Cuando Jos¨¦ Merc¨¦ llenaba de aire la UCI del Hospital 12 de Octubre
La doctora Trasmonte asegura que las videollamadas ayudan a mejorar la condici¨®n an¨ªmica de los pacientes, y que los beneficios tambi¨¦n se trasladan a las familias
Aire, aire, pasa, pasa, que tengas la puerta abierta la alegr¨ªa pa¡¯ la casa. Esta letra del cantaor Jos¨¦ Merc¨¦ sonaba en el Hospital 12 de Octubre porque la doctora Victoria Trasmonte se la pon¨ªa a Juan Pedro Herranz, de 62 a?os, cuando estuvo ingresado durante 55 d¨ªas en cuidados intensivos por coronavirus. Ana Rubio, su mujer, confiesa que ha necesitado pastillas para dormir y que ha perdido 10 kilos. El ¨²nico momento en el que pod¨ªa comer era tr...
Aire, aire, pasa, pasa, que tengas la puerta abierta la alegr¨ªa pa¡¯ la casa. Esta letra del cantaor Jos¨¦ Merc¨¦ sonaba en el Hospital 12 de Octubre porque la doctora Victoria Trasmonte se la pon¨ªa a Juan Pedro Herranz, de 62 a?os, cuando estuvo ingresado durante 55 d¨ªas en cuidados intensivos por coronavirus. Ana Rubio, su mujer, confiesa que ha necesitado pastillas para dormir y que ha perdido 10 kilos. El ¨²nico momento en el que pod¨ªa comer era tras ver la cara de Juan Pedro en la tablet. ¡°Cuando me llamaban me daba la vida, ese d¨ªa reviv¨ªa¡±, recuerda. La conexi¨®n virtual le permit¨ªa verlo por unos minutos, aunque fuese postrado en la cama y en una situaci¨®n l¨ªmite. Y es que la doctora Trasmonte lleva luchando toda la pandemia por el derecho de los pacientes a ver a sus seres queridos a trav¨¦s de las pantallas. Asegura que esas videollamadas ayudan a mejorar la condici¨®n an¨ªmica de los enfermos, y que los beneficios tambi¨¦n se trasladan a las familias, que se llenan de energ¨ªa para seguir adelante.
La doctora Trasmonte preguntaba a Elena, la hija de Juan Pedro, qu¨¦ canciones le gustaban a su padre para pon¨¦rselas mientras estaba en la UCI. Ella le cont¨® que siempre escuchaban Aire, de Jos¨¦ Merc¨¦, y que ahora se hab¨ªa convertido en un himno de resistencia, que la bailaban por casa su madre y ella cuando los ¨¢nimos flaqueaban. Tramonte consigui¨® que el propio Jos¨¦ Merc¨¦ grabara un v¨ªdeo de apoyo, en donde mandaba ese aire que tanto necesitaban los pulmones de Juan Pedro. Cuando ¨¦l, ya consciente, pudo verlo, no se lo pod¨ªa creer. ¡°?Que dice mi nombre!¡±, exclamaba, con los ojos como platos. Esto fue posible gracias a M¨²sica en vena, asociaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro que fomenta la m¨²sica en directo en entornos hospitalarios.
Juan Pedro acaba de salir de la UCI y est¨¢ poco a poco recuper¨¢ndose, pero su familia relata el infierno que ha pasado. ¡°Cuando volv¨ªa en el avi¨®n desde Holanda pensaba que no hab¨ªa nada que hacer, pero al verlo en la pantalla, aunque estuviera sedado, mi cabeza empez¨® a procesar y a asimilar. Le di ¨¢nimos y le dije que estaba guapo hasta con el tubo. Me convenc¨ª de que si mi padre estaba ah¨ª luchando, yo tambi¨¦n¡±, comenta Elena, que ahora teletrabaja desde Madrid para estar al lado de su madre.
Justo el fin de semana de la gran nevada Filomena, Juan Pedro empez¨® a sentir que se asfixiaba, y ni los ¨¢ngeles en 4x4 pudieron trasladarlo al hospital. Ana Rubio tambi¨¦n ten¨ªa s¨ªntomas leves de coronavirus. Lo recuerda como una experiencia traum¨¢tica. ¡°Mi hija estaba llegando de ?msterdam y llam¨® a la UME, a la polic¨ªa, al Samur¡ Yo estaba descolocada y pens¨¦ que se iba a morir en casa. El lunes por fin vino la ambulancia y la doctora me dijo que ingres¨® grav¨ªsimo. Le intubaron ese mismo d¨ªa¡±, comenta, todav¨ªa con un nudo en la garganta. Se revuelve cuando le viene a la cabeza la vez que le comunicaron que si en dos d¨ªas Juan Pedro no reaccionaba le desconectar¨ªan de la m¨¢quina.
Por mucho que la doctora Trasmonte exponga c¨®mo est¨¢ el paciente, el estr¨¦s que tiene la familia solo lo calma una imagen, opina esta m¨¦dico intensivista en la unidad de cuidados cardiol¨®gicos. Lleva cinco a?os en el Hospital 12 de Octubre y ha estado en primera l¨ªnea de la pandemia con enfermos cr¨ªticos. Para esta extreme?a, natural de Almendralejo, no vale la excusa de la sobrecarga de trabajo, porque la mayor¨ªa de videollamadas no duran m¨¢s de un minuto. Lamenta que en junio, cuando se acab¨® la primera ola, igual que se fueron los aplausos, se fue la voluntad de la gente. Desde esa fecha hay muchos hospitales que no hacen videollamadas, advierte.
Muchos enfermos cr¨ªticos tienen la pesadilla recurrente de que sus familiares han fallecido, explica Trasmonte. Pueden incluso entrar en un estado de confusi¨®n que obliga a atarles de pies y manos o a sedarlos de nuevo. ¡°Adem¨¢s despiertan con un pulm¨®n tan inflamado que notan que el aire no les entra. Si ven a sus seres queridos por la pantalla no se agitan y se tranquilizan. Esto facilita que el paciente pueda ser quitado de la ventilaci¨®n mec¨¢nica precozmente¡±, declara.
Para la doctora Trasmonte no vale la excusa de la sobrecarga de trabajo, porque la mayor¨ªa de videollamadas no duran m¨¢s de un minuto.
Por eso, quiere que se establezcan bases legales y ¨¦ticas para este tipo de comunicaci¨®n y que cualquier profesional de la unidad pueda participar. ¡°El auxiliar, el enfermero, el celador, el fisio o la se?ora de la limpieza. Que todo el mundo si ve que el paciente est¨¢ solo le pregunte si quiere hablar con la familia, que le ponga m¨²sica o alg¨²n v¨ªdeo en la tablet. Son esos cuidados que no est¨¢n en nuestro contrato, pero que realmente aportan bienestar¡±, afirma la doctora. Pero para conseguirlo se necesita del apoyo de las instituciones y de las empresas tecnol¨®gicas, porque muchas veces los hospitales no tienen fondos o no invierten lo suficiente para poder otorgar estos servicios, indica. La plataforma Acortando la distancia H12O, de la que Trasmonte es parte, ha facilitado dispositivos con conexi¨®n a Internet para que los enfermos aislados mitiguen la soledad con videollamadas. La realidad es que no siempre hay wifi, ni datos para conectarse, ni tablets disponibles.
El objetivo de Trasmonte no es m¨¢s que dar valor a que el paciente nunca pierda el contacto con su familia en un ingreso, sobre todo cuando hay herramientas para impedirlo. ¡°No tiene sentido que podamos reunirnos con amigos y no podamos acompa?ar a nuestros familiares ingresados. As¨ª se ha hecho siempre en el Hospital 12 de Octubre y tenemos que poder recuperarlo. Si un paciente necesita algo b¨¢sico, el familiar puede colaborar con los profesionales en ese cuidado porque a veces tienen sobrecarga de trabajo. Todo contribuye a su recuperaci¨®n¡±, alerta Tramonte.
La historia de Juan Pedro y el sufrimiento de su familia ha sensibilizado a los profesionales y ha sentado precedente, dice la doctora. As¨ª el Hospital 12 de Octubre ya ha empezado con la jornada de puertas abiertas para permitir las visitas. A Juan Pedro le queda camino por recorrer pero, al menos, se ha cumplido aquello que so?¨® Jos¨¦ Merc¨¦: ¡°La melod¨ªa lo puso a volar¡±.