Barcelona avanza en su campa?a contra los clubs cann¨¢bicos y ordena los 30 primeros cierres

El teniente de alcalde de seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha reiterado durante meses su objetivo de clausurar los 212 clubs cann¨¢bicos de la ciudad. Un compromiso que ha empezado a materializarse: el pasado viernes, 30 de estas asociaciones recibieron notificaciones oblig¨¢ndoles a clausurar la actividad. El Consistorio mantiene la orden de cierre tras constatar que en ellos se consumen y adquieren sustancias estupefacientes. Tras la notificaci¨®n, las asociaciones tienen un plazo de diez d¨ªas para presentar recursos pero, fuentes del Consistorio, aseguran que, como m¨¢ximo, en septiembre estas 30 asociaciones estar¨¢n clausuradas.

La relaci¨®n de amor-odio entre Barcelona y los clubs cann¨¢bicos dura d¨¦cadas. En 1991 se fund¨® en Barcelona la primera cann¨¢bica de Espa?a. No acab¨® bien y la junta fue condenada por un delito contra la salud p¨²blica. A¨²n as¨ª, sirvi¨® de semilla y los clubs comenzaron a proliferar en 2011. En 2015, el gobierno de Xavier Trias present¨® una normativa para poner freno a estas asociaciones. A las pocas semanas, sin aprobar la ordenanza, perdi¨® las elecciones. En 2016 el equipo de Ada Colau cre¨® una nueva ordenanza que establec¨ªa distancias m¨ªnimas -de entre 100 y 150 metros- entre clubs cann¨¢bicos, parques infantiles y escuelas. En junio de 2017 el Parlament aprob¨® una ley que marcaba que los clubs no pod¨ªan tener ¨¢nimo de lucro, los socios deb¨ªan ser mayores de edad y para apuntarse a un club deb¨ªan tener el amparo de otro socio. Adem¨¢s, se limitaba a un m¨¢ximo de 150 los kilos la marihuana que pod¨ªa cultivar cada asociaci¨®n y cada usuario pod¨ªa retirar, solo, 60 gramos de hierba al mes. En septiembre de 2018 el Tribunal Constitucional anulaba la ley catalana destacando que la marihuana es una droga y la ¨²nica administraci¨®n que puede legislar es el Gobierno central. En julio de 2021, el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a anulaba la ordenanza de Colau y prohib¨ªa ¡°promover el consumo, la venta y el cultivo¡± en estos espacios. Las dos sentencias sirvieron para que Batlle pusiera en su punto de mira estas asociaciones. El teniente de alcalde orden¨® a la Guardia Urbana ejercer presi¨®n policial para que las cann¨¢bicas se limitaran a ¡°informar y asesorar¡± pero se abstuvieran de permitir el consumo de marihuana en estos establecimientos y, mucho menos, la venta.

De los 212 clubs cann¨¢bicos de la ciudad la polic¨ªa municipal detect¨®, a finales de 2023, 57 que podr¨ªan incumplir con las sentencias. La Urbana se limit¨® a aumentar la presi¨®n sobre estos clubs. Revisaron las instalaciones, comprobaron las extracciones de humos, normativa de incendios¡­. A la vez, se ampliaron los dispositivos de vigilancia interceptando a los socios y comprobando si compraban marihuana dentro de los locales, si la consum¨ªan tambi¨¦n, si eran socios reales o no¡­ Al final, estos operativos sirvieron para confeccionar los expedientes de clausura de 30 clubs, tal y como adelant¨® este martes elDiario.es.. Fuentes de la Guardia Urbana aseguran que, pese a que se tarda meses en clausurar, de este modo, los clubs cann¨¢bicos es m¨¢s f¨¢cil que por la v¨ªa penal ya que no se depende de autorizaciones judiciales y de grandes operativos policiales.

Ahora las 30 cann¨¢bicas afectadas tiene diez d¨ªas para alegar un cierre que puede ser definitivo o temporal (entre seis meses y dos a?os). Eric Asensio de la Federaci¨®n de Asociaciones de C¨¢nnabis de Catalu?a (CATFAC) aseguraba este martes a EL PA?S que su entidad tiene conocimiento de seis ¨®rdenes de clausura en clubs de distritos de Ciutat Vella y Sant Mart¨ª. El Ayuntamiento asegura que son 30 en toda la ciudad. ¡°Lo que est¨¢ haciendo el Consitorio es una lectura interesada para la que no tiene competencias. Si acaban con asociaciones por est¨¢ v¨ªa recurriremos en el contencioso administrativo¡±, defiende Asensio. La CATFAC tampoco teme la v¨ªa penal ya que mantiene que los socios de los clubs realizan un ¡°consumo compartido¡± seg¨²n alega Asensio.

Uno de los objetivos que se marc¨® Batlle al principio de mandato era el de acabar con los 212 clubs de la ciudad. Si, finalmente, clausura los 30 notificados la Urbana se centrar¨¢ en realizar los mismos operativos en los 182 restantes.

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