¡°La justicia es el patito feo de la administraci¨®n¡±

Jos¨¦ Mar¨ªa Alonso (Madrid, 66 a?os) lleva ya dos a?os al frente del Colegio de Abogados de Madrid (76.359 inscritos, de los que 42.408 son ejercientes). Es la instituci¨®n m¨¢s antigua ¡ªdata del siglo XVI¡ª y con mayor n¨²mero de colegiados de toda Europa. Este letrado, especializado en arbitraje y mediaci¨®n, ha trabajado en grandes despachos como Garrigues y Baker & McKenzie.

Pregunta. ?Cu¨¢l es el balance de estos dos a?os?

Respuesta. Ten¨ªamos un programa muy ambicioso y creo que lo hemos cumplido al 70%. En los tres a?os que nos queda, desarrollaremos el 30% de lo que nos queda y lo que vaya surgiendo.

P. ?Qu¨¦ queda en ese 30%?

R. B¨¢sicamente, que el ¨¢rea de defensa de la abogac¨ªa, el que presa atenci¨®n de los abogados en los juzgados o en las comisar¨ªas, les tutele a¨²n m¨¢s. Se siguen dando situaciones en las que hay falta de respeto, de puntualidad y de consideraci¨®n hacia los abogados y el derecho de defensa. Un problema con el que no cont¨¢bamos era el retraso en la informatizaci¨®n del colegio y el fracaso de IBM. Tambi¨¦n quiero que los despachos m¨¢s grandes participen m¨¢s en el colegio y ayuden a los colegiados que tienen menos recursos.

P. ?C¨®mo encontr¨® el colegio?

R. Con una organizaci¨®n muy deficiente, con 19 direcciones, algunas de ellas unipersonales, por lo que hubo que reorganizar el organigrama. Aunque siempre hay resistencia al cambio, est¨¢n funcionando adecuadamente. Otro problema ha sido del IBM, en el que hemos tenido que resolver el contrato, despu¨¦s de habernos gastado casi siete millones de euros.

P. ?C¨®mo est¨¢ el turno de oficio?

R. Un abogado del turno de oficio est¨¢ mal, porque tiene que prestar un servicio p¨²blico. Yo siempre digo que prestan un servicio p¨²blico similar, eso s¨ª guardando las distancias necesarias, a la sanidad p¨²blica. Est¨¢ asistiendo a un ciudadano que tiene en riesgo su libertad y los pocos recursos que tiene. Por ello, la ciudadan¨ªa y los poderes p¨²blicos deber¨ªan darle la importancia capital que tiene. A veces se ven obligados a atender a clientes que ellos no han elegido y en condiciones no muy adecuadas, como comisar¨ªas o juzgados. Y adem¨¢s est¨¢n muy mal pagados.

P. Pero el turno de oficio siempre ha estado desprestigiado.

R. La calidad que presta un abogado del turno de oficio es igual o mejor que la que pueda dar un abogado contratado por el cliente.

P. Encima con tarifas de 2003.

R. El baremo se fij¨® ese a?o y solo ha habido peque?as modificaciones. Esas minutas se aplican en todos los juzgados de la regi¨®n, salvo los ¨®rganos centrales (Audiencia Nacional, Tribunal Supremo y Tribunal Constitucional). En estos a?os, ning¨²n gobierno regional los ha actualizado.

P. ?Cu¨¢nto se deber¨ªa incrementar ese baremo para que tuvieran precios de mercado?

R. Con que solo se aplicara la inflaci¨®n, creo que los baremos deber¨ªan duplicarse. Desde que soy decano, la relaci¨®n con la Comunidad de Madrid ha sido excelente. Hemos conseguido que los cobros sean mensuales.

P. ?Y con el Ministerio de Justicia?

R. Hasta ahora no ha sido buena, pero espero que con el nuevo ministro sea totalmente diferente y que todos los problemas que hemos tenido hasta ahora se puedan solucionar.

P. ?Por qu¨¦ no se consigue que aumenten los baremos?

R. Siempre dicen que no hay presupuesto, pero yo tengo la sensaci¨®n de que la justicia es el patito feo de la Administraci¨®n. Los pol¨ªticos piensan que invertir en justicia no da votos.

P. ?Funciona mal la justicia?

R. Eso no es cierto. Hay jueces que funcionan muy bien, que son la mayor¨ªa, y otros que funcionan mal. Y esto hay que decirlo, que determinado juez de tal juzgado no funciona. Y se tiene que saber. Para ello vamos a sacar en breve el Bar¨®metro de la Justicia.

P. Otro grave problema en Madrid es el de la dispersi¨®n de las sedes judiciales.

R. Desde luego. La Comunidad de Madrid nos ha dicho que su idea es retomar la idea de la Ciudad de la Justicia, pero que est¨¢n pendientes de una sentencia del Tribunal Supremo. S¨ª se ha producido cierta unificaci¨®n de juzgados, como el llevar los de primera instancia a Rosario Pino, que hasta ahora est¨¢n por la ciudad. Tambi¨¦n se cre¨® el n¨²cleo penal en la calle de Albarrac¨ªn.

P. Pero se adolece de esa Ciudad.

R. Ser¨ªa la gran soluci¨®n.

P. ?Pasa la abogac¨ªa por un buen momento, porque en muchos sectores est¨¢ denostado?

R. Cierto, el abogado en Espa?a no tiene la posici¨®n que merece esta profesi¨®n y de la que goza en otros pa¨ªses como en Estados Unidos, Inglaterra o en Latinoam¨¦rica. El abogado es un pilar de la sociedad y tiene que ser reconocido y respetado de manera adecuada. Es uno de mis grandes objetivos y estamos en ello.

P. ?C¨®mo se consigue cambiar esa percepci¨®n de los abogados?

R. Primero, estando presente en todas las instituciones y relacion¨¢ndose con la sociedad civil. Luego posicion¨¢ndonos ante situaciones que se est¨¢n produciendo en Espa?a en estos momentos, con hechos en los que se saltan flagrantemente la ley y las sentencias judiciales.

P. ?Cu¨¢les son esas situaciones?

R. Por ejemplo, Catalu?a. Que aqu¨ª se dicte una sentencia y que no se cumpla o que se est¨¦ todo el d¨ªa vulnerando el ordenamiento jur¨ªdico, me parece inadmisible.

P. ?Eso no le enfrenta con sus colegas de Barcelona?

R. Para nada. Creo que la mejor manera de solucionar el problema catal¨¢n es a trav¨¦s de la sociedad civil.