Carmen, nieta del rector Peset, fusilado en 1941: ¡°La ley de Concordia es una infamia¡±
El Gobierno reconoce la ilegalidad de las condenadas de 13 represaliados del franquismo. El ministro ?ngel V¨ªctor Torres se ofrece a negociar con el Consell la norma de memoria tras la salida de Vox
Su abuelo fue Juan Peset Aleixandre, reconocido m¨¦dico y pol¨ªtico que lleg¨® a ser rector de la Universitat de Val¨¨ncia. Fue fusilado en 1941 por republicano. Con la llegada de la democracia, el eminente epidemi¨®logo dio nombre a una avenida, a un hospital y a un colegio mayor en Valencia. Y este jueves, en el 88 aniversario del golpe de Estado franquista, el Gobierno reconoci¨® de manera expresa la ilegalidad de su condena, junto a las de otros 12 represaliados que no tuvieron la misma proyecci¨®n p¨²blica, en un homenaje presidido por el ministro de Memoria Democr¨¢tica, ?ngel V¨ªctor Torres, acompa?ado por la ministra de Ciencia, Diana Morant, y la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernab¨¦, todos ellos socialistas. No hubo representantes de la Generalitat valenciana, si bien el presidente, Carlos Maz¨®n, del PP, fue invitado al acto celebrado en la Fundaci¨®n Bancaixa, seg¨²n confirmaron los organizadores.
Carmen Peset, nieta del rector fusilado, se mostr¨® agradecida por el reconocimiento a ¡°tanto sacrificio familiar¡± y a ¡°una injusticia total y social¡± como fue el fusilamiento de su abuelo y el silencio que se impuso sobre los represaliados durante 40 a?os de dictadura: ¡°Ninguno se merec¨ªa acabar como acabaron, ni el sufrimiento de las familias y el silencio, que ha sido lo peor, durante tres generaciones¡±. Por eso, critic¨® sin ambages la nueva Ley de Concordia, aprobada por el PP y Vox en las Cortes valencianas el pasado jueves, horas antes de que la ultraderecha rompiera sus pactos auton¨®micos de gobierno con los populares. Calific¨® la norma de ¡°infamia¡±.
En t¨¦rminos similares se expres¨® tambi¨¦n Carmen Contreras, nieta de Juan Manuel Contreras Garc¨ªa, que fue concejal en Godella apenas 20 d¨ªas durante la Rep¨²blica y fusilado por ello en 1940, tambi¨¦n en el llamado ¡°pared¨®n de Espa?a¡±, en Paterna, donde murieron 2.238 personas en la posguerra. El pasado viernes le confirmaron la identificaci¨®n de los restos exhumados de su abuelo que pronto ser¨¢n enterrados junto a los de su abuela, de la que recuerda c¨®mo de ni?a la llevaba a visitar la fosa com¨²n (la 114) del cementerio de Paterna. Considera que la norma que deroga la ley auton¨®mica de Memoria Democr¨¢tica es un ¡°batiburrillo¡± en el que se mezclan todo tipo de v¨ªctimas.
En el acto del jueves, el Gobierno entreg¨® una serie de reconocimientos en los que se declaran ilegales e ileg¨ªtimos tribunales, jurados, condenas, sanciones y resoluciones contra estos 13 represaliados, cuyas familias participaron en el homenaje: Vicente Miguel Carceller, director de la revista La Traca; Carlos G¨®mez Cabrera, dibujante de La Traca; Consuelo Galvis Perucho, quien estaba encarcelada cuando fusilaron a dos de sus tres hijos; Juan ?lvarez Madrid, jornalero afiliado a la CNT; Ram¨®n Darijo Castillo, trabajador afiliado a la CNT; Jos¨¦ Celda Beneyto, labrador; Julio Gim¨¦nez Jord¨¢n, periodista y presidente de una asociaci¨®n de prensa; Gonzalo Tejero Langarita, polic¨ªa municipal de Valencia; Pascual Blasco Marco, fundador de la UGT en su pueblo; Doroteo Coronado Serrano, familiar del guerrillero Basiliso Serrano, y el ferroviario D¨¢maso Cabanillas Roso, adem¨¢s de los ya mencionados Juan Peset Aleixandre y Juan Manuel Contreras Garc¨ªa,
¡°Fueron humilladas, maltratadas y asesinadas por defender la libertad y el orden constitucional¡±, afirm¨® el ministro de Memoria Democr¨¢tica. Torres explic¨® que las declaraciones concedidas, en virtud de la Ley de Memoria Democr¨¢tica, cumplen con el derecho a conocer la verdad de lo que pas¨®, al reconocimiento y a la reparaci¨®n de personas y familias que vivieron d¨¦cadas silenciadas.
Insisti¨® en su compromiso de seguir desarrollando y potenciar la Ley de Memoria Democr¨¢tica y ha invitado a las comunidades aut¨®nomas del PP que impulsan leyes de ¡°concordia¡± a negociar con el Gobierno su contenido ¡°para que realmente sean leyes que promuevan la reparaci¨®n, la verdad y la justicia¡±. En este sentido, el ministro indic¨® que se puede aprovechar que la ley valenciana a¨²n no se ha publicado (al menos, hasta este jueves), as¨ª como la salida de Vox, para pactar su contenido y evitar recurrirla al Tribunal Constitucional.
Reparaci¨®n
Torres advirti¨® que ¡°no es aceptable¡± que esas leyes igualen periodos hist¨®ricos democr¨¢ticos con la dictadura, ¡°como tampoco es admisible no condenar expresamente el franquismo¡±. ¡°Esas leyes tampoco pueden obstaculizar la labor de las entidades memorialistas encargadas de la exhumaci¨®n, identificaci¨®n y reparaci¨®n de personas represaliadas que siguen en fosas comunes y cunetas¡±, a?adi¨®.
Si no se paralizan esas leyes, reiter¨® que hay un procedimiento reglado, a trav¨¦s del art¨ªculo 33.2 de la Ley Org¨¢nica del Tribunal Constitucional, que ser¨¢ activado para abrir un periodo de di¨¢logo con la Comunitat Valenciana. ¡°Esperamos que lo acepten. El PP, tras haber roto la ultraderecha su pacto de gobierno dispone ahora de una excelente oportunidad para reconsiderar su posici¨®n y demostrar que est¨¢ del lado de los dem¨®cratas y de los derechos humanos¡±.
Diana Morant, por su parte, defendi¨® la necesidad de ¡°honrar la memoria de quienes perdieron la vida por creer en algo tan elemental como la convivencia y por defender un sue?o que hoy nos parece normal y cotidiano: vivir en una sociedad democr¨¢tica, en una Espa?a moderna, plural, diversa y solidaria¡±.
En nombre de los familiares represaliados habl¨® Mat¨ªas Alonso: ¡°Hoy saldamos una deuda heredada de nuestras abuelas, que nos transmitieron la preocupaci¨®n de sus maridos porque sus hijos y nietos no nos avergonz¨¢ramos, porque ellos murieron inocentes. Con esa petici¨®n acaban las cartas escritas minutos antes de ser fusilados¡±. Seg¨²n expuso, son certificaciones que se otorgan a ¡°hombres v¨ªctimas de fusilamientos y represiones; hombres que iban al pelot¨®n o a la celda, dejando fuera, muertos en vida, mujeres e hijos a quienes se les derrumbaban los cimientos del edificio familiar¡±. ¡°Estos reconocimientos son tambi¨¦n para aquellas mujeres que quedaron solas en la vida a cargo de unos hijos a los que tambi¨¦n mataron su ni?ez¡±, subray¨®, tras recordar emocionado el caso de su abuela Dolores.
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