A remolque de Colau

La semana pasada, el pleno del Ayuntamiento de Barcelona aprob¨®, a propuesta de Comuns, una moci¨®n en la que se acuerda ¡°interrumpir¡± las relaciones institucionales con el Gobierno de Israel ¡°hasta que haya un alto al fuego definitivo y se garantice el respeto a los derechos b¨¢sicos del pueblo palestino y el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas respecto al conflicto entre Israel y Palestina¡±. El texto rechaza y condena los ¡°ataques contra la poblaci¨®n civil¡± palestina e israel¨ª, reclama un alto al fuego ¡°permanente y definitivo¡±, el cese de la violencia contra la poblaci¨®n civil palestina de Cisjordania y la liberaci¨®n de los rehenes que se encuentren en manos de Ham¨¢s. El acuerdo tambi¨¦n recoge la reivindicaci¨®n del establecimiento de corredores humanitarios para ayudar en la poblaci¨®n de Gaza, y la exigencia de respeto del Derecho Internacional y Humanitario de Naciones Unidas. Finalmente, el documento aprobado propone la celebraci¨®n de una Cumbre de Paz y ofrece el bagaje de Barcelona ¡°como ciudad promotora de paz¡±.

Votaron la moci¨®n ¡ªadem¨¢s de Comuns, como es obvio¡ª, tambi¨¦n ERC y el PSC, despu¨¦s de una negociaci¨®n, que, por lo que se ha podido saber, ha pivotado en torno al verbo ¡°interrumpir¡±. En el texto original figuraba, en cambio, el verbo ¡°suspender¡±. En pol¨ªtica, los matices lo son todo. Aunque, en este caso, parecen bastante inapreciables las diferencias.

Puede parecer incluso una paradoja, pero no lo es: c¨®mo recordar¨¢n, en febrero, la todav¨ªa alcaldesa Ada Colau, hab¨ªa ¡°suspendido¡± ¡ªpor decreto de alcald¨ªa y dando traducci¨®n pol¨ªtica a una reivindicaci¨®n de una larga lista de entidades ciudadanas¡ª, las relaciones institucionales con Israel, incluyendo tambi¨¦n el hermanamiento con Tel Aviv. Jaume Collboni hab¨ªa criticado duramente la decisi¨®n, tild¨¢ndola de error grav¨ªsimo, e incluso argumentando su posici¨®n en las p¨¢ginas de este diario. En septiembre, ya como alcalde, hab¨ªa solemnemente retomado ¡ªtambi¨¦n con un decreto de alcald¨ªa¡ª, el hermanamiento con la ciudad israel¨ª, con una declaraci¨®n del comisionado de Relaciones Internacionales y Promoci¨®n de la Ciudad, Pau Solanilla. Ahora, si bien en la moci¨®n aprobada la semana pasada no se hace referencia a los hermanamientos y se cambia ¡°suspender¡± para ¡°interrumpir¡±, de hecho se trata de una vuelta a la posici¨®n que hab¨ªa impulsado el gobierno anterior, con un pronunciamiento institucional que censura el escaso respeto demostrado por Israel hacia los derechos humanos. El grupo del PSC del ayuntamiento ha invocado las muertes masivas en Gaza como argumento que justifica el cambio de posici¨®n que han experimentado respecto al tema.

Sea como fuere, el alcalde ha parecido ir doblemente a remolque del liderazgo de los Comuns y de Ada Colau por lo que ata?e a la necesidad que se escuche la voz del Ayuntamiento de Barcelona en las cuestiones internacionales. En su d¨ªa, el posicionamiento en contra de la suspensi¨®n derivaba en buena parte de la necesidad de distinguirse de Colau, y, ahora, el cambio de posici¨®n tambi¨¦n parece responder a la voluntad de no quedarse atr¨¢s en una actitud cr¨ªtica hacia el gobierno de Nethanyahu ¡ªliderada a nivel municipal por los Comuns¡ª, que el grueso de los actores pol¨ªticos de la izquierda ¡ªincluso de la misma familia pol¨ªtica del alcalde¡ª, parecen compartir.

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