JM Blay: ¡°El talento creativo que hay en Valencia es atronador¡±
El trabajo de este creador est¨¢ detr¨¢s de los visuales de campa?as internacionales de publicidad. Su obra ha formado parte de proyectos de cine como ¡®El Hobbit¡¯ y plataformas como Netflix
El 4 de mayo de 2011, el Toronto Underground Cinema conmemor¨® por primera vez una efem¨¦ride que no se entiende sin el efecto de internet sobre la comunidad fan de Star Wars: la fecha anual en que, por similitud fon¨¦tica, se celebra la existencia de la saga gal¨¢ctica y su lema ¡°Be the force with you¡± (que la fuerza te acompa?e); ¡°May the 4th be with you¡±. Curiosamente, aquel mismo d¨ªa, en una ciudad ¡°muy muy lejana¡±, ¡°un mal alumno¡± que repiti¨® dos veces 3? de BUP y una m¨¢s COU, se doctoraba en la Universitat Polit¨¨cnica de Val¨¨ncia en Dise?o y Motion Graphics. JM Blay (47 a?os) le da importancia a esta coincidencia porque, mucho tiempo despu¨¦s, ¨¦l mismo ha acabado trabajando para esas megaproducciones para la gran pantalla que tanto admir¨® de peque?o. Su trabajo forma parte de sinfon¨ªas visuales tan complejas como El Hobbit o Dragones y Mazmorras, pero tambi¨¦n forma parte de t¨ªtulos de cr¨¦dito y animaciones de BBC a Netflix.
Precisamente, dedic¨® su tesis doctoral al trabajo del tit¨¢n moderno de los t¨ªtulos de cr¨¦dito, Kyle Cooper (Se7en, Misi¨®n: Imposible, Donnie Brasco). Este le aval¨® y acab¨® invit¨¢ndole a visitar su estudio en Los Angeles, Estados Unidos. ¡°Ped¨ª un cr¨¦dito para el viaje y pas¨¦ un mes all¨ª. Es un tipo peculiar, al que tengo much¨ªsimo cari?o, y su apoyo me influy¨® mucho. Lo ten¨ªa claro, pero me convenc¨ª de que el mundo es un lugar muy grande como para tener clientes ¨²nicamente en Espa?a¡±. Para entonces, Blay ten¨ªa su propia empresa con cuatro trabajadores, pero la cerr¨® y se fue a Reino Unido. En esta ¨²ltima d¨¦cada ha trabajado en equipos de The Mill, MPC o Nexus, gigantes de las soluciones visuales para cine, televisi¨®n y publicidad. Y tambi¨¦n lo ha hecho para Universal, Paramount, Warner Bros, Marvel o marcas como Sony, Adidas o Reebok, destacando esta ¨²ltima por asumir la direcci¨®n creativa de una campa?a global.
¡°El arte siempre ha estado presente en mi vida. Mi padre, mi abuelo y generaciones anteriores se dedicaron a la pintura de taller y la restauraci¨®n¡±. Criado entre el barrio de la Sa?dia y Guadalajara, M¨¦xico, donde pas¨® seis a?os entre su infancia y adolescencia, Blay recuerda c¨®mo un profesor de su instituto le invit¨® a que dejara los estudios: ¡°Me llegaron a decir que estaba ocupando una plaza all¨ª. Despu¨¦s, he sido profesor en universidades, en la Escape Studios Pearson College de Londres, y no s¨¦ cu¨¢ntas conferencias y masterclass habr¨¦ dado. No le tengo rencor a nadie porque s¨¦ que mi camino ten¨ªa que ser as¨ª, completamente aleatorio. Al final, acab¨¦ estudiando hasta el doctorado y porque ya no pod¨ªa estudiar m¨¢s. Es lo m¨¢s importante que puede hacer cualquiera, no solo un joven o artista. Eso s¨ª, sin endeudarse, como en Estados Unidos. Mi sector est¨¢ lleno de gente prestigiosa y car¨ªsima que no tiene ni la EGB¡±.
Estados Unidos y Reino Unido son sus dos principales mercados desde que regres¨® a Valencia para fundar un estudio ¡°unipersonal; Blay Studio¡±. ¡°En ambos pa¨ªses he conocido a aut¨¦nticos referentes de la industria que no tienen oficina. Viven en su casa, a las afueras de Los Angeles o de Londres, trabajan en remoto y nadie lo sabe. Cuando tuve el suficiente n¨²mero de proyectos, antes del confinamiento, ya me hab¨ªa vuelto a mi ciudad para trabajar as¨ª. Y lo cierto es que no es la ¨²nica raz¨®n, porque el talento y la capacidad creativa que hay en Valencia es atronadora. A veces pienso que es el secreto mejor guardado, porque viviendo en Londres y socializando durante a?os no me he encontrado tantas veces con gente que diga, c¨®mo puede ser que el trabajo de esta persona no sea m¨¢s conocido. En Valencia vivo en un estado de admiraci¨®n constante¡±.
Ese estado tambi¨¦n le asalta a partir de la explosi¨®n de herramientas de inteligencia artificial en su sector a las que est¨¢ dedicando ¡°horas de entrenamiento¡±. ¡°Doy gracias porque este momento me haya pillado en activo, porque tengo la sensaci¨®n de que va a cambiar el mundo como lo cambi¨® internet. Y haciendo esa analog¨ªa, estamos en 1999. No se han arruinado las puntocom de esta generaci¨®n y queda todo un ciclo que vivir, pero esto ya no hay quien lo pare y, al igual que la red ha cambiado de la banca a las relaciones personales, la IA va a cambiar toda nuestra experiencia vital, especialmente la visual, la virtual y las variables del arte tal y como no podemos imaginar¡±.
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