferencia y como testigo Puigdemont, y el pr¨®ximo 13 de julio, cuando ser¨¢ el turno de los dos acusados.

Injerencias pol¨ªticas

El exjefe de investigaci¨®n ha detallado que Escol¨¤ actuaba con ¡°enorme autonom¨ªa¡± en el cuerpo, que manten¨ªa una relaci¨®n de ¡°mucha confianza¡± con el expresidente catal¨¢n por su sinton¨ªa independentista, y que fue una de las personas que le ayud¨® a huir de Espa?a el 29 de octubre de 2017. Durante la etapa del 155, mientras estaba de permiso o de baja, Escol¨¤ ya hizo labores de escolta de Puigdemont que difund¨ªa a trav¨¦s de las redes sociales, lo que gener¨® una enorme ¡°incomodidad¡± en el seno de los Mossos d¡¯Esquadra, ha dicho el intendente. Esa misi¨®n se ¡°acentu¨® mucho¡± tras ser nombrado cargo de confianza por el Departamento de Interior, entonces dirigido por Buch.

Sobre el nombramiento, el exjefe de investigaci¨®n ha insistido en que ni ¨¦l ni su equipo hallaron irregularidades formales, aunque s¨ª ha destacado que el proceso se cerr¨® con extremada rapidez. Rodr¨ªguez ha contado, en l¨ªnea con la Fiscal¨ªa, que no consta que Escol¨¤ pasase por su supuesta oficina para ejercer de asesor ni que hiciera, como tal, ning¨²n tipo de gesti¨®n. Escol¨¤ se atribuye la elaboraci¨®n de 14 informes sobre seguridad, pero el intendente ha expresado ¡°serias dudas¡± sobre su autor¨ªa.

Rodr¨ªguez, que tras su destituci¨®n fue enviado como jefe de la comisar¨ªa de Rub¨ª (Barcelona), ha denunciado supuestas injerencias pol¨ªticas para lograr que Puigdemont gozara de protecci¨®n en el extranjero. Cuando el expresidente fue detenido en Alemania en marzo de 2018, el entonces director de Interior en Girona, Albert Ballesta ¡ªconsiderado pr¨®ximo a Puigdemont¡ª llam¨® al jefe de los Mossos, Ferran L¨®pez, para pedirle de forma ¡°vehemente¡± que se le concediera a Escol¨¤ una excedencia. L¨®pez se neg¨® a acceder a la petici¨®n.

Las defensas han insistido en la legalidad del proceso y han tratado de abrir fisuras en la investigaci¨®n de los Mossos, que consideran d¨¦bil. A preguntas de la abogada de Escol¨¤, Rodr¨ªguez ha admitido que no pod¨ªa saber qu¨¦ hac¨ªa Escol¨¤ ¡°cada minuto¡± en B¨¦lgica y, tampoco, si podr¨ªa haber desarrollado su tarea como asesor en materia de seguridad desde el extranjero.

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