El informe del Parlament sobre la covid en las residencias evita se?alar a culpables pero denuncia deficiencias en el sistema
Los familiares se concentrar¨¢n este mi¨¦rcoles ante la c¨¢mara catalana para protestar contra un estudio que consideran insuficiente
Hace casi cuatro a?os que el virus de la covid-19 irrumpi¨® en la sociedad catalana, y donde m¨¢s estragos caus¨® fue en las residencias de ancianos. Hasta junio de 2022, el departamento de Salut de la Generalitat cifr¨® en 4.566 los residentes que murieron en los centros por la covid desde el inicio de la pandemia, una cifra que los datos de Imserso aumentan hasta m¨¢s de 8.200 ¡ªcontando hasta enero de 2023 y tanto los que murieron en los centros co...
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Hace casi cuatro a?os que el virus de la covid-19 irrumpi¨® en la sociedad catalana, y donde m¨¢s estragos caus¨® fue en las residencias de ancianos. Hasta junio de 2022, el departamento de Salut de la Generalitat cifr¨® en 4.566 los residentes que murieron en los centros por la covid desde el inicio de la pandemia, una cifra que los datos de Imserso aumentan hasta m¨¢s de 8.200 ¡ªcontando hasta enero de 2023 y tanto los que murieron en los centros como en hospitales, as¨ª como los que fallecieron por s¨ªntomas compatibles con la covid sin que se confirmase la infecci¨®n¡ª. Casi un tercio de los muertos por covid en Catalu?a eran usuarios de residencias, seg¨²n la estimaci¨®n m¨¢s alta. La pandemia, pues, se ceb¨® en los m¨¢s mayores, y los familiares pidieron responsabilidades. Casi cuatro a?os despu¨¦s, este mi¨¦rcoles la comisi¨®n de Derechos Sociales en el Parlament debatir¨¢ y aprobar¨¢ las conclusiones a las que ha llegado el grupo de trabajo que se cre¨® para analizar el impacto de la covid en las residencias. Seg¨²n los familiares, las conclusiones llegan tarde y mal: el informe apunta a deficiencias en el sistema de salud, de los servicios sociales y de la inspecci¨®n, pero evita se?alar culpables. La asociaci¨®n de familiares Coordinadora 5+1 se concentrar¨¢ este mi¨¦rcoles ante la c¨¢mara catalana para protestar contra unas conclusiones que consideran insuficientes.
El informe del grupo de trabajo, que ha avanzado El Peri¨®dico y al que ha tenido acceso EL PA?S, llega tras un tortuoso camino. Durante la legislatura de Quim Torra, a¨²n con el impacto de la pandemia muy reciente, se cre¨® una comisi¨®n de investigaci¨®n en el Parlament, pero esta decay¨® sin haber dado resultados cuando se adelantaron las elecciones. Con la nueva legislatura, los grupos volvieron a pedir una comisi¨®n de investigaci¨®n, pero en noviembre de 2021 ERC, Junts y PSC votaron en contra y dijeron que era mejor un grupo de trabajo a puerta cerrada, lo que indign¨® a los familiares. El grupo ech¨® a andar en 2022, se han llevado a cabo diez sesiones y han intervenido expertos, entidades y representantes pol¨ªticos, pero a un ritmo lento que exasper¨® hasta a Amnist¨ªa Internacional, que exigi¨® celeridad en la exposici¨®n de las conclusiones.
Finalmente, las conclusiones se votar¨¢n este mi¨¦rcoles en la comisi¨®n de Derechos Sociales. El documento incluye las propuestas de los grupos y unas conclusiones comunes. Estas apuntan que la pandemia sorprendi¨® a un sistema que ya ten¨ªa debilidades demasiado grandes para hacer frente a una emergencia como esta. ¡°Muchos de los errores cometidos fueron consecuencia de la falta de informaci¨®n cient¨ªfica y del hecho de no disponer de estructuras preparadas y protocolos claros para actuar en una situaci¨®n de pandemia¡±, se?ala el informe sobre el primer momento de la irrupci¨®n de la covid.
Tambi¨¦n expone que ya desde el principio no hab¨ªa herramientas, entre otras cosas, porque la cartera de servicios sociales no se actualiza desde 2010, y porque se demostr¨® que hab¨ªa ¡°desconocimiento entre los sistemas de servicios sociales y de salud, y falta de recursos asistenciales sanitarios en las residencias¡±, es decir: los ¨¢mbitos social y sanitario funcionaban con sistemas de informaci¨®n distintos y sin bases de datos compartidas, y los m¨¦dicos y enfermeras de las residencias no ten¨ªan acceso a los expedientes cl¨ªnicos de los usuarios. A esto se le suma, como antecedentes, que las residencias catalanas tienen una creciente densidad de usuarios con altos grados de dependencia: actualmente, la media de edad es de 87 a?os, el 46% de los usuarios tiene demencia, el 51% tiene alta complejidad cl¨ªnica, y la mortalidad anual en las residencias catalanas se sit¨²a entorno al 20%, seg¨²n los datos del informe.
Derivaciones hospitalarias ¡°desiguales¡±
Uno de los puntos clave del informe es ver si los residentes recibieron un trato m¨¦dico adecuado, y si fueron derivados a los hospitales de la forma en que ten¨ªa que hacerse. ¡°Las decisiones [sobre las derivaciones] se tomaron siguiendo criterios m¨¦dicos [...] ahora bien, la tensi¨®n del sistema sanitario y la falta de coordinaci¨®n con el sector residencial provocaron un acceso desigual en los centros hospitalarios¡±, resume el informe, que tambi¨¦n destaca que los residentes que se quedaron en los centros fueron confinados en sus habitaciones, lo que conllev¨® ¡°consecuencias f¨ªsicas y psicol¨®gicas¡±. ¡°Hasta algunas residencias vulneraron el derecho de los familiares a la informaci¨®n sobre el estado de salud y la evoluci¨®n de los residentes¡±, a?ade.
El informe pone muy en valor los esfuerzos del personal de las residencias, pero se?ala problemas estructurales: falta de titulaci¨®n adecuada y adaptada, sueldos bajos, largas jornadas laborales, alta rotaci¨®n de personal y una ratio desequilibrada que no se actualiza desde 2011. El grupo de trabajo asesta una dura cr¨ªtica contra todos los gobiernos: ¡°Es contradictorio querer reconocer el sector residencial como un sector esencial al mismo tiempo que hay una precariedad sist¨¦mica que los gobiernos han mantenido durante la ¨²ltima d¨¦cada¡±. ¡°El sector residencial no se tiene en consideraci¨®n, est¨¢ poco profesionalizado y mal retribuido¡±, a?ade, a la vez que critica que el sistema ¡°sufre una infrafinanciaci¨®n cr¨®nica¡±, entre otras cosas porque el Estado solo aporta el 16% de los fondos cuando la ley de Dependencia dice que deber¨ªa aportar la mitad. El informe tambi¨¦n expone que los servicios de inspecci¨®n ¡°son deficientes¡±, porque no act¨²an de oficio, hay falta de personal y los usuarios no denuncian porque no conocen sus derechos.
El grupo de trabajo termina proponiendo cambios, que el Govern defiende que ya ha empezado a aplicar. Entre las propuestas, est¨¢ la de integrar la visi¨®n sanitaria con la social, apostar por un modelo m¨¢s domiciliario y comunitario (retrasando la llegada de los usuarios a las residencias), fomentar la colaboraci¨®n p¨²blico-privada con una financiaci¨®n suficiente y aumentar las dotaciones de inspecci¨®n. El grupo de trabajo insta a crear, en un plazo de seis meses, una mesa residencial para promover y dise?ar este nuevo modelo.
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