El protocolo de Madrid para paliar las olas de calor en los centros educativos: no estar bajo el sol o regar las plantas por la noche
Los directores de colegios e institutos se quejan de que el plan de la Administraci¨®n regional incluye recomendaciones vagas y carece de una memoria econ¨®mica para llevarlo a cabo
Los casi 1.500 colegios e institutos p¨²blicos de la Comunidad de Madrid recibieron hace un par de semanas un documento titulado: ¡°Plan de alerta y prevenci¨®n frente a olas de calor¡±. Un escueto PDF de 11 p¨¢ginas con el protocolo que deben seguir los centros para ¡°disminuir los efectos en la salud [...] que puede provocar el aumento brusco de la temperatura ambiente¡±. La sorpresa del personal docente al leer el contenido del texto fue may¨²scula: muchos de los puntos son mer...
Los casi 1.500 colegios e institutos p¨²blicos de la Comunidad de Madrid recibieron hace un par de semanas un documento titulado: ¡°Plan de alerta y prevenci¨®n frente a olas de calor¡±. Un escueto PDF de 11 p¨¢ginas con el protocolo que deben seguir los centros para ¡°disminuir los efectos en la salud [...] que puede provocar el aumento brusco de la temperatura ambiente¡±. La sorpresa del personal docente al leer el contenido del texto fue may¨²scula: muchos de los puntos son meras recomendaciones ¨Dcomo ¡°evitar la radiaci¨®n solar directa¡± o ¡°habilitar zonas de sombra¡±¨Dy queda en manos de cada escuela establecer medidas de prevenci¨®n concretas. Los directores de los centros denuncian que el plan es insuficiente, poco riguroso y que carece de una memoria econ¨®mica para llevarlo a cabo.
¡°M¨¢s que medidas, son consejos y pautas de sentido com¨²n, para que los directores hagamos, por nuestra cuenta, lo que podamos. Una vez m¨¢s, trabajo extra para los centros¡±, critica por tel¨¦fono Rosa Rocha, la nueva presidenta Adimad, la asociaci¨®n que agrupa al 80% de los equipos directivos de los centros de secundaria de Madrid. Algunas de las recomendaciones, se queja, requieren una inversi¨®n de dinero de la que colegios e institutos carecen. Por ejemplo: disponer a?reas de descanso, colocar carteler¨ªa para alertar de los riesgos o reforzar la protecci¨®n con toldos y pantallas vin¨ªlicas, entre otros. ¡°Eso los centros no lo pueden comprar. Vale, s¨ª, bajamos las persianas. Pero, ?los toldos o las zonas de sombra? Tendr¨ªamos que sacarlo del presupuesto para este curso¡±, a?ade Rocha.
En su centro estudian 800 alumnos, pero en otros de la regi¨®n hay hasta 1.700 matriculados. ¡°No podemos estar detr¨¢s de todos para que beban agua y que jueguen donde no da el sol. Adem¨¢s, no hay espacios de sombra para tal cantidad de ni?os y adolescentes¡±, critica Rocha. Isabel Galv¨ªn, secretaria general de la Federaci¨®n de Ense?anza de CC OO de Madrid, se?ala que ¡°gran cantidad de colegios e institutos p¨²blicos son antiguos o se encuentran desmantelados¡±, especialmente desde que el temporal Filomena arras¨® con las pocas zonas de arbolado de las que dispon¨ªan. ¡°Este plan es un parche. No prev¨¦ una reforma de las instalaciones y deja a los directores con las manos atadas¡±, afea Galv¨ªn.
Otra de las medidas propuestas por la Comunidad de Madrid, bajo el t¨ªtulo ¡°riego nocturno¡±, dice as¨ª: ¡°Durante la noche, se recomienda regar los solados de los espacios libres de parcela para rebajar la temperatura ambiente¡±. Galv¨ªn califica la propuesta de ¡°rid¨ªcula y denigrante¡± para los equipos directivos de los centros. ¡°?Qui¨¦n va a regar por las noches si no nos dotan de m¨¢s personal?¡±, se pregunta Rocha, e indica que los directores cada vez asumen m¨¢s funciones que no les competen. ¡°Es demasiado, no somos expertos y no disponemos de tiempo para analizar la casu¨ªstica del centro, elaborar propuestas y llevarlas a cabo¡±. Esto ¨²ltimo es una cr¨ªtica a uno de los apartados del plan, donde la comunidad propone un ¡°guion¡± para que cada centro se encargue, por su cuenta, de redactar el an¨¢lisis, las propuestas de acci¨®n y las actuaciones frente a una ola de calor.
¡°La Consejer¨ªa de Educaci¨®n se exime de su responsabilidad, aunque la ley [el Real Decreto 486/1997 de seguridad en los lugares de trabajo] dice que es la que tiene que organizar estas medidas. Lo delega a los directores y parece que lo que les est¨¢ sugiriendo es que contraten una empresa externa para desarrollar el plan. No todos se lo pueden permitir¡±, censura Galv¨ªn.
A finales del pasado junio, la Inspecci¨®n de Trabajo redact¨® un requerimiento para la Consejer¨ªa de Educaci¨®n de Madrid, tras varias denuncias remitidas por CC OO. En el texto, se recoge la visita del inspector a siete colegios e institutos de la regi¨®n, para medir la temperatura en las instalaciones. Por ejemplo, en uno situado en Fuenlabrada, en el aula A de sexto de primaria se alcanzaron los 36 grados, y ninguna de las mediciones realizadas baj¨® de los 30 grados. El Real Decreto mencionado estipula que ¡°la temperatura de los locales donde se realicen trabajos sedentarios propios de oficinas o similares estar¨¢ comprendida entre 17? C y 27 ?C¡±.
La inspecci¨®n concluye que ¡°la Administracio?n competente¡± debe garantizar la seguridad y salud de sus trabajadores de los centros educativos en general y adoptar ¡°las medidas te?cnicas y organizativas que resulten procedentes que permitan garantizar unas condiciones ambientales adecuadas¡±. Todo ello, a llevar a cabo desde la recepcio?n de la propuesta, enviada el 27 de junio de 2022 a la Consejer¨ªa de Educaci¨®n, que a la publicaci¨®n de esta informaci¨®n todav¨ªa no ha respondido a las preguntas de este peri¨®dico.
Seg¨²n Galv¨ªn, todo esto se enmarca, adem¨¢s, en un contexto donde los centros est¨¢n ahogados por los costes de la energ¨ªa y la luz: ¡°Este protocolo, que se supone que quiere cumplir los requerimientos de la inspecci¨®n, es totalmente insuficiente. Lo lanzan porque el a?o pasado hubo golpes de calor en muchos centros educativos, pero llevamos m¨¢s de cinco a?os exigiendo un protocolo concreto para olas de fr¨ªo y calor¡±. Rocha advierte de que muchas de las tareas, como elaborar la carteler¨ªa o concienciar a los alumnos, recaer¨¢n sobre el profesorado. ¡°Nos convertimos en delegados de prevenci¨®n de riesgos laborales y en m¨¦dicos, porque en muchos centros no hay enfermera y en caso de emergencia su recomendaci¨®n es simplemente llamar al 112. Ya est¨¢ bien¡±.
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